Me estiro en la cama mirando el cuarto que me a tocado.
Este se situaba el primero de las mujeres, por si pasaba algo podía enterarme perfectamente.
Pero no estoy aquí para estirarme sobre una cama.
Me levanto y saco la ropa y libros del baúl, al final lo guarde todo de nuevo en su lugar.
No sabía como ser Auror, y el resto tampoco. Eso se notaba en nuestros actos.
Salgo del cuarto y camino largas zancadas por el pasillo de cuarto de las chicas.
Al llegar al final repito la accion.
Hasta que me doy cuenta que era la única en el pasillo y salgo de la torre, dirijiendome al despacho del director.
Pero para ansanchar mi sorpresa, me encuentro con los otros tres miembros de la manada, que tampoco sabían que era lo que tenían que hacer y tenían la misma idea que yo.
-Sorbete de limón-me explicó Dumbeldore, que debído a el peligro que puede haber hoy día, sea la contraseña que yo y la manada usemos para poder entrar.
La manada no estab prevista que viniera conmigo, pero finalmente Jorf arrastro a sus dos compañeros.
Toco la puerta suavemente y una tos seguido de un "adelante" hace que abra la puerta.
Al entrar mi vista y la de los demas se coloca en Dumbeldore, y luego en la silla, solo había una.
Y ahí, comienza una pelea por saber quien se sienta.
Mario cae al suelo y agarra la pierna de Alfoy, haciendo que caiga al suelo con el.
Empujo a Jorf haciendo que caiga de espaldas sobre Alfoy.
Comienzo a correr a la silla y me logro sentar antes que el resto.
Dumbeldore nos mira sobre las gafas con el ceño fruncido, a modo de interrogacion.
-Somos todos muy perezosos-explico.
Mi vista se desvía al fenix que tenía a su espalda.
-Es un fenix, son criaturas muy hermosas...Listas y capaces....-explica- Al morir renacen de sus propias cenizas...¿no es genial? Ademas las lágrimas de fenix son capaces de curar cualquier herida, por muy grande que fuese.
-Asombroso-musita Jorf.
Alfoy aparece en forma de lobo a mi lado, se sienta en el frío suelo y el resto se acerca a mi lado y espalda.
-¿A que se deve esta...Peculiar visita?-interroga Dumbeldore.
-No sabemos como ser buenos Aurores-explico.
-¡Nisiquiera sabemos que hacer!-exclama Mario.
-Lo que debeís hacer es vigilar los pasillos del instituto, además de que pronto, os daré unos horarios, indicandoos en que aula, si estais en una, ir.
-Ahhhh-decimos al unisono.
-Valla mojon. -argumenta Mario.
-¿Quieres irte a casa?-pregunta Dumbeldore desafiante.
El niega y reimos.
-¡Muy bien!-exclamo-¡Choqué esa director!
Planto la mano delante de su cara y el director la mira dudoso, finalmente acepta y la choca.
-Dumbeldore-nos giramos y vemos a Snape.
-¡Una pregunta más Severus!-me pongo en pie y Jorf golpea a Mario, haciendo que caiga sobre Alfoy, despiste que aprobecha para sentarse. -¿Qué hacemos cuando estamos en casa?
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Obviamente (BORRADOR) [Draco Malfoy y tu]
FanficSIN CORREGIR -¿Me odias? -Mmm, obviamente. -Pero ¿me amas?-el frunce el ceño -Obviamente, ¿y tu me amas a mi? -Obviamente. Esta historia no es solo mía y tiene personajes y escenas que pertenecen a J.K,ROWLING