Capitulo 26

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El despertador llevaba sonando por más de 20 minutos, pero eso no le importaba a Maya, porque lo único que ella quería era hundirse entre las mantas y hacer desaparecer el resto del mundo, ya estaba cansada de tener que fingir dureza con el vaquero, cada vez que la miraba se le cortaba el aliento, quería devolverle mirada y sonreírle o decirle algún apodo cariñoso que hacía más fuerte su complicidad, pero las cosas habían cambiado y no podían volver a ser lo mismo, tenía que seguir demostrando que no le quería, tenía que fingir que el corazón no se le partía por la mitad cada vez que el ojiverde buscaba con desesperación acercarse a ella, tenía que seguir con esta farsa por Riley y por ella misma. Al final se levantó consiente de que llegaría tarde y que llegando a la escuela la estaría esperando un castigo del profesor por su impuntualidad. Maya se alisto rápido y salió corriendo lo más rápido que pudo para llegar a la escuela, aunque correr ya no le serviría de nada porque la última vez que vio el reloj, este indicaba que ya llevaba 5 minutos de retraso y eso que estaba a mitad de camino.

Al llegar y para su mala suerte estaba el profesor Matthews mirándola entre enojado y decepcionado, a él no le gustaba la impuntualidad pero haría una pequeña excepción por la rubia, porque sabía que últimamente pasaba por cosas muy difíciles.

—Maya llegas tarde — Dijo Corey soltando un suspiro, a la rubia se le estaba haciendo costumbre y no importaba cuantas veces la castigaran ella seguía llegando tarde — Solo pasa y que no se repita ¿entendido? — Maya asintió y se dirigió a su puesto, tratando de regular su respiración agitada.

—Maya ¿te quedaste dormida? — Pregunto Farkle con mirada preocupada por la tardanza de su amiga.

—Si – respondió escuálidamente, tratando de restarle importancia para que el ojiazul no se preocupara más, porque ver a Farckle preocupado le oprimía el corazón y más si ella era la causa.

—Como siempre — Dijo Zay con un tono burlón, ganándose una mirada venenosa de la rubia.

La clase comenzó muy aburrida para todos menos para Farkle que como siempre prestaba atención a todo y anotaba en su cuaderno. Hasta a Isadora parecía no interesarle la clase lo cual era impresionante pero desde que salía con Zay parecía estar más relajada lo cual no era malo tampoco, aunque si impactante ¿Qué tanto puede afectarte el amor?, la respuesta era mucho y Smackle era prueba de ello.

Todos divagaban en sus pensamientos ignorando la aburrida clase cuando fue interrumpida por un chico a quien aun sin conocerlo le agradecían porque estaban luchando para no dormirse encima de la mesa y comenzar a roncar.

El profesor Matthews salió hablar con él chico extraño un momento y luego regreso con unas hojas en la mano.

—Bueno al parecer tenemos un nuevo estudiante — Dijo Corey sentándose de nuevo en su escritorio acomodando todo el papeleo nuevo que le acababan de entregar — Aunque la mayoría ya lo conoce — Todos comenzaron a susurrar entre ellos quien podría ser aunque un ojiverde ya tenía sospechas de quien se trataba y no le hacía nada de gracia — Reciban a Charlie Gardner.

El chico entro al salón y todos estaban sorprendidos de verlos de nuevo, con todos nos referimos a Maya, Farkle, Zay y Isadora porque Riley y Lucas ya sabían que regresaría. Inmediatamente el aire se sintió más tenso y las respiraciones eran lo único que se escuchaba en todo el salón.

—Gracias señor Matthews — Dijo Charlie con una sonrisa de agradecimiento mirando de reojo a un rubio que parecía querer arder en cólera.

—Puedes tomar asiento — Dijo Corey empezando a escribir en el pizarrón, maldiciendo internamente que aquel chico hubiera aparecido justo cuando aquel grupo de adolescentes estaban en una fase de crisis, seguramente su llegada empeoraría las cosas y él no podía hacer nada más que mirar y aconsejar si así se lo pedían.

Genius Vs HuckleberryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora