Genius Vs Huckleberry

Capitulo 29

La clase de Física estaba por finalizar, pero eso no quería decir que el profesor no utilizara cada segundo de los minutos que faltaban para escribir la tarea de la siguiente semana, aunque lo cierto es que tanto Zay como Lucas parecían más concentrados en la ventana que daba al patio trasero de la escuela que en la clase, cada uno estaba sumido en sus pensamientos, acomplejados por sus problemas y bastante dudosos de su actuar. Pero entonces el timbre sonó, inundando cada aula y los oídos de cada alumno, brindándoles un momento de felicidad al saberse libre, al menos por unos minutos. Ambos vaqueros salieron a paso lento hacia sus casilleros, entonces Zay sintió la necesidad apremiante de pedirle un consejo a su mejor amigo, después de todo no tenía la confianza suficiente con alguien más para hablar sobre sus conflictos amorosos, porque Smackle podía llegar a ser igual de compleja que Riley y Maya.

—Hey — Dijo Zay apoyándose en uno de los casilleros y expulsando todo el aire que llevaba acumulando en los pulmones.

—Hey — Respondió Lucas guardando sus libros, con gesto abrumado.

—Que emoción con la que me hablas — Bromeo el moreno y el rubio le lanzo una mirada amenazante— Vale ya entendí — Levanto las manos en señal de paz.

—¿Qué quieres Zay?- pregunto el ojiverde exasperado por la actitud tan extraña de su mejor amigo.

—¿Que te hace pensar que quiero algo?- debatió el moreno, preguntándose a si mismo que tan acertado era solicitar la ayuda de Lucas en estos momento, tal vez y le daba un gran consejo o tal vez le aventaba el libro de matemáticas a la cara.

—Pues acabamos de salir de clases y en vez de ir como un loco desesperado a buscar a Smackle a su clase de ciencias estas aquí conmigo- señalo lo obvio, con un ligero tono de resentimiento en la voz, recordando todas las veces que el moreno lo abandonaba por irse con su novia.

—Pues me caes bien — Lucas lo miro con una ceja alzada, tratando de no alterarse, aunque eso no era tan fácil últimamente— Bueno necesito un consejo...- admitió, cansado de no encontrar una solución por el mismo.

—¿Un consejo? — Pregunto Lucas confundido y Zay asintió como si se resignara a morir — Dime, aunque no creo que pueda darle un consejo útil a alguien en estos momentos — Cerro su casillero y se apoyó en él , a la espera de que su mejor amigo hablara de una buena vez.

—Créeme también pensé eso — Susurro Zay para sí mismo pero Lucas lo escucho, lo cual logro que el rubio sintiera furia, pero no con el pelinegro, si no consigo mismo por no poder darle una solución a sus problemas de una buena vez.

—¿Cómo dices? — Pregunto molesto, contando mil veces hasta 10 para no montar una escenita de enojo frente a toda la escuela.

—Nada nada — contesto, tratando de enviarle una enorme sonrisa al rubio, pero por el nerviosismo tan solo le pudo salir una mueca extraña.

—¿Vas a decirme de que se trata o no?- cuestiono el ojiverde, dispuesto a marcharse de ahí antes de que su amigo lo hiciera enfurecer de verdad y las cosas terminaran mal. Aún tenía la mano vendada por la última platica que tuvo con el moreno y por ahora no tenía intenciones de romper el mobiliario de la escuela ni mucho menos tener que ir a la enfermería.

—Es sobre Smackle...- susurro en voz baja el pelinegro, acomodando mentalmente sus ideas para tratar de explicar que es lo que sucedía.

—Oh- exclamo el rubio un poco confundido pero alegre al mismo tiempo, por lo menos el tema de hoy no se trataba sobre él.

—¿Oh? — Lucas asintió mirándose la venda de la mano y jugueteando con una orilla que sobresalía de entre lo demás — ¿Porque oh?- pregunto Zay, temiendo que ese Oh quisiera decir algo malo.