el marine [h.s.]

Veintitrés.

Canciones para el capitulo:

Hallelujah- Paramore.

Let me sign- Robert Pattinson.

Tears of an angel- Ryandan.

23

LEA'S POV.

"¡NO! ¡POR FAVOR!" Abrí mis ojos en el preciso instante en el que Harry grito.

"Oh Dios," Desorientada, me senté en la cama e inmediatamente voltee a Harry, completamente destapado de cualquier cobija.

"Harry..." Le hable, dejándome guiar por la luz que entraba por la ventana, pero Harry seguía moviéndose frenéticamente.

"Oh Dios, no no" Susurro atropelladamente. Desesperada, comencé a zarandear sus hombros, intentando despertarlo de aquel horrible sueño.

Sus manos se aferraban a sus pantalones de pijama, apretando fuertemente su puño.

"Harry." Hable mas fuerte, tocando las arrugas de horror que se habían formado en su frente. Aquella primera y única noche que le había visto en esta misma situación parecía mas lejana de lo que era realmente y no recordaba exactamente que había hecho para despertarlo.

"¡Detente, no!" Completamente fuera de mi, puse ambas manos en su rostro y lo moví de un lado a otro hasta que de forma estrepitosa, abrió sus hermosos ojos mirándome con terror.

De un momento a otro, había quitado mis manos de su rostro y se había levantado de la cama torpemente hasta quedar en la esquina de la pared contraria a nuestra puerta, respirando trabajosamente.

"Harry.." Murmure un poco sorprendido de sus acciones.

"Dame un segundo." Respondió con voz contenida, inclinando su cuerpo hacia adelante, sin despegar sus ojos del suelo de nuestra habitación.

Sin perder tiempo, me levante de la cama, con mis ojos ya acostumbrados a la oscuridad de la habitación e hice un ademan para acercarme a el.

"No." Levanto uno de sus brazos en mi dirección, abriendo su mano en un gesto para que me detuviera y así lo hice.

"Pero-"

"No." Repitió firmemente, tranquilizando su respiración. "No te acerques."

No lo comprendía. La ultima vez que había tenido pesadillas, casi había implorado que lo sostuviese en mis brazos. Había acudido hacia mi para consolación y ahora, que estábamos mas unidos y que deseaba casi con dolor consolarlo, el no quería que me acercase a el siquiera.

"¿Estas bien?" No respondió, sus ojos nunca encontrandose con los míos. "Harry.." Di un paso hacia el, pero la forma brusca con la que volteo a verme me hizo parar.

"Maldita sea, que no te me acerques." Gruño, esta vez mirándome fijamente.

"Por favor, yo solo-"

"¡Cállate de una jodida vez!" Estallo, pasando ambas manos por su cabello en una actitud desaliñada. "Dios, deja de estar encima de mi todo el maldito tiempo." Mirándome tan enojado, como si hubiera roto su posesión mas preciada, salió echa una furia del cuarto, azotando violentamente la puerta de nuestra habitación, sin importarle ni un momento que fueran las tres de la mañana y Noah estuviera a unos cuantos metros de nosotros.

---------

Cerré la puerta de entrada detrás de mí, y eche un vistazo nervioso a la sala de estar y comedor del departamento. Solté un suspiro de alivio, cuando no vi a Harry a la vista.

La noche anterior... había sido larga. Cargue las bolsas de la despensa, y camine hacia la cocina, dejándolas sobre la barra y recargándome contra esta después. Cerré mis ojos y masajee mi sien.