el marine [h.s.]

Treinta y siete.

Canciones para el capítulo

Everytime- Britney Spears

37

LEA'S POV.

¿Cómo pudo hacerme esto?

"Sh, aquí estoy."

¿Cómo pudo hacernos esto?

"Dios, respira Lee." Él fue quien inventó ese estúpido apodo de mierda.

"No me digas así." Solloce más fuerte, enterrando mi cara en el hueco de sus rodillas.

"Lea, respira." Mia quito el cabello de mi rostro. "Tienes que tranquilizarte."

"¿Es que no has escuchado lo que te he dicho?" Me enderece junto a ella, ambas sentadas en el suelo del departamento. Pegue mi espalda a la pared y mis piernas a mi pecho, intentando de nuevo apagar el dolor y la rabia que crecía conforme pasaban los minutos. "No puedo tranquilizarme. ¿Qué voy a hacer?" Llore.

"Primero vas a darte una larga ducha caliente, segundo vas a ponerte bolsas en los ojos y tercero, vas a mandar a la mierda a Harry."

"No." Enterre mi cabeza en mis rodillas. "No puedo perderlo, Mia." Mi cuerpo temblaba, en sintonía con los sollozos desconsolados que salían de lo más profundo de mí. "No puedo, no puedo, no puedo." Mia paso uno de sus brazos por mi cuerpo, abrazándome fuertemente.

"¿Estas segura que se está viendo con esa mujer?"

"Si." Sorbe por mi nariz. "Él dijo que prefería estar con ella que conmigo." Reí sin humor y Levante la mirada a mi mejor amiga, que completamente fuera de lo común, apretaba fuertemente su mandíbula. Su rostro estaba en una máscara de serenidad, pero podía notar lo furiosa que estaba.

"Condenado hijo de puta."

"¿Puedes culparlo?" Pase ambas manos por mi rostro, intentando borrar mis lágrimas, aun cuando había más cayendo incontrolablemente. "Soy una pobre versión de lo que solía ser."

Harry se había enamorado de la vieja Lea. Esa jovencilla rebelde e inmadura de diecisiete años, que creía poder sola contra el mundo entero. Aquella chica, que no lloraba con nada y era más fuerte de lo que muchos lograban a serlo. No de este desastre de mujer de veintiséis años, con demasiadas responsabilidades y lágrimas.

"Cállate, Lea. Ni se te ocurra decir nada más."

El timbre se hizo sonar e inmediatamente, mi corazón salto.

"No, no, no." Repetí, volviendo a enterrar mi rostro entre mis rodillas.

"Si fuera Harry, hubiera entrado con sus llaves y si fuera Ethan, hubiera entrado sin tocar." Se levantó de mi lado. "¿Quién puede ser?" Sin dejar de llorar ridículamente, me encogí de hombros dejando que las lágrimas siguieran cayendo. Sin molestarme en detenerlas. Demasiado débil como para levantarme, simplemente me quede ahí hecha un ovillo contra la pared, dejando que quien fuera, me viera en este estado, pero ¿qué más daba? "¿Aaron?"

Inconscientemente, mis brazos se apretaron contra mis piernas en un reflejo de auto protección. La más mínima mirada fría de Aaron, me mandaría a un llanto desconsolado aún más fuerte.

Ni siquiera le agradaba a su mejor amigo, después de tantos y tantos años. La idea, me hizo soltar un sollozo aún más fuerte.

"¿Q-que ha pasado?" Su tono siempre frío, parecía preocupado. Buena actuación.

"Tu maldito amigo no está." Mia detestaba a Aaron casi tanto como el me detestaba a mí. Ella no dejaba pasar la forma en la que Aaron me miraba. Escuche a Mia intentar cerrar la puerta, pero lo que pareció la mano de Aaron, choco contra la puerta evitándolo.