XI

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You & I.

Louis posó su mano en su cuello con la esperanza de encontrar su cadena, y por gran casualidad no la tenía puesta, frunció el ceño ¿Será esa su cadena?

     —¿De dónde sacaste esa cadena? —el oji-verde arquea una ceja y lo mira insignificante.

     —¿Y por qué debería de darte explicaciones? —contesta poniendo cara de asco.

     —Porque por desgracia, la mía, que es muy parecida a esa, —la señala. —se ha perdido. —Harry toma la cadena y sonríe maliciosamente.

     —Lo siento, pero ésta cadena es mía.

     —No recuerdo haberte visto esa cadena, Harry. —Gemma interrumpe, los dos la ven y Harry la fulmina con la mirada.

     —No ayudas, Gemma. —contesta mirando a Louis. El oji-azul entrecierra los ojos.

     —Ladrón de mierda. —murmura, toma a Harry del brazo y lo lleva hasta dentro. Gemma entra sonriente cerrando la puerta detras de ella. Toma asiento y observa a los dos chicos.

     —Dame mi cadena. —exije.

     —¡Que no es tu cadena, Gemma miente!

     —¿A quién tratas de engañar, Hazza? —Harry frunce el ceño.

     —Mi nombre es Harry, estúpido. —Louis abre los ojos como platos.

     —Estúpido tú. Ahora dame la cadena.

     —No insistas. —Harry caminó hasta las escaleras, Louis vuelve a tirar de su brazo.

     —Dame mi cadena. —exije, mencionando cada palabra detenidamente.

     —Oye ¡Suéltame! —grita. Gemma soltó una carcajada desde la sala.

     —¡No hasta que me devuelvas mi cadena, maldito ladrón! —Harry suspira pesadamente.

     —Bien. —luego bufó. Toma la cadena y se la quita. —Toma. —Louis frunce los labios y toma la cadena.

     —Imbécil. —susurra.

     —¿Qué? —pregunta Harry, poniendo sus manos en su cintura.

     —Lo que escuchaste, imbécil. —Harry aprieta su mandíbula y camina hasta su cuarto.

Louis se queda observando maravillado el “trasero” de Harry mientras éste subía las escaleras.

     —No te preocupes, Louis, lo tocarás pronto. —Gemma aprieta el hombro de Louis y camina hacia la cocina.

Louis arquea sus cejas. “Apretar el trasero de Harry sería muy buena idea.” su subconsciente habla, sacude la cabeza varias veces para poder sacar ese pensameinto de ahí y camina hacia la cocina.

     —¿Qué harás de cenar? —pregunta Louis parándose al lado de Gemma, quien veía la libreta de cocina de Anne.

     —Haré tacos. —responde.

     —¿Tacos?

     —Sí, es la comida favorita de Harry. —el oji-azul arquea una ceja.

     —Qué mal gusto tiene tu hermano.

     —Te conozco Louis, y sé que no vivniste sólo a cenar, así que tendré que hacer ésta cena para que puedas estar satisfecho.

     —Ay por favor. —bufa. —Bien, estaré en la sala.

     —Está bien.

Louis sale, mira hacia la sala, luego hacia las esclaleras, entrecierra los ojos y muerde su labio inferior, dió un paso hacia la sala pero luego se detuvo, volvió a mirar hacia las escaleras, sonrió malévolamente y corrió hacia las ellas.

La maravillosa jugada de Gemma Styles ∽ L.S©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora