XII

14.6K 1.4K 1.1K
                                    

Perfect.

Ya habían bajado a cenar, cada segundo Louis y Harry se dirigían miradas inconscientemente. El teléfono de la casa comenzó a sonar, Gemma limpió sus labios y corrió hacia él.

     —¿Bueno? —contesta, posó un mechón detrás de su oreja.

     —Gemma. —la voz de Anne, sonaba desde la otra línea.

     —Mamá ¿Cómo estás? —Anne suspira.

     —Los extraño, pero volveré pronto ¿Cómo está toda por allá? —Gemma frunció los labios a pesar de que Anne no la estaba viendo. Mira hacia el comedor, asiente al ver a Louis y Harry concentrados en los que hacían.

      —Ahm... Todo bien, mamá.

El rizado y el castaño seguían cenando, Harry miró el plato de Louis y frunció el ceño.

     —¿Por qué tienes más que yo? —Louis lo mira y también frunce el ceño.

     —Porque no soy un animal comiendo. —responde dubitativo.

     —No soy un animal comiendo, lo que pasa es que éste es mi plato favorito, así que me tienes que dar del tuyo. —Louis atrajo su plato más a él para que Harry no pudiera ponerle la mano.

     —Nunca. —contestó tomando un bocado de su taco.

Harry apretó su mandíbula y tomó el plato de Louis bruscamente.

     —¡Oye! —gritó Louis.

Anne escuchó el grito, Gemma vuelve a observar a la cocina y ve que Louis y Harry volverán a empezar otra pelea de inmaduros.

     —¿Qué fué eso? —Gemma tapa su boca con su mano.

     —Nada mamá, sólo fue un ruido de los chicos de la casa de al lado. —contestó tratando de sonar calmada.

     —Bien. —sonaba confundida. —¿Podrás pasarme a Harry? —Gemma tapa el micrófono.

     —¡Harry! —grita. Éste dirige la mirada de odio hacia Gemma. —Es mamá. —señala, Harry suavizó su rostro y caminó hacia allá con la mirada fija hacia donde Louis.

Gemma le pasó el teléfono y Harry comenzó a hablar un poco nervioso. Gemma caminó hacia el comedor, donde se encontraba Louis recogiendo toda la comida tirada al suelo.

     —Parecen niños. —comenta ayudando al oji-azul.

     —Correción. Tu hermano parece niño.

     —Correción. Los dos. —afirma.

Louis bufa y camina de espaldas hasta chocar con Harry, quien había terminado la llamada y caminado hacia el comedor. Tenía el ceño ligeramente fruncido.

     —Fíjate por donde caminas, duende.

     —¿Te pusiste ahí delante a propósito?

     —Si te hubiera visto no me pondría, imbécil.

     —Yo tampoco te ví, idiota. —se miran fíjamente a los ojos, Gemma juraba que por los ojos de estos dos salía fuego y por las orejas humo.

     —Ayúdenme a lavar los platos. —ordena Gemma, los chicos la observan y se dan una última mirada para luego caminar hacia ella.

Horas después, Louis se despide de los chicos y parte a su departamento sorprendido, por no haber matado a Harry con el tenedor. Harry se metió a su cuarto luego de hablar tonterías con su hermana, se tiró en su cama y miró al techo.

La maravillosa jugada de Gemma Styles ∽ L.S©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora