Después de lo que paso ayer en la noche no sabía cómo sentirme. Si sentirme aliviada, mal o confundida. La reacción de Camila me había dejado realmente preocupada, se había puesto a llorar luego, pero su reacción fue menor a lo que realmente esperaba. Me sentía realmente preocupada, no pude dormir bien en toda la noche pensando en las cosas que Camila podría estar pensando. No pude dormir por la inquietud de saber que las cosas no están bien entre nosotras y que todo era por mi culpa.
Era ya de día, tenía que arreglarme e ir a entrenar, mi día tenía que continuar a pesar de que no haya dormido nada. Debía ir a terapia, esa idea me incomodaba porque eso significaba que tenía que ver a Maddie después de lo que había pasado entre nosotras.
Llegué a mi lugar al club, fui a los camerinos a cambiarme. Empezaba a sentirme incomoda, no había visto a Maddie realmente no quería hacerlo. Antes de salir del camerino, respiré profundo y me dirigí a la sala donde me hacen mis sesiones. Cuando entré quede un poco confundida porque no estaba Maddie en la habitación esperándome, era una de las chicas que ayuda a Maddie con el resto de las terapias.
"Hola Lauren, Maddie no vendrá el día de hoy, pero me dejo un listado de todos tus ejercicios. Cuando quieras, podemos empezar." Habló la chica de ojos miel.
Empezamos con la sesión. Tenía que ser sincera, me sentía realmente aliviada de que Maddie no haya venido, así tendría hasta el día de mañana para poder pensar en lo que le diría cuando la viera. No iba a poder evitar que fuera una situación incómoda, pero podía hacer que no fuera una de esas conversaciones con monosílabos y silencios incomodos.
Terminé mi sesión y fui a las duchas. Donde me encontré con Steph y Sam, ellas me preguntaron sobre el mensaje que les había mandado hoy en la mañana donde les decía que necesitaba hablar con ellas. Les conté lo que paso con Camila anoche.
"Ella solo dijo "Está todo bien"?" preguntó Steph.
"Sí, solo dijo eso. Tenía una mirada triste y luego se le salieron algunas lágrimas." Contesté.
"¿Y qué hiciste?" preguntó Sam.
" Solo me acerqué a abrazarla y fue cuando me di cuenta del mensaje que le había mandado a Dinah..." Me sentía realmente desesperada.
"Bueno, Lauren. Es una situación realmente delicada, no esperes que esté saltando de alegría por lo que hiciste." Me dijo Sam mientras ataba los cordones de sus zapatos.
"Claro, cabeza de balón. Si Kristie me engañase yo no sabría si seguir con ella, no sería sano para mi. Aunque es bueno que se lo hayas dicho. Dale tiempo." Stephie me dio palmadas en la espalda.
Me quedé pensando y luego me fui a mi departamento. Steph tenía razón, debía darle tiempo y también espacio.
Hice un FaceTime con mi hermana, ella legaría hoy ya que su vuelo sería en un par de horas. Cortamos la conversación y me tiré en la cama unos minutos, debía hablar con Dinah, sacarle información sobre lo que sucedía en la cabeza de Camila, ella tiene que saber.
Tomé las llaves del auto y conducí hasta su casa. Al tocar dos veces apareció tras la puerta.
"¡Pero si es la gran Lauren Jauregui!" Una gran sonrisa en su rostro desapareció al verme la cara. "Lauren Jauregui después de pasar por las drogas. ¿Qué te sucede?"
"Dinah, estoy pasando un momento de mierda"
"Vamos, entra."
Pasamos a su hogar y nos sentamos en las sillas que estaban colocadas en su soleado patio.
"¿Qué sucede campeona?" Dijo sirviendome un vaso de agua.
"Seguro lo sabes, la he cagado con Camila. Fue una estupidez pero estaba borracha." Dije evitando su mirada.