El camino de vuelta hacia el hotel fue silencioso. Ninguna de las tres decía nada. Había momentos en los que mis amigas me miraban y luego se miraban entre ellas. Sabía que el "reencuentro" con Camila iba a ser difícil, pero no al punto en el que ella diga que no me conoce... Porque vamos, conozco hasta el lunar que tiene en el dedo del pie.
Horas más tarde, mi celular empieza a sonar. Dinah.
-Lauren Michelle! - Gritó en mi oído. - Como que estás en la ciudad? Podemos vernos? Podemos vernos ahora?
-Hola Dinah, estoy muy bien y vos? Sí muy contenta de volver al lugar donde nos conocimos. Estoy en el hotel en este momento pero si queres que nos encontremos en algún lugar estaría bien.
-Okey genial, nos vemos en la cafetería de siempre. Busco a Ally y nos encontramos allá. - Cortó el teléfono y yo sonreí.
Entré a mi habitación, donde también dormía Sam. Ella estaba acostada en su cama mirando MTV y Steph, como siempre pegada a nosotras aunque no dormíamos en la misma habitación, estaba en mi cama con su celular, seguramente hablando con Gina, su madre.
-Estás bien? - Me preguntó la rubia.
-Podría estar mejor Mewis, en este momento voy a encontrarme con mis viejas amigas. - Le comenté mientras buscaba mi buzo negro con capucha.
-Ten cuidado sí? - Me dijo la menor sacando los ojos de su celular por un segundo. - Cualquier cosa llamanos y vamos al rescate, amor. - Bromeó. - No en serio. Llamanos si necesitas ayuda.
-Está bien, gracias pequeña rata.
-Te queremos cabeza de balón.
Ese apodo me lo gané en el segundo entrenamiento del primer año en Boston. Estabamos haciendo una serie de ejercicios para el golpe a la pelota y los chicos del equipo de béisbol eran los que nos tiraban las pelotas. Acostumbrada a mi antiguo equipo, solamente nos tiraban cinco pelotas seguidas. Pero en los entrenamientos de Boston se tiran diez...
Al golpear fuertemente la quinta pelota me di vuelta para mirar a mis compañeras para ver quien era la siguiente, me saqué el casco y cuando todos gritaron "CUIDADO JAUREGUI" me di vuelta y la pelota me dio justo en la sien y me desmayé.
A partir de ese momento las chicas mayores, las encargadas de poner los apodos a las nuevas del equipo, me pusieron primero "cabezota" pero con el tiempo se convirtió en "cabeza de balón".
Sentada en la cafetería, en el mismo lugar de siempre. Primero siento unas pequeñas manos en mis hombros y después los gritos de mis amigas.
Me levanté y abracé a mi amiga Ally y después a Dinah. Estan bastante cambiadas pero estan hermosas. Dinah ahora esta rubia y Ally está mucho más musculosa que siempre. Recuerdo que después que Troy y ella terminaron empezó el gimnasio, algo así como una obsesión.
-Te extrañamos tanto Lauren. - Me dijo la más enana del grupo de amigas mietras nos sentábamos todas.
-Qué tal todo? Cómo está todo en Boston? - Preguntó rápidamente Dinah.
-Está todo genial, somos las mejores del torneo nacional por el momento y todas quieren patearnos el culo. Si tenemos suerte quizás, sólo quizás, podamos entrar con mis amigas en el campamento de la selección nacional. - Comenté. - Que onda ustedes? Como les va en la universidad?
-A mí solo me falta este año más algunas materias del año pasado para poder terminar la carrera. He estado mejorado mucho, - Comentó Dinah. - Y eso de la selección, por Dios Laur, vamos a tener una amiga famosa! Más vale que tengas ese cuerpo bien trabajado para que nadie te patee el culo gigante que tenés. - Reímos.
-A mí solo me falta dar una materia para poder terminar. - Sonrió Ally. - Así que estás totalmente invitada a la fiesta.
-Sería genial volver a tener una fiesta con ustedes... - Hubo un silencio. - Y Normani? Qué es de su vida?
-Mmm, Normani no sólo ha cortado vinculo con vos si no con nosotras también, dejó nuestra universidad un tiempo después que vos nos dejaste. Hizo un casting para bailarina en una agencia bastante importante en el país y la tomaron. Ella vive acá pero siempre está viajando, por lo que tenía entendido ella quiere bailar para Beyoncé. - Comentó la polinesia.
-Eso es genial, me alegra saberlo que todas estemos muy bien. - Sonreí. Pero mis amigas se miraron entre ellas y asintieron.
-Tengo que preguntarlo, cómo está Camila?
-Ella está bien, Lo. Ella dejó la universidad después que sus padres se separaran y Alejandro se haya ido de su casa. Las cosas se le hicieron un poco más difíciles con el tema de la economía y bueno, decidió que ella no quería volver si no quedarse, entonces está trabajando en una librería doble turno. Ya no hablamos muy seguido con ella. - Ally me contó y yo me sorprendí.
-Wow, eso si es... duro.
Lo que me acababa de contar mi amiga era duro. Ella nunca me lo contó. Un poco me decepcioné ya que pensé que era alguien importante para ella.
-Yo la vi a Camila hoy. Fui con mis dos amigas a recorrer y a una de ellas le gustan mucho las librerías y los libros. Justo entramos a una y ahí estaba ella. Me la choque y me trató como si nunca me hubiera conocido, como si nunca me hubiera visto en su puta vida. Es frustrante. - Conté con pena. Dinah me dio un mimo en el brazo.
-Camila ya no es la Camila dulce de siempre, Lo. Supongo que es momento que lo dejes de lado y trates de olvidar. - Dijo la más alta. - En fin, así que nuevas amigas? Son tan geniales como nosotras? Les gusta Beyoncé?
-Sí, se llaman Stephanie y Sam. Son geniales pero no tienen nada de estilo como lo tienen ustedes, preciosas. Y no lo sé, supongo que sí. - Conté y agradecí el cambio de tema de mi amiga.
Dinah me dejó en el hotel más tarde y subí, las noticias me dejaron un poco en shock entonces me di una ducha rápida, cene y me fui a dormir.
El segundo entrenamiento del campus de perfeccionamiento comenzaba y nos mezclaron con las chicas de los demás equipos. Yo no estaba con ninguna de mis amigas o compañeras en el grupo donde me había tocado.
Eran grupos de 12 deportistas, la practica duraba cinco horas, pero se dividía en, por ejemplo, una hora era técnica, otra hora era la fuerza, otra hora había que tomar apuntes y demás.
Es bastante entretenido y el jefe del campus anunció que así iban a ser los grupos hasta el término del acontecimiento.
Al salir, me encontré en los vestidores con mis dos inseparables amigas y empezamos a charlar de los ejercicios y demás.
Y al salir de la cancha de la universidad, lo único que me faltaba ver. Camila saludando con un pequeño beso en la mejilla a una chica rubia y flaca que estaba en mi equipo, mientras le daba una pequeña bolsa de almuerzo.
-Por qué esta maldita chica está en cualquier lugar donde vamos desde que llegamos a New York? Mierda. - Dijo Sammy.
-Vamos Lauren. Vamos hacia el hotel. - Me dijo Steph y ambas me agarraban de los brazos para llevarme hacia el colectivo que nos llevaba hacia el hotel.
Mucha información para estar apenas unos días en New York. Camila primer diciéndome desconocida, después mis amigas contándome que había dejado la universidad y que ya no era la misma, ahora... quizás esté de novia con la maldita flaca del campus. Por qué la vida me está odiando tanto en este momento? Mierda.