Save me, please. - Ziall

XXXII. Te he extrañado.

Holiwis!

hoy es mi cumpleaños y por eso publico cap aparte de que ayer estube toda la tarde/noche escribiendo jejejeje. disfruten mucho linduras, nos leemos pronto! Muuuuuak♥

-lorenna☆

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《 Te he visto en tus peores momentos y aún sigo pensando que eres la mejor persona que he conocido. 》

*Narra Niall*

Estaba en el refugio de nuevo, acompañado de Lucca, Marco, Harry, Liam y Louis. Estábamos sentados en el salón, Lucca contaba todos nuestros dos años juntos, también contó cuando me convertí en loro haciendo estallar en carcajadas a Liam y Louis, quienes no sabían la historia.

-madre mía, Niall, no sabía que tus poderes funcionaran sin querer.

-estaba sonámbulo, ¿qué queríais que hiciera? - todos rieron y escuchamos la puerta del garaje.

-¿quién será? - miramos hacia la puerta y a los dos segundos una mata de pelo morena apareció. -¡hombre, Malik! te estábamos esperando. - dijo Harry levantándose yendo hacia él. Yo también me levanté.

-hola Zaynie... - sonreí levemente y él se quedó de piedra mirándome. - ¿Zayn? - pasé mi mano por enfrente de su cara y entonces reaccionó.

-Niall... - se acercó lentamente hasta quedar nuestras caras a centímetros.

Me acarició la mejilla y yo cerré los ojos ante el tacto. Podía notar su cálido aliento sobre mis labios, el profundo silencio que reinaba el ambiente y las miradas atentas de los demás que se encontraban allí, seguramente, mirándonos. Abrí los ojos y me perdí en los suyos, mezclando agua y tierra. Zayn sonrió y yo le devolví la sonrisa, con su mano aún sobre mi mejilla izquierda, con su boca a dos milímetros de la mía. Odiaba la distancia, por lo que la acorté. Sus labios volvieron a juntarse con los míos sin desesperación, simplemente el mismo tipo de roce que cuando le besé en mi casa cuando él se marchaba, el mismo sentimiento que hace años yo sentía por él volvía a resurgir.

Con los ojos cerrados me concentré, pensé, deseé, hasta que el tiempo se detuvo. Nos separamos y al abrir los ojos todo estaba parado excepto nosotros dos.

-¿qué haces? - dijo mirando a todos lados.

-no quería que este momento acabara. - volvió su mirada a la mía y sonreímos. - te he extrañado, Zaynie.

-y yo, rubio. - volví a juntar nuestros labios y nos separamos al instante. - me temo que la guerra acabará. - le miré extrañado.

-¿a qué te refieres? - cogió mi mano y me llevó hacia el desván. Bajamos las escaleras lentamente y al llegar abajo vi a uno de los arcángeles que vivió conmigo aquella vez en casa de Alcander. - ¿qué haces?

-lo tengo como rehén. Alcander dice que Michael es uno de los mejores y le he dicho que si lo quiere volver a ver deberá acabar la guerra. Me dijo que no, que hasta que no te consiguiera que no terminaría la guerra, entonces me marché, dándole a entender de que mataría a su arcángel favorito, aunque tengo otros planes. - sonrió con maldad.

-¿qué planes?

-le iré enviando regalos. Vamos. - empezamos a subir las escaleras otra vez y al salir todo seguía aún congelado. - Niall, una cosa...

-dime.

-¿me sigues amando? - me quedé en shock mirándole y agaché la cabeza. - Niall, si no quieres dec-

-sí, aún lo hago. - levanté la mirada y lo miré a los ojos. - sigo amándote. - sus ojos estaban perdidos en los míos, me miraba con sorpresa y a la vez con alegría.

-¿de verdad? - soltó en un susurro.

-sí. - respondí de la misma manera.

-rubio...

-Zaynie...

-te amo. - sonreí y me acerqué un poco más a él.

-te amo, también. - junté nuestros labios y coloqué mis brazos en su cuello, rodeándolo y acercándolo más a mí si se podía. Él colocó sus manos en mi cintura, profundizando el beso, dejando su sabor en mi saliva. Continuamos besándonos durante un prolongado tiempo, nuestras lenguas formaban una batalla en nuestras bocas y nuestras caricias aumentaban, hasta que lo detuve. - Zayn... - abrí los ojos y él seguía manteniéndolos cerrados.

-dime.

-lo siento.

-¿por qué? - abrió los ojos y los mantuvo encima de los míos.

-por irme.

-eso ya quedó en el pasado, ahora solo quiero concentrarme en el futuro y en el presente.

-de acuerdo. - volví a besarle. - ¿crees que debería volver a descongelar el tiempo?

-espera, antes quiero hacer una cosa. - sonrió y fue a la cocina, cogió un bolígrafo y se acercó otra vez.

-¿por qué todo lo que necesitas está en la cocina?

-por que es la habitación más cercana del salón y allí siempre hay de todo. Ahora, observa. - cogió el bolígrafo y le dibujó un bigote a Harry, un pene en la frente a Louis y como el bolígrafo era rojo le pintó los labios a Liam. Le dibujó colorete a Lucca y a Marco no le hizo nada. Yo estaba muerto de la risa observando como le dibujaba todo tipo de cosas a los chicos, hasta que volvió a tapar el bolígrafo y dejarlo en su sitio. - ya está. - se puso a mi lado. - ya puedes descongelar el tiempo.

-de acuerdo. - cogí su mano y cerré los ojos, descongelando el tiempo. Marco me miraba con decepción.

-sois tan adorables. - dijo Liam y entonces Harry empezó a reír. - ¿de qué ries? - miró al rizado y comenzó a reír también. - dios, Harry menudo bigote tienes. - Harry dejó de reír y miró a Louis.

-cariño, sé que te gustan los penes, pero no hace falta que te los dibujes en la frente. - Louis se levantó extrañado y se miró al espejo.

-¡¿pero qué...?! ¡Harry!

-¡oye, que yo no he sido! - el rizado se acercó y se miró. - ¿pero y este bigote? - entonces Zayn y yo estallamos en carcajadas. - seréis capullos.

-lo siento, no pudimos contenernos. Veros allí, congeladitos, sin nada gracioso no tenía gracia.

-¿congelásteis el tiempo pedazo de idiotas? - miramos a Liam y asentimos. - me cago en... - se miró él también al espejo. - ¡y encima con bolígrafo! ¡joder, que esto cuesta mucho de quitar! os mataré, en serio.

-no, en broma mejor. - Liam nos fulminó con la mirada.

-bueno, de lo que estábamos hablando antes de que el gracioso de Zayn nos pintara. Debemos hacer un plan para poder acabar la guerra y ganar.

-¿ganar? - empezó a reír Marco. - eso es imposible.

-no tan imposible. Tengo a Michael encerrado abajo, he ido antes a ver a Alcander y me ha dicho que Michael es uno de los mejores, así que mientras lo tengamos aquí no hará nada, yo mismo le he amenazado con matar a su arcángel favorito si se acercaba. - todos miraron al moreno y entonces un gran barullo de voces se hizo presente en la sala.

Dejé de prestar atención al no entender nada y me acurruqué a Zayn, quien pasó su brazo por mis hombros y me atrajo más hacia él. A los diez minutos hubo un silencio absoluto, casi aterrador.

-¿qué pasa? ¿por qué os calláis todos de repente? - pero todos se giraron hacia atrás y yo decidí mirar hacia allí también. - Alcander... - susurré.