CAPITULO 24

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Lo primero que sintió, fue que tenía mucho frío, lo segundo, que aun respiraba.

Abrió los ojos poco a poco y vio algo borroso que se zarandeaba sobre él.
Se frotó los ojos y esta vez lo vio mejor; era un árbol, que se movía por el viento a la par que sus hojas caían al suelo.
Intento incorporarse para ver donde estaba, pero aún estaba bastante débil así que se tuvo que sujetar al tronco del árbol para no caerse.
Una vez sujeto a el, miró a su alrededor.
Estaba en una especie de "claro", en mitad de un bosque.
Estaba contemplando las vistas, cuando se acordó de sus amigos.

Miró a su alrededor y vio un cuerpo tirado en el suelo.
Intentando no caerse, fue hacía él.
Al agacharse, se dio cuenta que era Richard.
-Richard. Dijo sacudiendo a su amigo. Por favor despierta.
De pronto su amigo movió los párpados.
-Eso es! Vamos amigo.
-Christopher?
-Si. Dijo este sonriendo. Soy yo.

Richard abrió los ojos y miró a su amigo.
-Que ha pasado? Donde estamos?
Claro. Pensó Christopher. Lo último que recordaba Richard era estar en la iglesia peleando contra Zabdiel.
Se sentó a su lado y le acarició el cabello.
Le iba a decir algo cuando de pronto escuchó un ruido entré los árboles.
-As oído eso? Le preguntó a Richard.
Este asintió sin dejar de mirar hacía donde había sonado aquel ruido.
Derrepente se comenzaron a escuchar voces.
-Son Erick y Joel! Dijo Richard incorporándose.
Christopher le ayudó a ponerse en pie y fueron hacía ellos.

-Erick! Joel! Gritaban mientras corrían hacía las voces.
Estaban corriendo, cuando vieron una hoguera.
-Es ahí! Señaló Richard.
Entonces salieron de entre los árboles y fueron hacía la hoguera.
-Erick, Joel!
De pronto se detuvieron en seco.
Si que habían dos personas, pero no eran sus amigos.
Richard y Christopher se quedaron quietos, enfrente de aquella pareja.
-Perdón. Dijo Christopher. Habéis visto a dos chicos jóvenes?
Los dos negaron con la cabeza.
-Os encontráis bien? Les preguntó el hombre al ver que ambos tenían heridas por todo el cuerpo y la ropa rota.
-Si. Dijo Richard mirando a Christopher. Solo estamos buscando a unos amigos.
-Queréis que os ayudemos? Les preguntó la mujer.
-No. Dijo Christopher agachando la cabeza. No quiero que nadie mas muera.
-Muera? Quien ha muerto? Preguntó el hombre poniéndose en pie.
Richard y Christopher se miraron uno al otro, sin saber que responder.
Entonces el hombre se acercó a ellos.
-Me llamo Tomas y ella es mi mujer Maria.
-Yo soy Christopher, y él es Richard.
-Bien, dijo el hombre sonriendo. Es un comienzo.
La mujer se acerco también a ellos.
-Tomas, están asustados. Es que no lo ves?
Entonces el hombre les miró a los ojos.
-Que es lo que ocurre? Preguntó agachándose junto a ellos.
De pronto, Richard comenzó a llorar.

Christopher miró a su amigo y le abrazó con fuerza.
-No puedo mas.. Dijo Richard llorando.
-Os podemos ayudar. Dijo el hombre. Por favor.
Christopher se apartó de su amigo y les miró.
-Esta bien.

-Christopher! Erick! Richard! Por favor! Gritaba Joel intentando soltarse.
Al despertar, vio que estaba atado a una silla de metal, en una especie de cabaña. Y ninguno de sus amigos estaba a su alrededor.
-Nadie va a ayudarte. Dijo una voz tras él.
No hacía falta darse la vuelta, sabía quién era.
-Zabdiel...
Entonces este se puso enfrente de él.
Tenía el rostro bastante desmejorado, se le notaban  mucho las ojeras.
-Porque haces esto? Le preguntó mirándole fijamente a los ojos negros. Y no me digas que para volvernos locos, porque eso ya no me lo creo.
Zabdiel se comenzó a reír.
-Eres un chico muy listo Joel Pimentel, pero yo lo soy mas.
-Que quieres decir con eso?
-Sé tu secreto.
Eso hizo que Joel se quedará callado.
-Eso esta mejor. Dijo sonriendo. Vamos ha hacer un trato; tu me das tu sangre, y yo suelto a tu amigo.
-Y como sé que vas a cumplir tu palabra?
-No lo se, tendrás que confiar en mi.
-No se te da muy bien negociar.
-De acuerdo. Dijo Zabdiel sonriendo. Esta es la oferta; tu me das tu sangre, y yo no solo suelto a Zabdiel, si no también a Erick.
Al ver que Joel se había quedado en shock, este se comenzó a reír.
-Sabía que con "ese" era diferente. Dijo guiñando un ojo. Pero tranquilo, tu secreto está seguro conmigo.
-Porque quieres mi sangre?
-No es tu sangre Joel, es la sangre de cualquiera. Desde el principio he querido vuestra sangre, no lo se porque pero la necesito para vivir. Todas las veces que he poseído o secuestrado a uno de vosotros, era con el fin de conseguir vuestra sangre.
-Tuviste secuestrado a Erick durante días, porque no se la quitaste?
-Porque el ritual solo se completa cuando la sangre que obtienes no es arrebatada, si no regalada.
-Claro.. Dijo Joel. Por eso querías volver loco a Zabdiel, para que se cansará de vivir y te regalará su sangre.
-Así es. Dijo Zabdiel sonriendo. Pero tu y tus amigos siempre estáis en medio de todo!
-Que clase de ritual es?
-Uno de Vudú. Dijo mirando al techo y poniendo los ojos en blanco.
-Entiendo... Dijo Joel mirando al suelo.
-Entonces, mi querido Joel.. Aceptas el trato?
-Antes quiero ver a Erick, saber si esta bien.
-Esta bien. Dijo Zabdiel alejándose.

VUDÚ [CNCO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora