Suspiré antes de ponerme de pie. Al darme la vuelta, quedé frente a frente con el espejo. Me observé con algo de sorpresa, hacía mucho tiempo que no me miraba en un espejo, podía observar mi rostro, estaba más pálida de lo normal y tenía unas pequeñas ojeras debajo de mis ojos. Me encontraba más delgada de lo que recordaba que estaba. Mi cabello estaba revuelto, había perdido el brillo que un día tuvo al igual que mis ojos.
Me desconocía...pero esta era la nueva yo. Y no creo que lo pueda llegar a cambiar.
Bajé mi mirada hasta llegar a ver mi vestimenta, traía puesto un vestido de color lila, regalo de Jennifer y Natalia, que me llegaba un poco más arriba de las rodillas, con un lazo de tono blanco perla que envolvía mi pequeña cintura, y combinado con unas Vans color celestes con cintas blancas. ¿Un vestido con unas Vans? Bueno, así era mi forma de vestirme. No casi siempre.
Salí de la habitación con mi maleta, solo eran dos maletas pequeñas de tono café. Me senté en una silla que se encontraba sola, la cual estaba enfrente de la habitación donde me había estado quedando. Me recosté, pude sentir el aire remover mi cabello, más tarde pude observar por el rabillo del ojo como se acercaba un chico rubio. El cual reconocí de inmediato. Niall.
– ¿Lista para irnos? –preguntó. Yo asentí para luego levantarme. – a ver...déjame ayudarte. – dijo estirando sus manos para tomar ambas maletas.
– Gracias. – susurré. Él asintió y comenzó a caminar hacia afuera. Yo lo seguí a paso rápido, pues Niall caminaba bastante rápido para decir verdad. Eso me recordaba a las carreras que hacíamos de pequeños en gimnasia, Niall siempre destacaba por quedar en primer puesto, nadie conseguía alcanzarlo.
Cuando salimos fuimos al estacionamiento, pude ver un coche negro, me sorprendí un poco al verlo.
– ¿Es tuyo? –pregunté. Él sonrió de medio lado, para después meter las maletas en el maletero.
– Desearía que fuera mío. – dijo después de sacar las llaves de su bolsillo trasero – pero no es mío. Es de Harry. – yo asentí. Él abrió la puerta del copiloto y me dejó entrar, después de entrar en el coche entro él. Cuando entró arrancó el coche y salimos del estacionamiento del hospital.
Después de unos minutos, llegamos a una hermosa casa. Se podía decir que era de doble planta, era ancha de un color azul marino, ventanas grandes con madera negra y cortinas blancas, era una casa simplemente hermosa, podía observar que había un pequeño patio detrás de la casa, y un enorme árbol también.
– Y bueno...llegamos sé que no es lo mejor pero... –lo interrumpí.
– No es...es hermosa. –dije viéndola, Niall se bajó del coche y yo después de él.
Sacó mis cosas del coche, y se paró a mi lado. Pude ver como la puerta se abría y dejaba ver a un chico alto, con rulos y unos ojos esmeraldas profundos que desconocía.
Pensaba que iba a venir donde Niall, pero no. Pasó a mi lado y me golpeó con el hombro, haciendo que perdiera un poco el equilibrio.– Tranquilízate Harry, no tiene ningún rasguño –dijo Niall, lanzándole las llaves al chico. Vi como le dirigía una mirada un tanto frívola a Niall...y cuando me vió a mí, sus facciones se relajaron, pero de inmediato volvió su mirada indiferente.
- Y este estúpido es Harry - señaló Niall mientras que aquel chico no hacía mucho caso a sus palabras.
- Hola - dijo el chico secamente.
– ¿Quieres ir adentro? –preguntó Niall, quien pudo también observar la mirada de Harry.
– Claro –le dije.
– ¡Pequeña Nemo! –sentí unos brazos rodear mi cintura y como me levantaban del suelo.– ¿Cómo has estado, preciosa? –dijo bajándome un poco Zayn.
– Bien, creo que bien. –le respondí, el sonrió abiertamente.
– ¿Dónde están los demás, Zayn? –preguntó Niall aún con mis maletas en sus manos.
– Están en la cocina, con Gema. –respondió Zayn a la pregunta de Niall. Sentí una mirada penetrante en mi espalda, cuando me di la vuelta pude ver que Harry no dejaba de mirarme.
Me sentía un poco intimidada a causa de su profunda mirada, era una mirada indiferente y a su vez penetrante.
– ¡Nemo! –Exclamaron Louis y Liam al unísono– ¿Cómo estás? –volvieron a preguntar al mismo tiempo. A veces me daban miedo.
– Bien. –dije.
– ¿Tienes hambre, Nemo? –preguntó Liam amablemente.
– Un poco. –admití con una tímida y pequeña sonrisa de lado.
– Bueno Nemo ahora mismo te preparo algo de comer –dijo Liam con una enorme sonrisa.
– ¡Oh claro! _____ ella es Gema –dijo Liam, entonces pude ver a una chica bastante linda– Gema ella es _____. – ella se acerco a mí y me dio un beso en cada mejilla.
– Gema, ¿Le puedes enseñar la habitación a Nemo? –preguntó Louis, quien se estaba tomando una coca cola.
– ¡Claro! Ven conmigo, cariño, y no me digas Gema, dime Gem –dijo tomando mi mano y tirando de ella.
No sé por qué tengo la impresión de que están todos locos, o, quizás simplemente son bastantes hiperáctivos. Fuera lo que fuera me ponían bastante nerviosa, no paraban de gritar y tambalearme de un lado hacia otro.
Y solo acabo de llegar, no quiero saber cómo de loca estaré cuando ya lleve un tiempo viviendo aquí.
– Eres muy linda, ¿Lo sabías? Me imagino que todos los hombres están detrás de ti. –dijo Gema, sentí como me sonrojaba por lo último.
– Gracias, y bueno no –ella me vió como si hubiera dicho una blasfemia.
– Bueno cariño esta es la habitación, si necesitas algo solo grita, ¿Sí? –dijo Gema, yo asentí.
"Si necesitas algo grita". Pensé en lo último que dijo la chica.
Mierda, creo que voy a volverme loca aquí.
La habitación era completamente hermosa, las paredes eran de un tono azul marino con un morado lila ,mis colores favoritos, y tenía un balcón que quedaba justo enfrente del jardín. La cama era de color blanca con sabanas negras y moradas. Había un armario, un espejo, una mesita de noche y un baño.
– No te asustes, están un poco locos –dijo Niall disculpándose con una sonrisa.
– No importa. Son buenas personas – Dije simplemente - Por cierto, ¿qué era lo que ibas a decirme en el hospital?
– Bueno... Que habíamos pensado que como Harry y tú vais a tener que convivir juntos – se rascó la nuca - sería buena idea que paséis un día juntos para conoceros mejor y tal
– ¿Por qué? –pregunté. A decir verdad, la presencia de Harry me incomodaba un poco, parecía un chico poco hablador y cortante. Una persona bastante pasota.
– A Harry le cuesta un poco relacionarse con gente nueva como a ti, y sé perfectamente que no tendréis ningún tipo de contacto si no os ayudamos los chicos y yo – dijo este - no quiero que te sientas incómoda viviendo con un desconocido.
Asentí, aunque tampoco es que estuviera muy de acuerdo con esa idea.
– ¿Tienes hambre? – dijo de manera burlona, pues mi estómago había hecho un extraño ruido. Asentí – Ven vamos, Liam cocina muy bien
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6 meses junto a ti (Harry Styles y tu) [#Wattys2016]
Fanfic- Este es el fin - una lágrima cayó por mi mejilla - se acabó, no puedo seguir luchando... - No, jamás digas eso - apretó mi mano - lucharemos juntos hasta el final.