Nina
Ya quedaba poco para que el verano terminase, y estaba con Nora.
Había quedado con ella para tomar café, y luego nos fuimos de comprar.
Al parecer Nora también se había echado novio, pero ese novio no la estaba tratando muy bien, a si que decidí no hablarle nada de mi relación con Liam.
No quería que se sintiera mal.
Le propuse que se viniera con nuestros antiguos compañeros y con Liam para ver los fuegos artificiales, que era dando la despedida al verano y acepto.
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Liam me había llevado a esa cueva, la que tanto me gustaba pero no podíamos ver las piedras de colores por qué era de noche.
Liam intentaba arrancar una de esas piedras de colores para mí pero era inútil el esfuerzo.
Le tocaba del brazo para que lo dejara de intentar y se giraba riéndose.
—Quiero que tengas una piedra de color, se que te gustan.—
—Pero es imposible, no seas cabezota.—
Liam rodaba sus ojos, se acercaba a mi poniendo sus manos sobre mi rostro y me dio un beso en mis labios sonriendo.
—Aquí fue la primera vez que te besé, ¿Lo recuerdas?—Susurró en mis labios.—
Asentí sonriente devolviéndole el beso.
—Claro que me acuerdo, parece que fue ayer.—
—Y ya han pasado dos años.—
Asentí levemente.
Liam se apartaba de mi pero tomaba de la mano y nos sentábamos en la arena seca que había dentro de la cueva aunque nos mojabamos los pies de la orilla y miramos la luna.
Nos quedábamos mirándonos hacia al cielo, y mientras tanto, notaba la mano de Liam en mi pelo, acariciándolo.
—Estaba pensando en lo que me dijiste al principio del verano, sobre que tú y yo nos parecemos.—
Desvíe mi mirada a Liam.
—Pero en realidad no nos parecemos mucho.—Liam me miraba de repente a mi, con una voz seria.— Tenemos cosas en común pero a tu eres fría, como si no te importará las cosas.—
Me estaba creando confusión sobre lo que decía.
—¿Quieres decir que no me importas?—
Negó con naturalidad.
—No, quiero decir qué puede ser que yo sea más cariñoso, que yo demuestre más que tú a mí, y a veces me haces dudar de que si me quieres o no.—
—Liam, yo soy a sí.—
—Lo sé.—Suspiró, y me cogía de mi barbilla.— Nina, yo estoy loco por ti, quiero que sepas y que entiendas eso.—
Asentí rápidamente mirándole a sus ojos.
—Claro que lo entiendo.—
—Y te quiero.—Dijo repentinamente.— Te quiero y a lo mejor eres de esta manera por qué a veces no te lo digo, pero te quiero.—
Decidí callarme para no romper este momento, y decidí asentir nuevamente.
Liam se inclinaba a mis labios y me beso.
Le seguía el beso agarrando su cara.
Se escucharon los fuegos artificiales, y ambos apartamos nuestros labios, mirando el cielo.
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Vidas Cruzadas
RomanceUn accidente y vidas cruzadas. Una pareja adolescente, y una pareja adulta. Se encuentran los cuatros en un estado grave en el mismo hospital. Aiden, el adolescente de 21 años recordará su vida y compartirá momentos con Nina de veintiocho años. Ambo...