03 | UN DIOS EN LA TIERRA

3.7K 325 59
                                    

CAPÍTULO III: UN DIOS EN LA TIERRA

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

CAPÍTULO III: UN DIOS EN LA TIERRA

Un profundo dolor en mi pecho me hizo despertar bruscamente, me incorpore atosigado y cuando me senté en el lugar donde me encontraba acostado, me percate que era una cama.

Una pequeña cama.

Observe a mi alrededor dándome cuenta que estaba en una habitación campestre, bastante pequeña para mi gusto y demasiado simple.

Al levantarme de la cama esta emitió un molesto sonido provocándome una mueca. Me acerqué a la ventana de la habitación analizando donde me encontraba. Un prado recorría por donde se viera junto a unos árboles a lo lejos que acompañaban el paisaje.

Era un lugar bastante agraciado, jamás había estado en un lugar como este.

Comencé a recorrer la pequeña habitación, estudiándola. Encontré muchas cosas las cuales no conocía su propósito, pero simplemente las dejé ahí pensando que seguramente era algo absurdo.

¿Acaso me encontraba en Midgard?

¿Dónde estaba?, ¿Qué hacía en una habitación campestre en mitad de un prado?

No pude seguir realizándome preguntas ya que escuché un ligero crujido al momento en que la puerta se abría.

Una mujer apareció a través de esta, mirándome con asombro y algo de curiosidad, me acomodé en posición defensiva. No la conocía, y por lo que dejaba ver, parecía una simple mujer. Aún así no podía fiarme.

—¿Quién eres tú? — la observe en su totalidad intentando darme una idea. Era alta, aunque no tanto como yo. Poseía el cabello oscuro, casi negro y unos ojos azules, tan azules que de alguna manera fugaz me recordó al Thor. Moví mi cabeza ligeramente observando más de aquella extraña, poseía una vestimenta muy inusual. Demasiado ajustada y no traía vestido como normalmente hacían las Asgardianas.

Definitivamente aquella clase de vestimenta se me hacía conocida.

—Esa pregunta debería de hacerla yo. — la mujer se acercó a la cama haciendo que retrocediera, la habitación era tan pequeña que me topé con algo a mi espalda provocando que algunas cosas cayeran. —Venía a ver cómo estabas, si necesitabas algunas mantas o algo antes que despertaras. Pero por lo que veo me ganaste.

Hice una mueca al no entender lo que había mencionado, ¿Ganar? ¿Qué había ganado exactamente?

—¿Quién eres? — volví a mencionar, ahora con más autoridad haciendo que ella me viera de mala gana.

—Soy Mia Campbell. — hizo una mueca. —¿Podrías moverte? Tiraste mis cosas.

Su voz cínica me molesto.

—¡No oses hablarle así a un Dios! — conteste autoritario mientras la observaba con desdén. —¡Soy Loki, de Asgard! Hijo de Odín y heredero real del trono.

𝑺𝒊𝒆𝒎𝒑𝒓𝒆 𝒕𝒖𝒚𝒂. (𝙻𝚘𝚔𝚒 𝙻𝚊𝚞𝚏𝚎𝚢𝚜𝚘𝚗)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora