Después de ser desterrado a Midgard por los eventos ocurridos en «Avengers», Loki tendrá que aprender a convivir con los mortales.
La perspectiva del Dios del Engaño será cambiada completamente haciéndolo dudar respecto a todo lo que a vivido y lo...
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CAPÍTULO XLIX: STORMBREAKER
—Mia Laufeyson—
—Sabes que esto es una locura, no?
—Por supuesto. — Thor me observo. —Pero es lo que debemos hacer.
Llevábamos un par de horas viajando en la cápsula junto a Groot y Rocket. Estos se habían presentado a mi en cuanto abordamos la nave, ellos no eran la gran cosa pero me agradaba que se mantuvieran en silencio.
Excepto por el molestoso sonido del juego de ese árbol, me comenzaba a doler la cabeza.
—¿Por qué lo hiciste? — suspiré.
Me acomode frente a Thor mientras este observaba por el cristal el espacio.
—¿Hacer qué?
—Tú sabes...salvarme. — mi garganta se estrujó ligeramente, no quería acordarme de lo sucedido, pero me era imposible quitar ese dolor de mi pecho. —No debiste.
—Claro que si. — Thor se acomodó para acercarse más a mi. —Eres mi familia, lo único que me queda.
—Yo no quiero hacer esto, no puedo.
—Mia, escúchame. — suspiró. —Lo perdimos todo, ya no hay nada. Pero este no es motivo para rendirse, tal vez el destino lo quería así, nos quería juntos para luchar contra Thanos. — sus ojos se cristalizaron al igual que los míos. —Si mi deber es morir ahí, luchando contra él. Lo haré. Pero quiero que me acompañes, hasta el final.
—Thor, yo no puedo... después... después de todo esto, no sé si pueda. — escondí el rostro entre mis manos mientras jadeaba del dolor ligeramente. Dolía.
—No es sólo por ti, Mia. Debes comprender que no es sólo de nosotros esta lucha. — posicionó su mano en mi hombro. —Hay billones de personas ahí que si Thanos consigue las 6 gemas, perderán todo. Al igual que nosotros.
—Thor...
—No. No seas egoísta. Sufres, al igual que todos. ¿Pero dime, quién no a perdido alguien en su vida?
—Se que eres mi primo, pero Thor... Loki era todo para mi, sin él estoy vacía. Estoy llena de dolor, no creo que pueda concentrarme.
—Canaliza el dolor, y llénate de irá. — levante mi rostro y limpie ligeramente una lágrima. —Si está es nuestra última pelea, que valga la pena.
Thor dio una rápida mirada a mis manos unidas sobre mis piernas, observe notando que miraba el anillo sobre mi dedo.
—Yo...
—Es el anillo de Frigga. — sonrió. —Supongo que Loki te lo dio.
—Si.
—Él te amo más que a nadie. Siempre desee lo mejor para mi hermano, creo que lo obtuvo contigo.
