26.

1.4K 129 33
                                    

Cuando abrí los ojos, estaba tumbado en mi cama en posición fetal, solo con mi ropa interior, y tapado con las sábanas.
Zayn estaba a mi lado, despierto, boca arriba mirando al techo. Probablemente había estado ahí todo el día cuidando de mí.

Había tenido el ataque de ansiedad más fuerte de mi vida.
Temí creyendo que se trataba de un jodido ataque al corazón.
Se había sentido en realidad como si mi corazón hubiera comenzado a pararse y mis pulmones hubieran dejado de responder.
Había sentido que me moría.

Había estado muchas veces al borde de la muerte voluntariamente y nunca había tenido miedo.
Pero aquella vez había quedado aterrorizado.

— ¿Te encuentras bien?— preguntó Zayn cuando se percató de que ya había abierto los ojos.

Bostecé.
— Sí, bastante bien, aunque aún tengo el susto en el cuerpo.

Zayn soltó una suave risa ronca.

— He sentido mucho miedo, te lo prometo — susurró —. Pensé que te morirías en mis brazos.

Suspiré.
Zayn no se habría merecido eso.

— Uno de los enfermeros me dijo que era normal, pero debía tener un por qué. ¿Te ocurrió algo? — preguntó Zayn.

Aún con la cabeza apoyada en la almohada y en posición fetal, alce la barbilla para mirarlo.

— Un chico al cual no conozco de nada y el cual me espiaba... Intentó besarme y yo me puse muy nervioso...— admití, y diciéndolo en alto sonaba ridículo —, perdí los nevios y le di un golpe en la boca y una patada en las costillas.

Zayn se sorprendió tanto en ese momento que se atraganto con su propia saliva y comenzó a toser.

— Tienes...— siguió tonsiendo—, tienes que estar de broma.

— Lo digo muy en serio.

Zayn comenzó a reír como un niño pequeño.

— ¡Oh Harry! Podías haberme llamado y habría matado a ese maldito hijo de puta.

Zayn estaba mal de la cabeza y nadie podía negármelo.
E incluso siendo Zayn Malik, el chico que odia las drogas (pero no el tabaco), las peleas, y los escándalos, mataría si eso me hacía feliz.

El teléfono, al lado de Zayn , comenzó a sonar.
Quise levantarme de mi posición fetal para alcanzar mi móvil pero Zayn me amenazó con el dedo índice, dándome a entender que no me moviese de mi postura.
Hice lo que me pidió, y lo observé descolgar la llamada y llevarse el móvil a la oreja.

— ¿Si, hola?... Si, soy Zayn, Harry esta aquí... Él ha tenido un problema, nada grave, ya estuvo aquí la ambulancia... No no, nada personal... ¿Para qué? — me miró de reojo, y luego volvió a sumirse en un punto inhóspito de la oscura habitación —. Supongo, claro.

De repente Zayn posicionó el móvil ante mis ojos.
— ¿Puedes hablar?— murmuró.

Me acerqué al móvil con cautela.

— Hola— susurré.

— ¡Harry! ¿Qué te ha pasado? Lo siento.

Fruncí el ceño.

— Es... Largo de explicar Louis. ¿Por qué lo sientes?— dije confundido.

Oh, por lo que pasó, perdón si sentiste que te estaba evitando. No tuve un buen día.

— ¿Podríamos vernos ahora? Solo necesito darme una ducha — propuse nervioso, y no pude evitar morder mi labio inferior.
No iba a dejar, ni por encima de mi cadáver asqueroso, que Louis tuviera un mal día.

In My BloodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora