🔱Recuperando la cordura🔱

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—¡Ness es un tonto, le dije tantas cosas horribles y aún así fue, no debió hacerlo!—. Lucas replicaba entre sollozos.

—Lucas quizás está bien, a ellos no les conviene matar a un joven que puede tener información, seguro se ganó su buena paliza, pero debe estar vivo. —Claus abrazó a su hermano para consolarlo.

Kumatora, Duster y Lloyd saltaron del susto con lo que acababan de oír.
   
—¿Qué le pasó a Ness? —Preguntó la doncella con mucha preocupación.
   
—Lo atraparon los sirvientes del Rey. —respondió Claus.
   
—Claus no es mi intención empeorar las cosas, pero Ninten está muy extraño —comentó Duster.
   
Claus lo miró más de cerca para comprobar lo que Duster decía; el pequeño príncipe estaba sentado en un rincon dandose algunos golpecitos en la cabeza.
   
—¡Está recordando, tenemos que huir o nos matará a todos! —Exclamó Lloyd con nerviosismo y temor.
   
—¡Cállate idiota! —Claus le gritó.
   
Después de ese día ni Lucas ni Ninten se recuperaron. Lucas tenía prohibido salir a cualquier lugar, mientras que el príncipe Ninten se sentía culpable de lo que a Lucas le pasaba.

Duster le entregó por fin el costal de joyas a Claus y Kumatora se encargó de ir a permutarlas por dinero en efectivo y junto a Lloyd fueron por alimentos.

Duster le entregó por fin el costal de joyas a Claus y Kumatora se encargó de ir a permutarlas por dinero en efectivo y junto a Lloyd fueron por alimentos

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Ninten había despertado muy temprano en la mañana. Sin el consentimiento de nadie se levantó para rápidamente meterse en la cama junto a Lucas.

—¡Lu... lh! —Intentaba hablar Ninten, pero Lucas no despertaba y lo sacudió suavemente hasta que lo despertó.
   
—No tengo ánimos de nada... me quiero morir, por favor déjame en paz...

   
Pero el joven seguía sacudiendo levemente a Lucas, como si algo muy importante quisiera decirle. Lucas se quedó en silencio al darse cuenta y el menor se puso de pie tirando de las mangas del rubio.

—¿Quieres que te siga?
   
Ninten asintió con la cabeza.
   
Lucas tomó de su mano para que lo guiara. Ambos salieron de la cabaña y Kumatora los había estado mirando de reojo.

Apenas dejaron el lugar ella despertó a los demás y todos fueron siguiéndolos. Era muy oscuro todavía, lo que le impedía a Ninten saber si iba por el camino correcto. De vez en cuando se daba golpes en la cabeza con su mano libre.
   
Luego de unos minutos perdidos consiguieron dar con un pozo de cristalina agua. Ninten lo acercó. Lucas se sintió atraído e intentó tocarla.
    
—¡Nooo! —Lloyd gritó y Lucas retrocedió—. ¡Lucas esa agua está envenenada, es ácido!
   
—¿Por qué están aquí todos?
   
—Lucas, Ninten quiere matarte. Verás, cuenta la leyenda que ese pozo tiene una horrible maldición; persona que bebe de su agua muere a los pocos minutos y quien la toca envejece. Todo es una maldición.
Nadie se atreve a sacar el agua de este lugar. Por favor no tomes el riesgo.
   
—¿Y por qué Ninten ha de matarme? —Preguntó Lucas—. Volvió a poner su vista en el agua.
   
—¡Lucas! —Gritó su hermano y se acercó para untar la rama de un árbol, y al quitarla de allí se hizo polvo—. Lucas ni te atrevas, es peligroso.
   
Lucas miró a Ninten y él le asintió con la cabeza feliz con una sonrisa, Lucas también le sonrió y metió con confianza su mano en el agua...

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