🔱La desaparición de Lucas🔱

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Eran las nueve de la mañana y el príncipe Ninten fue el primero en despertar y al notar que algo no andaba bien comenzó a sacudir a Claus.

—¡Qué quieres ahora Niño mono! —Se quejaba Claus, Ninten le estaba dando tocones en el hombro.

—¡Claus!

—Lloyd despierta -dijo Claus-. Éste loco está intentando comunicarse conmigo.

—Oh, buenos días.  —Saludó Lloyd—. Veo que el príncipe intenta decir algo.

—No me digas...

—¡Lo tengo! —Chilló Lloyd—. Príncipe, estoy muy seguro de que usted está recuperando su memoria. Le preguntaré algo y usted sólo responderá si o no con la cabeza. ¿Usted quiere dormir o tiene hambre?

Ninten negó con la cabeza.

—¿Usted quiere decirle algo serio e importante a Claus?

Ninten asintió.

—Terminó el interrogatorio. Claus Ninten tiene que decirte algo serio e importante, lamentablemente habla peor que un bebé. —Dicho eso Lloyd se volvió a acostar para seguir durmiendo.

—¿Tontito que me quieres decir? —Preguntó Claus mirando a Ninten.

—L-Luta

—¿Lucas?

—S-sí.

Claus buscó a Lucas con la mirada, él no estaba por ningún lugar. Claus buscó a su hermano dentro y fuera de la cabaña, pero no lo encontró. Fue un poco más lejos supuso que podía estar en el lugar donde enterraron a Ness el día anterior, pero tampoco lo encontró en ese lugar.

—¿Y si lo atraparon? No, no -se sacudió la cabeza para no pensar en eso.

Ninten lo seguía a todos lados sin que Claus se percatase.

C-Ca... Causs —Ninten consiguió la atención por fin la atención del príncipe mayor.

—¿Qué haces tú aquí? Es peligroso.

—Lucas no... Lucas bien, Lucas bien muy.

—¿Dices que Lucas está bien?

—Lucas bien es, Lucas zhi.

—¿Cómo sabes que Lucas está bien?

—¡¡Bin Luksa!! —Ninten se estaba hartando de Claus y sus preguntas—. ¡Lucus bein Clus bien Lacas!

—Bueno, confiaré en ti ¿Vamos a casa?

Pasaron un par de días desde la desaparición de Lucas, Claus no lo admitía, pero estaba muy preocupado por su hermano

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Pasaron un par de días desde la desaparición de Lucas, Claus no lo admitía, pero estaba muy preocupado por su hermano. Ninten le había dicho que Lucas se encontraba bien y le creyó. ¿Cómo sabía Ninten que Lucas estaba bien? Él no se había movido de la cabaña como para saber tanto.

Mientras Claus pensaba Lloyd intentaba llamar su atención moviendo una de sus manos en el rostro de su amigo.

—Tierra llamando a Claus.

—Ah, si. ¿Qué necesitas? —Preguntó Claus.

—¿Ninten puede salir de casa solo?

—No, no puede salir, ¿Por qué la pregunta?

—¿Tú sabes que yo salí hoy temprano verdad Claus?

—Pss sí, por supuesto, a comprar frutas.

—¿Qué estabas haciendo tú mientras tanto?

—Estaba acostado pensando... pero estaba despierto, igual que ahora.

—¿Y dónde estaba entonces Ninten?
—No, no tengo idea, supongo que jugando con basuras del suelo como siempre.

—Ninten estaba en el pueblo comprando.

—¡¿Qué?! —Claus abrió sus ojos como platos—. ¿Dónde está él ahora?

Claus miró bajo la cama y no estaba. Seguro estaba metido en el escondite secreto. Movió las tablas del suelo y ahí estaba Ninten, dormido con un montón de cajas y envoltorios de golosinas.
Claus lo sacó y lo acostó en la cama.

Lloyd sacó todas las golosinas y las examinó. —Claus se ha comido muchos, tiene la cara un poco sucia con ellos.

—¿De donde saca dinero, tú o los demás le han dado? —Preguntó Claus.

—No, tú eres el único que tiene dinero aquí. —Comentó Lloyd.

Claus revisó sus pertenencias y le faltaba un fajo de billetes.
—Me lo robó a mí...

Ninten justo estaba despertando y Claus estaba listo para una gran regañada y tal vez unos golpecitos en las manos ladronas del muchacho.

—¡Claus! —Exclamó Ninten, estaba feliz solo con verlo cerca de él.

Vida de príncipesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora