°Perfecta Atracción°

Capítulo 63

Trabajar con niños que no tienen recursos para alcanzar sus sueños me parece demasiado emocionante y lindo, estoy tan ilusionada con este nuevo proyecto desde que la carta llegó a mi puerta. La respuesta la di el día siguiente luego de compartir la noticia con mi familia entera, mi padre gritó de la emoción, mi madre me deseo los mejores éxitos y Breik dice que irá a visitarme en cada vacaciones que tenga junto a Kel. 

Creo que la vida me está dando la oportunidad de seguir mi camino libre de estos días llenos de este dolor tan repetitivo y constante, de imaginar a Christian a cada segundo, de extrañar cada momento perfecto que viví a su lado, de querer encender mi celular y buscarlo, porque realmente lo necesito como no he necesitado a nadie nunca en mi vida, pero duele... duele demasiado saber la situación en la que estamos, duele saber que nunca podremos estar bien porque ella siempre estará entre nosotros, es su pasado y no puedo jugar con el tiempo para viajar allá y borrar a ese perra de su vida. 

Pero tengo la esperanza de cambiar mi vida, de dejar de pensar tanto en él y sé que esos niños lograrán sacar ese ladito lleno de amor para regalárselo a ellos, lo sé, lo siento y haré que suceda así. 

Estoy en busca de un nuevo par de botas y no he conseguido unas que se adapten a mis temibles exigencias, creo que he ido a cada almacén de este centro comercial y mis pies están empezando a llenarse de ampollas. Así nadie dejará probarme las que encuentre. 

Así que simplificando todo... muero de hambre, mis pies están sufriendo y mi cabeza palpita con fuerza, por lo que la decisión de ir por algo de comer es lo más factible en este momento. 

Busco la plazoleta de restaurantes y mis ojos divisan de inmediato un perfecto local de SUBWAY y decido comer un rico sándwich de pollo, con papitas de tomate y una gaseosa de manzana ¡me encanta!

Devoro mi comida en menos de lo que canta un gallo y como dicen por ahí... "barriga contenta, corazón contento" así que decido salir del centro comercial y cruzar la calle hacia el otro, a ver si en la competencia tengo mejor suerte. 

Cruzo la calle y al entrar el primer local de zapatos que veo es NATE's Shoes venden todo en cuero así que decido que aquí debo encontrar mis botas si o si.

La chica se me acerca en cuanto piso el almacén y se ofrece a ser mi guía, de inmediato digo lo que busco y en menos de nada encuentro muchas botas para elegir. 

Estas no están nada mal, me gustan. 

Luego de pasearme con ellas y mirarme bien en el espejo decido comprarlas, están dentro de mis gustos, muy linda. 

-¡No puede ser! -Digo en cuento veo las botas mas divinas que he visto en todo el día y creo que jamás las he visto en otros pies -Estas me fascinan -Le digo a la rubia que sigue mis pasos. 

Me las mido y creo que unas más perfectas no habría podido conseguir nunca, están realmente hermosas.

-Estás me las llevo, las otras jamás se compararían con estas -Digo emocionada y la chica solo asiente y sonríe cariñosa.

Llego a la caja y mientras introduzco la clave de mi tarjeta debito escucho la voz que he evitado por mucho tiempo y siento como mi piel se eriza y mis labios tiemblan. 

Los segundo en que la cajera empaca las botas me parecen eternos y espero que Christian no haya notado mi presencia ya que los nervios me llenan por dentro y quiero que la tierra me trague en este justo instante. 

Tomo la bolsa y sin mirar a ningún lado salgo de la tienda, cuando creo que lo he logrado una mano toma mi brazo que tiemblo. Ya no sé si es porque no quiero verlo o porque despierta todo en mí. 

-Maia... 

Intento soltar su amarre, pero lo púnico que logro es que me de una vuelta y terminar con su rostro muy cerca al mío, tan cerca como para hacerme perder en sus ojos.

-Christian...

 -¿Podemos hablar?

-No -Me apresuro a decir -Suéltame, por favor.

-No, Maia, necesitamos hablar.

-Christian, no me importa escuchar tus mentiras ingeniosas.

-No son mentiras, yo nunca te he mentido.

-Y si son verdades, tampoco volveré contigo, es suficiente todo lo que ha sucedido ya, no creo que pueda soportar más, por favor, entiéndeme y déjame seguir con mi vida.

-En serio te entiendo, pero necesito explicarte lo que hizo esa bruja, yo no tengo ni tuve nunca nada con ella. 

-¿Me vas a negar que te acostaste con ella?

Se queda pensando...

-Lo sabía, no puedes negarlo porque es cierto. Te odio. 

Lagrimas salen de mis ojos y no logro sostenerme, en cambio salgo a toda prisa mientras escucho como llama mi nombre.

Esto es horrible.