Capítulo 39

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Nunca creí que tanto dolor podía ser posible. Pero la verdad es que me equivocaba, me equivocaba horriblemente porque lo que sentí minutos más tarde era mucho más que aquel dolor que creí que era el peor. Mis piernas caminaron solas, realmente no sabía como mierda había llegado allí, lo cierto es que estaba a unos metros de él, de él y de todos mis amigos que se encontraban allí despidiendolo. Nadie podía verme, mejor así, realmente mi rostro daba miedo. Había sido exactamente una semana sin dormir. Él había adelantado su partida, no sé por qué, pero creo que fue lo mejor.

Caminó directo a aquellas escaleras mecánicas que nos separarían por un año. Mis piernas comenzaron a temblar, aquel dolor que ya se había hecho familiar en mi cuerpo aumentó de manera increíble. Su mirada recorrió todo el lugar. Para mi mala suerte ella se encontró con la mía, completamente nublada por las lágrimas que salían sin parar. Sentí literalmente que una espada se clavaba en el medio de mi organismo y cuando desapareció ya no pude sostenerme, no pude hacerlo.

Al abrir los ojos nada era igual ¿Había sido un sueño? ¿Acaso yo no estaba en el aeropuerto? Miré a mi alrededor confundida, aquellas paredes blancas, ese cómodo sofá en que estaba acostada, ese aroma que inundaba mis pulmones, lo reconocía, lo reconocía al punto de hacerme doler cada maldito músculo de mi anatomía ¿Qué hacía allí? ¿Cómo había llegado?

-Nat- la voz de mi amigo me distrajo y lo miré realmente confundida.

-Za...Zayn- tartamudee notando que mi garganta dolía como mil demonios- ¿Qué hago aquí?-carraspeé. Tragué profundamente y mis ojos se cerraron ante el ardor que aquello provocó. Me acomodé en el sofá cuando mi amigo se acercó a mí y sentí todo girar por unos segundos, apreté mis manos fuertemente en el sofá para sentirme más segura.

-¿Estás bien?- preguntó preocupado, asentí una vez que pude estabilizarme- Toma- dijo entregándole una taza de té.

-¿Qué sucedió?- pregunté todavía confundida mientras tomaba la taza. Él soltó un suspiro y me miró serio.

-Te desmayaste- soltó.

-¿Qu...qué?- pregunté confundida dejando la taza en la mesita que se encontraba frente a nosotros.

-Sabía que irías- habló acomodándose frente a mí- Sabía que estarías ahí cuando él se fuera- bajé mi mirada al notar a qué se refería- Entonces cuando al fin lo hizo miré a mi alrededor para saber donde estabas... pero no te veía y realmente creí que habías sido inteligente, que te habrías quedado en casa pero...- hizo una pausa y levanté mi mirada- Cuando vi un montón de gente rodeando algo supe que eras tú, allí estabas desmayada en medio del aeropuerto- ¡Maldición! no había sido un sueño, había estado allí, lo había visto irse y no lo había soportado, mi cuerpo ya no lo resistió- te trajimos aquí... Carly y Harry acaban de irse- explicó.

-Lo siento- susurré apenada volviendo a bajar mi mirada.

-¿Lo sientes?- preguntó extrañado, lo miré y él siguió- ¿De verdad estás disculpándote?

-No debí ir... tú lo dijiste- respondí.

-Lo sé- siguió- pero lo digo por ti... ni siquiera puedo imaginar como debe doler ver como se va la persona que amas- confesó- pero no debes disculparte- dijo acercándose.

-Si debo- lo miré con lágrimas en mis ojos- debo disculparme porque hago todo mal, porque perjudico a todo el mundo, porque soy una mierda- escupí completamente enfurecida, enfurecida conmigo misma- mírame- me señalé- me odio por haberlo dejado ir... me duele como nunca me dolió algo- mis mejillas ya se encontraban empapadas y mi corazón solo se retorcía del dolor- ¿Por qué mierda no puedo ser feliz? Él va a cumplir su sueño debo ser feliz, así que sí... perdón por ser una idiota que no pudo evitar ir.

He- [FanFic Niall]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora