Epílogo

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¡Oh por dios! ... nunca en mi vida estuve tan nerviosa. 

Había pasado una de las peores semanas de mi vida. Tenía miedo, tenía tanto miedo ¿Y si le contaba y me odiaba? ¿Y si arruinaba su vida? ¿Si sólo arruinaba su carrera y él no podría no odiarme? ¿Si me dejaba? No podía, no podía ni imaginarme un segundo sin él, me sentía tan egoísta por eso. Pero... lamentablemente había muchas posibilidades que eso pase. Se lo cuente o no, él podría hacerlo, él podría dejarme y yo realmente no sabría qué hacer.

Si no se lo contaba lo notaría, como esta semana en la cual no pude disimular mi estado, esta semana en la cual me alejé de él, simplemente simulando estar dormida cada noche cuando llegaba y siempre creando alguna excusa para no besarlo. Todavía recordaba su mirada preocupada y su triste expresión.

Si se lo contaba también podría dejarme, en pocas palabras era mucho. Era un gran cambio y una persona como él no podría tenerlo ahora. No podría modificar su vida así. No podía arruinarlo todo.

Las lágrimas ya había inundado mi rostro y mis manos temblaban sobre mi regazo mientras esperaba la llegada de él en el sofá de nuestro living. Un mensaje llegando a mi celular me distrajo.

"¿Ya se lo dijiste?" preguntó Sam.

"No ha llegado"

"okey. Todo estará bien, confía en mí. Avísame cuando todo pase"

El sonido de la puerta al abrirse me hizo soltar mi celular, con el corazón latiendo a mil por hora lo observé caer al suelo.

-Hey- saludó la voz cansada de Niall.  No lo miré, no respondí, no me moví. Sólo lo escuché dejar sus cosas y dirigirse a la cocina. 

Okey, si así era ahora que no le había contado nada ¿Cómo sería luego? Mis ojos volvieron a inundarse en lágrimas cuando escuché como volvía a ingresar al living. Sus pasos se acercaron y yo corrí mi mirada cuando se sentó a mi lado y dejó un vaso de agua en la mesa que se encontraba allí, no podía dejar que me viera así. Suspiró cansado.

-¿Todo bien?- preguntó distraído.

-Ajam- respondí evitando que viera mi rostro.

-¿Nat?- preguntó confundido colocando su mano en mi pierna, no pude evitar soltar un sollozo, ya no lo soportaba- Natalie - habló preocupado logrando que me gire para enfrentar su rostro. 

Por unos segundos se quedó paralizado, con su boca un poco abierta y su expresión confundida. Otro sollozo salió de mis labios y sus brazos me rodearon en segundos.

- Hey linda ¿Qué sucede?- preguntó sentándome en su regazo, me acurruqué en su pecho, debía disfrutar aquello, quizás era la última vez que podría tenerlo así- Nat amor... me estás preocupando-susurró- ¿Qué está sucediendo?

-Lo... lo siento- susurré limpiando mis mejillas para mirarlo mejor.

-Hermosa- susurró ayudándome con la tarea de secar mis mejillas- ¿Qu...qué sucedió?- negué con la cabeza sin poder pronunciar ni una palabra- ¿Es por lo mismo que estuviste distante esta semana? -asentí- Nat... necesito que me lo digas.

-E... es difícil- susurré.

-Sólo dilo- sus ojos se cerraron por unos segundos, como si realmente no quisiera escuchar lo que tenía para decirle.

-Por... por favor...- tartamudee- no te enojes.

-Nat- bufó.

-Sólo... sólo promételo- pedí.

He- [FanFic Niall]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora