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«Javier, no podré cenar contigo hoy, nos vemos otro día» La señorita Le Brun dejaba su celular en la barra de la cafetería de su padre. Se había sentado en uno de los taburetes altos tapizados con cuero ecológico, esperando que Bonnie saliera de su turno.

Luego del trabajo había decidido ir a visitar a su familia y con eso estaba obligada a hacer un alto en la cafetería. Se enteró que su hermano Tristan se había ido de la casa para ir a vivir con Camille... Al menos su padre estaba bien.

—¿Con quién te mandas mensajitos? —preguntó Bonnie con una sonrisa pícara en los labios. Lexi colocó los ojos en blancos, tomó su celular y siguió a su amiga para salir del local. Ambas caminaron hasta la plaza de aparcamiento— ¿Es tu profesor Styles?

—No, hace días que perdimos el contacto. —respondió Le Brun y dirigió a la puerta del acompañante del Mazda.

—Suenas más decepcionada que aliviada. —indicó su amiga poniendo en marcha su vehículo.

—Más bien estoy indiferente... —ésta se mordió el labio inferior.— De hecho, estoy saliendo con alguien más.

—No me digas... —la rubia a su lado bajaba el volumen de la radio y se giró por unos segundos a mirarla— Dios, Lexi no pierdes el tiempo.

Le Brun dio una carcajada.

—Pues, sí. Se llama Javier y es profesor de lingüística. —Alexa trató de ocultar el hecho de que Javier era su profesor de magister— He conocido a sus amigos, y el otro día me ha invitado a cenar.

—¿Y?

—Es encantador, muy detallista y besa de maravilla.

—¿Cuándo lo conoceré?

—Oh vamos, no seas injusta conmigo. Estás saliendo con un piloto y no me has dicho absolutamente casi nada. Solo sé que se llama Eric.

En ese momento su celular comenzó a vibrar. Lo desbloqueó.

«Está bien. Escápate conmigo este fin de semana como recompensa»

—Bueno se llama Eric, tiene veintinueve años y es piloto comercial. Es francés por cierto...

—¿Cómo lo conociste? —preguntó Le Brun volviendo a mirar el mensaje de texto que estaba escribiendo.

Lexi se mordió el labio inferior y suspiró antes de enviar el mensaje.

«Suena bien. ¿Dónde me llevarás?»

—Lo conocí gracias a mi hermana...—Alexa vio desaparecer su celular entre sus manos y vio a su amiga leer la conversación. Estaban estacionadas junto a un parquímetro. Bonnie miraba boquiabierta la foto de perfil que el profesor Allamand tenía— Ahora entiendo por qué tanto alboroto... Mierda, Lex.... Dime que ya se acostaron.

Alexa permaneció en silencio con una sonrisa.

—¡Dios mío! —exclamó entregándole su celular— No lo hiciste por despecho ¿no?

—No lo sé... —Lexi cruzó su bolso y salió del auto siguiendo a la rubia— Javier es guapo y muy inteligente, pero Harry es distinto cuando está conmigo. 

—¿Distinto?

—No lo sé, Bonnie. Quiero disfrutar estar con alguien por el momento... Me gusta la atención que Javier me da.

Ambas saludaron al recepcionista del edificio antes de subir el tramo de escaleras. Una pequeña caja celeste estaba depositada en la alfombra. Alexa la recogió y sacó la nota que llevaba pegada.

Vidas Cruzadas (H.S)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora