Capitulo 7

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Era agradable, sonreír y ser otra vez una persona normal era agradable.

Una banda la cual jamás había escuchado, había empezado a tocar, la música era pegajosa y pude ver como el rizado movía sus labios a la par, ––le gustaba la música clásica–– lo observe por unos largos segundos.

––Muchas gracias muchachos––el pianista toco un dramático final y la música acabo, dando entrada al maestro de ceremonias––buenas noches, estamos muy orgullosos de esta hermosa ceremonia que se ha podido realizar, y agradecidos de que acompañen a Ella Reynolds en esta hermosa obra.

Aun con los ojos en el hombre enfrente de mí ––el cual estaba totalmente en silencio–– no podía despegar la mirada de él y de lo mucho que me sorprendía.

Después de unos minutos el maestro de ceremonias había empezado a nombrar los invitados especiales, según él había dicho, el rizado aplaudía cada vez que una pareja se levantaba de su asiento, me empecé a sentir incomoda cuando todas las parejas que se habían levantado se habían dado un beso, fruncí el ceño y decidí beber de mi champan porque tenía la garganta seca.

––Y en esta noche, tenemos una visita muy especial, señoras y señores, Harry Styles el dueño de The Palm Beach Casino––el rizado sonrió y se levantó alzando su mano para saludar a las personas que lo saludaban y lo aplaudían, abrí los ojos como platos, ¿dueño de un casino?, ¿The Palm Beach Casino?, ¿Harry Styles?––y su hermosa acompañante, _____ Evans.

Oh. Mierda.

Abrí los ojos como platos, la mano de ‘’Harry’’ tomo la mía y me hizo levantar, sonreí en seguida y alce mi mano para saludar.

––Y sí que es bonita––hablo el hombre gracioso, la risa de todo el mundo inundo el salón, algo que hizo que me sonrojara––una hermosa pareja, acompañado de un hermoso beso para cerrar la presentación de los invitados especiales.

Mi mundo se detuvo, todos nos miraron, todos guardaron silencio, la expresión del ojiverde se tensó, para luego mirarme como si nada hubiera pasado.

Posiciono su mano en mi cintura y captando mis ojos en segundos, volvió a atraparme, como la primera vez que lo mire directamente a los ojos, inclino su cabeza y sus rizos bailaron en el aire, un escalofrío inexplicable recorrió mi cuerpo al sentir como la piel de sus labios tocaba los míos, su boca se presionó suavemente contra la mía para que lo besara, salí de mi ensoñación y moví mis labios para besarlo, sentí como sus labios se deslizaban entre los míos, y después de cuatro segundos exactos, se separó de mí, todos aplaudieron mirándonos, mis mejillas habían tomado un color rojo, como el labial que llevaba puesto, ––nos habíamos besado––, nos sentamos y sonreímos.

––¡Menuda pareja!––exclamo aquel hombre con el micrófono, todos rieron otra vez dedicándonos una mirada risueña, como si estuvieran viendo… ––no sé qué veían––.

Pero una pareja perfecta no era, porque yo y ––ya que se su nombre–– Harry, jamás seriamos pareja.

Narra Harry:

Mire mi reloj, eran las 11:47 pm y quería irme a casa, quería encerrarme en mi habitación con un vaso de whisky y preguntarme que había sido lo de hace rato ––y por qué ella besaba tan malditamente bien–– era… se había sentido tan bien y diferente tocar sus labios rojos, sentir las curvas de su cintura entre mis dedos, oler el perfume a rosas de su cuello, ––piensa con la cabeza Styles, no con tu desconfiable amiguito–– pero era imposible y…

––¡Oh!, vous avez une très belle fille, Styles––me quede en silencio al ver quien se acercaba a nosotros, Bastien Le Goff, dueño de una galería de arte al norte de Londres, arrogante y ambicioso, había ido con sus amigos a mi casino que no eran más que homosexuales igual que él ––utilizando la metáfora, consideraba a los francés unas verdaderos afeminados–– y esa sonrisa que nos dirigía, no significaba que le caía bien, lo sabía, yo no confió en franceses.

Strange | h.s | Terminada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora