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XV. MICHAEL 

Si el pasado año se me ofreciera de nuevo,
y entre el bien y el mal se me diera a elegir,
¿aceptaría el placer con el dolor
u osaría desear no habernos conocido?

—Isabella Augusta

Lo que más adoraba Michael era admirar a Luke, ya no podía ocultarlo, admirar la belleza superficial sí era uno de sus pasatiempos favoritos, sin embargo y por ser un ángel, podía ver más allá de lo que Luke era.

Veía como la ternura de Luke se confundía con torpeza, como sus ganas de proteger lo suyo lo disfrazaba con celos y sobre todo, Michael observaba a la perfección que Luke cuando amaba algo o a alguien, lo disfrazaba con indiferencia, incluso con un poco de desprecio, era por eso que su rubio protegido era algo distante en esos últimos días.

Michael sabía también que la presencia de Fanny era simplemente la causa mayor por la cual Luke no quería dirigirle la palabra, pero sabía que en algún momento Luke entendería la conexión que ellos tenían.

Él era feliz de ver una vez más a Stephanie, aquella hermana que lo protegió de un mal mayor incluso estando entre ángeles, Michael jamás se cansaría de agradecerle todo lo que ella le enseñó y así mismo, jamás se cansaba de sentirse culpable por el destierro de su hermana. Ahora el tenía la posibilidad de redimir un poco su error. 

Descansar era una opción limitada, Michael tenía que asegurar la estabilidad en los demás, su hermana le ayudaba en eso y Maia también, pero era casi imposible predecir los ataques.

Después de tres días más de recorrido ya habían enfrentado a más de cuatro demonios y dos brujos inexpertos, su agotamiento físico se presentaba cada vez más, pero las ganas de querer llegar y terminar con sus enemigos era mucho más fuerte.

-¿Cuánto falta?- preguntó Tom, Fanny los había hecho esperar a la orilla de la carretera, justo antes de llegar a un pueblo muy deshabitado.

-Es ese pueblo que ven... Pero no podemos llegar así nada más- le respondió Fanny.

-¿Qué sugieres?

-Que inicien su estrategia y... Perdonen, pero una vez que lleguemos al centro, mi ayuda ya no será de utilidad.- Michael supo a lo que su hermana se refería, porque ella misma se lo había dicho horas atrás.

-Lo haremos Stephanie... Gracias.

Maia suspiró y se acercó a Michael para poder iniciar su plan, Fanny les ayudó en muchos detalles, mientras que Calum, Luke y Tom esuchaban lo que ellos debían hacer, o de otra forma simplemente correrían peligro.

-No es seguro eso, Michael- le dijo Fanny-. Ella tiene razón, enfrentar a Amos y Jack de esa forma sería imprudente.

-¿Entonces? Jack y Amos han llegado ya, y por lo que sé, los otros dos también. Una oleada de demonios están protegiendo la casa y los brujos siguen intentando llevarse a Luke, ¿de qué otra forma podremos atacarlos?- Michael dijo furioso, le frustraba no poder hacer más, odiaba sentir la presión no solo de los Ángeles superiores sino también de su propio sentimiento de protección a Luke.

-Michael... Lo único que lograrás es ponerlo en peligro- dijo Fanny-, esucha lo que Maia dice, su plan es diferente y con suerte, funcional.

-Bien... Esta bien. Te escuchamos, Maia.

-Anoche mi abuela me ha advertido que tanto Jack como Amos se encuentran en una gran casa al norte de donde estamos justo nosotros- Maia sacó un mapa trazado a mano-, justo aquí. Y he podido ver un solo punto ciego al rededor, pero mínimo debo estar a tres metros de Amos para poder llevarlo de regreso a la dimensión de su padre...

Linaje Angélical »Cashton~Muke«Donde viven las historias. Descúbrelo ahora