Linaje Angélical »Cashton~Muke«

65

FINALES 

Después de aquello, La Guardia regresó de donde vino y como llegó, los ángeles caídos prometieron encontrar a cada traidor, después se marcharon, sabiendo que, entre los brujos sobrevivientes tendrían conflictos en el mundo de las sombras. Lane y Leila lloraron la muerte de su hermano, preguntándose qué es lo que sucedería con ellos después. Luke se acercó a Calum preocupado, pensando lo peor, creyendo que él también se había muerto de alguna forma, pero Ginebra le aclaró lo que sucedía, prometiéndole que Calum estaría bien.

Así que, sin más que tener que hacer ahí, dejaron el cuerpo de Ashton en manos de Leila y Lane, y ellos emprendieron el viaje hasta la cabaña. Maia, aquella noche que llegaron, pudo dormir finalmente, pero no con tranquilidad, pues esperaba ver a su abuela en sus sueños y que le dijera que todo estaba resuelto, al saber que no fue así, se cuestionó si realmente habían hecho lo correcto.

Al día siguiente, Calum no despertó todavía, y Luke ya comenzaba a sentirse ansioso.

-Estará bien, lo prometo- Ginebra le decía.

-Pero, ¿por qué es tan complicado?- Tom preguntó.

-Porque fue como si una parte de él también muriera, la maldición de Amos se rompió, no podría quedar intacto del todo Calum, así que dejémoslo descansar.

-¿Por cuánto tiempo?- Maia preguntó.

-El necesario. – Miró hacia la ventana en donde un extraño zumbido provocado por el aire llamo su atención-. Se hizo lo correcto, Amos se fue débil y pasarán muchas vidas hasta que vuelva. Tengo que irme, mis hijos me están esperando.

-¿Tienes que irte ya? ¿Y si pasan semanas? - Maia se sintió vulnerable, como si solo Ginebra le diera esa seguridad que tuvo en la batalla.

-Van a estar bien- sonrió-. Regresen a casa al inicio de semana, ya sabes que hacer, Maia.

-Podemos llevarte, Tom y yo- se ofreció, y cuando Ginebra estuvo a punto de negar, se dio cuenta de que Maia lo hacía agradeciendo y no porque hubiera olvidado que la magia existía.

-Muy bien.

Pero Maia también tenía la intención de dejar a Tom cerca de aquella casa vieja y abandonada donde lo encontraron.

-¿Luke va a estar bien?- Ginebra le pregunto justo antes de salir.

-Lo estará, créeme.

***

Luke miraba el techo, no era consiente de lo que sucedía afuera de esa habitación porque realmente no le interesaba. Y es que solamente pensaba en el enorme error que había cometido al dejar que Vassago le mostrara su futuro, porque era en lo único que lo mantenía con tanta duda. Pero, sobre todo, con un vacío extraño e inexplicable. Deseaba, no con tanto ímpetu, haberse despedido de Michael, agradecerle sobre su labor, era lo que le habría dejado tranquilo. Ya sabía que eso sería imposible porque jamás lo volvería a ver, y se preguntaba que, si tan solo no le hubiera otorgado su sueño a aquel demonio, estaría así de relajado. Porque no era que no sintiera tristeza por haber dejado a Michael solo aquella noche, era tal vez otra cosa que aun no descifraba.

Tuvo miedo en ese momento, miedo a seguir con vida y ser miserable, que se arrepintiera por el resto de sus días el haber entregado una parte de él.

Sin embargo, siguió imaginando un mundo diferente y a cuestionarse como es que Maia resolvería la situación de sus clases o de las personas a su alrededor. Seguiría en la escuela, pero nada seria lo mismo, no ahora que ya sabia tantas cosas, tal vez se sentiría desprotegido.