Después de explicarles mi teoría, todos están de acuerdo en que la clave es el banco, no lo que se ve desde ahí, así que lo estamos registrando de arriba abajo, tratando de encontrar algo escrito en él, pero no tenemos tanta suerte. Vuelvo a fijarme en la fotografía y una idea se ilumina en mi mente.
-Dejadme probar algo -les digo-. Apartaos.
Me hacen caso mientras ven cómo me pongo de rodillas y apoyo mis manos en el suelo, pegando mi cabeza al césped, buscando debajo del banco.
-Vista al frente muchachos -ordena Ashton, logrando que me gire y vea a los tres deportistas desviando su mirada de mi trasero.
-Sois unos asquerosos -me quejo mientras sigo buscando.
-Eres tú la que nos provoca poniéndote de esta manera -me culpa Jake, a lo que los demás ríen. En esos momentos se oye un ruido de ramas siendo pisadas muy cerca de nosotros.
-¿Qué ha sido eso? -pregunto incorporándome asustada y escudriñando rápidamente la oscuridad.
-Parker -llama Logan-, quédate con ella. Vamos -dice dirigiéndose a los demás.
No sé cuánto tiempo les lleva registrar el lugar, pero a mí se me hace eterno. Mi acompañante no ha parado de abrazarme, hecho que me consuela hasta cierto punto. Vuelven minutos después sin noticias acerca del incidente.
-No hay nadie -informa el capitán del equipo mientras se acerca a mí y me inspecciona-. ¿Estás bien?
-Sí -logro susurrar antes de salir del agarre de Jake y seguir buscando bajo el banco.
Entonces lo veo. Un pequeño cuadrado de papel pegado en la parte inferior del asiento. Lo saco con cuidado de no romperlo de su escondite y me levanto. Le enseño lo que tengo entre los dedos a los presentes.
-¡Tenías razón! -exclama Jake emocionado-. Esa es mi chica -dice orgulloso mientras me rodea el cuello con su brazo.
Todos los demás me felicitan por el descubrimiento, pero yo no estoy tan contenta, todavía tengo esa sensación de estar siendo vigilada.
-¿Qué pone? -pregunta ansioso Ashton.
-¿Podemos irnos de aquí? -no creo que me hayan oído puesto que he susurrado bastante. Aunque no es así, Logan, al menos me ha entendido.
-Vamos -anuncia mientras echa a andar en dirección a nuestras casas.
Troto hasta ponerme a su lado, alejándome lo más rápido de ahí. La noche es fría y, con las prisas, no he cogido chaqueta, así que ahora estoy tiritando. Pero no solo es por la baja temperatura, también influye el hecho de que estamos buscando a mi mejor amiga, que ha desaparecido porque alguien la estaba espiando desde hacía meses. Nunca me mencionó nada de aquello, y era algo que me torturaba a cada segundo. ¿Acaso no confiaba en mí? Si yo estuviese en su misma situación, hubiera ido corriendo para contárselo. "Pero no todo el mundo es igual" me dice mi conciencia. Cierto, pero no puedo evitar pensar que quizás Mia no se fiaba de mí. Tiemblo ante la simple mención de la idea, y me abrazo a mí misma, tratando de consolarme.
-¿Tienes frío? -inquiere mi vecino al ver mi gesto. Me limito a asentir, no quiero que sepa la otra razón por la que tirito-. Toma -dice mientras me pasa su chaqueta sobre los hombros y me rodea la cintura con su brazo, acercándome a su cuerpo, reconfortándome.
Al llegar a mi casa, desdoblo el papel que hemos encontrado en el banco y lo leo.
-"Sabía que lo encontrarías, B. Pero no puedo arriesgarme a que no seas tú, así que solo te pido que busques entre nuestros mejores momentos. Te quiero, M" -una lágrima resbala por mi mejilla. La seco rápidamente y vuelvo a guardar la nota en el bolsillo trasero de mi pantalón.
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La desaparición de Mia Collins
Misterio / SuspensoUna chica. Cuatro chicos. Una desaparición. Un sobre lleno de fotografías. Un misterio que resolver. Una mejor amiga, una hermana y un amor platónico que encontrar. ¿Te apuntas? ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~ Portada hecha con la colaboración de @H...