Sam es un chico que lo tiene todo, una linda familia, amigos y hasta es parte del equipo de fútbol en su escuela como uno de los mejores jugadores del año.
Es un lobo muy codisiado y amado por todos en su manada.
Pero la vida de este chico dará un...
Habían pasado dos días desde aquella extraña cena y sus padres lo regañaron un largo rato, aunque Bobby no le había hablado sobre ese día el sabía que en cualquier momento entraría por esa puerta buscando explicaciones. Hoy era sábado y como siempre un sin fin de fiestas en las que fue invitado, aunque este día tenía que ir a una fiesta obligatoriamente, no se quejaba ya que la cumpleañera era realmente agradable, la hija de Tom y Félix cumplía 18 años, era muy enérgica y alegre llamando la atención de inmediato.
Se conocían desde pequeños y ambos se llevaban realmente bien apesar de siempre hacer apuestas entre ellos, Hana una pelinegra de gran sonrisa amaba las fiestas y ésta sería inolvidable. Sam siempre vestía casual pero lindo siempre atrayendo a el sexo apuesto apesar de su poca altura, era realmente amigable por lo que no le era difícil hacer amigos, sus padres accedieron a que asistiera a la fiesta ya que sabían que era de aquella chica por qué de lo contrario su castigó seguiría intacto.
El se había vestido de una manera casual, por lo que ya se encontraba listo, se despidió rápidamente de sus padres y tomo las llaves del auto.
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Cómo buen amigo que es pasó a buscar a lo gemelos los cuales vestían del mismo color, creo que el tío Félix los había vestido de nuevo. Una vez que entraron al auto no pudo evitar reírse de ellos, estos lo regañaron y condujeron hasta la casa del pequeño humano. Una vez que llegaron pudieron apreciar como sus tíos jugaban cartas, su tío Marcos y Jake les dijeron que pasaran que su hijo se encontraba en su habitación.
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Cuando pudieron entrar y digo pidieron por que su habitación estaba con llave vieron como el pequeño chico tenía un bate de béisbol de su padre entre sus manos apuntando les con enojó.
Teo: les dije que no iría!
Melisa: muy tarde...
Y así luego de media hora se encontraban todos en el auto vestidos y arreglados para aquella fiesta.
Teo: me siento violado.
Melisa: de que te quejas si te dejamos precioso?
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No iban a negar que el chico se veía bien, pero para lograr eso tres personas se encargaron de desvestirla y vestirlo para la ocasión sin contar que el chico pataleaba y movía los brazos frenéticamente tratando de liberarse, lo cual fue inútil por la gran fuerza de aquellos lobos.
Sam: ya llegamos chicos.
El lugar era un local muy grande donde mayormente en ese lugar se daban las fiestas de la chica, no era de esperar que la fiesta fuera en grande ya que serían sus 18 años. Todos en el auto bajaron con grandes sonrisas ellos eran muy populares en la escuela y tenerlos juntos era como un regalo para todos, por lo que todas las miradas no se hicieron esperar, los gemelos más sexys de la escuela vestidos a conjunto con un aura de misterio y carismá, a su lado un tierno y tímido humano de gran inteligencia donde sobresalía su ternura y timidez llamando la atención de inmediato, y por último un chico moreno de baja estatura de grandes pestañas espesas que escondían unos brillantes ojos color miel verdosos, vestido a la moda y su gran sonrisa que hacía derretir a las chicas junto a él. Un grupo de lo más esepcional.
Justo frente a ellos en la entrada se encontraba una simpática y alegre chica de cabellos oscuros agitando la mano hacia su dirección, la Hana que todos conocían.
Hana: hey chicos al fin vinieron!
Melisa: por supuesto, por cierto feliz cumpleaños.
La morena abrazo rápidamente a la simpática chica y le entrego un regalo el cual era un vestido muy lindo. La chica agradeció con una enorme sonrisa.
Rodrigo: felicidades.
Hana: gracias Rodri! Tú siempre tan callado.
Alegó con una gran sonrisa que sin esperarse contagio al serio gemelo frente a ella. Teo se hacerco más a ellos y la felicito con normalidad entregándole un pequeño regalo que sus padres le habían dado de ante mano.
Hana: gracias Teo, por cierto hoy te vez muy lindo.
Teo: g-gracias
Sam: felicidades pequeña loca, por fin cumples los 18.
Hana: hay Sam como olvidarme te di, mi loco y divertido lobo.
Sam: vamos sé que me extrañabas
La chica río y le dió un cálido abrazo, Sam por su parte le entrego una pequeña caja donde contenía un lindo collar. La chica agradeció con una enorme sonrisa y los invito a pasar, el ambiente era muy divertido gente gritando en el escenario alguna banda la cual no conocía, muchos bocadillos, mucha gente, y sobre todo la decoración era asombrosa este año la temática fue el océano, y vaya que habían logrado eso, la iluminación era azul dándole un efecto de agua, había una escultura de hielo de una sirena y por si fuera poco los vasos eran de pequeños peces esta chica en verdad llevaba las fiestas en grande.
Hoy se divertiría a lo máximo y nadie se lo impediría...
