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Habían pasado dos días desde lo ocurrido, y ambos chicos se comportaban más cariñosamente, por un lado estaba el sexy pero elegante moreno quien por seguridad no había salido de la casa de su novio, aunque este no se quejaba por ello, ya que de esta manera podía pasar más tiempo con él chico que amaba, por otro estaba el vampiro que ya sabía controlar medianamente bien sus hormonas, y estas eran muy útiles para tranquilizar al lobo en sus ataques de tristeza, exitación y enojo, estas tres circunstancias que se le presentaban, y aunque a veces tenían problemas para calmarlo ya eran menos las veces en las que tenían que hacerlo.

Y a decir verdad era un proceso muy difícil ya que por ejemplo, si este le daban un ataque de tristeza, lloraba a mares y se pegaba a él mietras se restregaba gimiendo del dolor, y no paraba ni aunque lo consolarla o mimara, solo las hormonas lo hacian mientras lo sostenía contra su pecho y le susurraba cosas lindas, otro caso seria cuando se enojaba, este hasta le temía, ya que el moreno lanzaba cosas mientras le gritaba, y ni se le ocurriera sostenerlo por que acababa con varios moretones y mordidas de por medio, por último sus ataques de exitación, y aunque le encantaría hacer más cosas con este, más bien sufría por ello, este suspiraba con irregularidad mientras tocaba su pelvis con dolor, chillaba hataa que sus hormonas calmaran su sufrimiento.

Este día el guapo Alex servía el almuerzo con ayuda de su novio al compaz de la música, el cual en algunas ocasiones le repartía un par de besos en sus mejillas haciendo reír al moreno, ambos bailaban levemente mientras preparaban la comida, jugaban entre ellos y se hacían un par de bromas. Lo estaban disfrutando, en verdad estaban felices en ese momento, en medio de su baile se escucho el ruido de un teléfono, por lo que el lobo limpio sus manos rápidamente para luego depositar un pico en los labios del contrario el cual solo le sonrió con alegría.

Alex tomó el aparato entre sus manos con una sonrisa mientras veía el extraño baile de su novio, bajo la mirada y observó como su amiga Melisa la llamaba, este manteniendo una actitud sonriente le contestó.

Alex: ¡Hola mi dulce azúquita!, ¿cómo va todo?.

Melisa: ¡SAM!-

Alex: ¡incorrecto!, soy Alex, aunque muy parecido.

Contestó el chico sonriente sin dejar que esta terminará de hablar, este escucho un pequeño silencio, del cual aprovecho para decirle entre sususrrlos a su novio que le bajara el volumen a la música.

Melisa: Alex... Debes ayudarnos, Rodrigo, el... Desapareció...

Alex: ¡¿Qué?!, d-digo, tranquila Melisa, estaremos allí lo más rápido que podamos.

El chico corto la llamada y se quito aquel delantal que se había puesto para luego lanzarlo en algún lugar de la casa, este le dio un pequeño golpe a su novio el cual al verlo dejó de hacer lo que hacía para mirarlo con extrañeza.

Dilan: ¿qué haces?.

Alex: buscando tus llaves para irnos, surgió una emergencia, hay que ir a casa de los gemelos.

El vampiro asintió y sin rechistar acato la orden, por lo que se quito su delantal y se coloco los zapatos con rapidez observando como el lobo abría la puerta y se dirigía con rapidez al auto, el moreno encendió el coche y espero a que su novio se subiera para así llegar al lugar, una vez que ambos estuvieron listos, el vampiro no pudo evitar mirarlo y preguntar.

Dilan: pensé que no sabias conducir.

Alex: Bueno... Es que no se hacerlo.

Dilan: ¡¿Pero qué mi-?!

Este no pudo ni terminar ya que se agarro de donde pudo al sentir como este aceleraba a gran velocidad, fueron un par de minutos donde el vampiro había visto su vida pasar por un par de segundos, ambos bajaron del auto al llegar a su destino, aunque Dilan casi, casi besa el suelo con alegría.

Alex: que exagerado.

Murmuró rodando los ojos, el moreno sin esperarlo se encaminó directo a la casa de los chicos, sacudiendo de manera sexy pero natural sus caderas, atrayendo la atención de su novio el cual no dejaba de mirarlo embobado.

Alex: deja de comerme con la mirada, ahora no es momento para eso.

Lo regaño con enfado mientras que tocaba el timbre de la casa y con la otra mano la metía en su bolsillo, el vampiro lo miró con una sonrisa de oreja a oreja.

Dilan: eso quiere decir... ¿Qué luego estaría bien?...

El lobo antes de regañarle sintió como se abría la puerta dejando ver a una desesperada morena a punto de llorar, el chico ignoro todo y la abrazo en una protector abrazo haciendo que esta rompiera a mares a causa de su hermano. Una vez más tranquila los dejó pasar allí es cuando ambos se pudieron dar cuenta que no están solos, ya que Teo, los padres de este, Min Yuu, sus padres al igual que su hermano Bobby, Hana al igual que su familia y los padres de los gemelos estaban allí, estaban todos reunidos aunque extrañamente también vio a los gemelos Brown y Braiton al igual que el hermano de su mate Damián.

Este suspiro, por lo que sabía lo último que le había comentado su amigo es que ambos ya habían llegado a un acuerdo de estar juntos, en una especie de tregua entre los tres, pero lo importante no era eso ahora, si no saber el paradero de su amigo desaparecido.

Alex: Bien, hay que encontrarlo.

Anunció el chico para luego ver cómo todos se podían en marcha, su padre y hermano llamaron a la manada para que iniciaran la búsqueda ya que ni siquiera sabían alguna pequeña pista, por otro lado el resto ayudaría a la búsqueda algunos por aire y otros por tierra, ayudándonos de nuestras capacidades y poderes.

Dilan: No te preocupes hermano, lo encontraremos.

Alex: tiene razón, su mate estará a salvo, el es fuerte.

Murmuró el chico con una pequeña sonrisa mientras tocaba el hombro de Brown ya que este parecía decaído.

Brown: Eso espero en verdad...

"Un Omega Diferente"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora