La chica alada

Capítulo 12

Narrador

En el mundo lleno de ceniza y miedo Pau, Grace, Terence y Abdiel conocerán sus debilidades y sabrán que no son tan irrompibles como pensaban.

Pau

Por alguna razón tenía el mismo vestido que tenía cuando había visto los recuerdos de Adam, o algo así. Estaba un poco manchado de ceniza al igual que mi cabello que tenía pequeñas islas de ceniza que se hacían más grandes.

Estaba descalza y el frío había desaparecido, tampoco había calor. Era como si todo el mundo hubiera parado.

Escucho gritos, los cuales hacen eco en todo el lugar. Voy corriendo hacia el lugar proveniente del grito.

Los gritos no paraban y conforme me acercaba risas acompañaban a los gritos. Después de subir tres pisos logro ver a dos figuras.

Un niño apuntaba a un hombre que estaba en el suelo. El niño tenía pantalones rotos que por un solo hilo delgado se mantenía juntos las dos partes de este. Su playera parecía ser blanca con rayas rojas, pero estaba llena de polvo y ceniza.

——¡No me mientas! Todos dicen que sabes la salida de este lugar, que tú has logrado salir y entrar—— el hombre empieza a reír de nuevo y el niño le dispara en su pierna, al parecer por sexta vez. El hombre grita y lleva su mano inmediatamente a su herida nueva.

——Ya te dije, solo he salido porque estoy comprado. La única manera de salir de aquí es volviéndote un Asechador o uno de sus sirvientes—— sus ojos se vuelven rojos, el niño da dos pasos para atrás tambaleándose, pero se mantiene firme—— ¿Ya pensaste en mi propuesta niño?—— vuelve a reír y el niño vuelve a disparar. Parece que el niño no nota mi presencia.

——¡Dime cómo salir de aquí! ¿¡Dónde estoy!?—— las risas del hombre se hacen mucho más intensas.

——Estas en la dimensión del sueño, nuestro patio de juegos. Mi señors elige a personas que han sido rechazadas por el Cielo y el Infierno para torturarlas y obtener más poder y Asechadores. Si no te conviertes en un Asechador solo tienes dos opciones: ser subastado por mi señora y terminar en manos de un Señor Demonio o perder la cordura—— su risa se vuelve asquerosa, tanto que mis oídos parecen rechazarla. Es odiable—— ya te he llevado al límite, niño. Sé mi almuerzo—— se levanta aún con todas sus heridas y mira con locura al niño. El niño finalmente tropieza contra mí.

Suelta un grito de miedo y pude ver sus ojos negros llenos de miedo, parecía que moriría de puro miedo. Entonces el hombre comió su cabeza. Yo solo pude quedarme quieta, mi rostro, cabello y vestido blanco se mancharon de su sangre. La boca del hombre se había extendido hasta la altura de su nariz, como si su cráneo hubiera sido abierto por un doctor curioso, pude observar miles de dientes afilados en esas fauces que se podría llamar su boca.

——¿Tú quién eres?—— hablaba tan tranquilo cuando segundos antes se había comido el cráneo de un niño—— no pareces ser una marcada, pero tampoco pareces un alma comprada. ¿No serás?, mi ama dijo que traería a invitados. ¿Eres el ángel?, el poder que emanas es muy grande—— doy dos pasos hacia atrás mientras el da uno hacia mí.

——Steve, creo que te dijo muy claro que no debías acercarte a los invitados—— pasos se escuchan acercándose hacia mí. Un nudo se hace en mi estómago. Era un sentimiento extraño y feo, debido a que sentía como mi adrenalina recorría todo mi cuerpo. Tenía que salir de ahí.

Al darme la vuelta siento dos dedos fríos tocar mi frente y el mundo de cenizas desapareció.

Mis pies no tocaban el suelo. Escucho de fondo cadenas, el ambiente negro desapareció dejando ver una jaula, habían otras chicas. Algunas lloraban otras estaban demasiado cansadas como para hacerlo.

Una me mira con sus ojos vacíos y veo como abre la boca. De ella sale un grito agudo que hace que me tapé los oídos.

Entonces escucho un susurro.

——Tú eres nuestra salvación como nuestra perdición—— lágrimas empiezan a salir de mis ojos.

——Silencio—— ese susurro se multiplicó y ahora era lo único que escuchaba—— ¡Callense!.

——Arwen—— escucho decir de entre tantas voces. Al ver detrás de mí el escenario cambió, estaba sobre un caballo y usaba un vestido, Adam estaba vestido de una forma extraña y tenía su espada, la única diferencia era que esta era normal—— mantente detrás de mí. Ellos son peligrosos—— siento una espada cruzar mi cuello y no hay dolor, caigo del caballo—— ¡¡Arwen!!.

Volvía al escenario negro, miles de voces empiezan a pasar junto a mí como si se tratare de carros con el volumen al máximo. No entendía que decían y solo distinguía dos voces, la mía y la de Adam.

——¿Qué está pasando?—— me digo a mí misma. Estaba de vuelta a algún lugar, ahora era una furenaria. No había nadie, estaba sola.

Siento a alguien detrás de mí.

——Lamento que nadie haya venido—— era un hombre con el cabello rubio, lo traía cortado uniformemente y tenía un traje, me ofrece su brazo e indecisa lo tomo comenzamos a caminar hacia el ataúd abierto que había enfrente de nosotros, las sillas de madera donde debería hacer gente estaba vacías—— igual la arreglé, verás, cosí su mandíbula, tuve cambiarle sus ojos por unos de vidrio, tuve que maquillar los moretones y quitar la sangre, pero quedó bien—— llegamos al ataúd abierto que estaba frente a mí. Estaba yo. Mi cabello castaño estaba planchado y tenía maquillaje negro, mi piel estaba pálida, usaba un vestido blanco lleno de tierra.

——¿Qué es esto?, ¿Qué está pasando?—— me alejo del ataúd lentamente, pero siento a alguien que por detrás me agarra por los hombros, era el hombre.

——¿No es obvio?—— me empuja hacia el ataúd—— estás muerta y nadie vino a tu funeral. La yo que estaba en el ataúd de levanta e intenta hablar. Su boca estaba pegada, no podía hablar. Siento mi corazón latir tanto que parecía que iba a desmayarme. El hombre le entrega a mí yo muerta un bisturí y ella lo toma. Lo acerca a su quijada y corta, su boca se abre finalmente y sus ojos que ahora eran blancos completamente me miran.

——¿Por qué? ¿Por qué tengo que morir? ¿Por qué? ¿¡Por qué!?—— los gritos vuelven y yo caigo al suelo.

Me pongo a llorar. Solo quería que esto se acabara.