Maternidad Pokémon

Cocinando algo nuevo (Lopunny)

Nota de Autor: Muy buenas nuevo lector y viejo lector. Dejo este pequeño escrito aquí para recordar y avisar que este capitulo (Y por lógica, su continuación) Fueron editados, para mejorar algunos aspectos narrativos y de escritura en si.

Intente cambiar la trama en lo mas mínimo, pero a fin de cuentas es casi solo la temática y personajes en un "Remake" para que los viejos seguidores de esta historia puedan leer algo nuevo, a la vez que los nuevos se den una mejor idea de como quiero hacer las cosas, pues a día de hoy sigo intentando mejorar mis capítulos a la vez que trato de ser un mejor autor.

Sin mas que agregar, les dejo la lectura:

El amor, todos queremos tenerlo y de una buena forma. Hay que admitirlo las chicas buscan a un hombre bueno, de preferencia alto rubio, de ojos azules y musculoso. Los hombres por nuestro lado queremos la típica mujer que parezca sacada de una revista de cosméticos... o de revista para adultos, lo que sea conveniente; yo puedo decir que trabajo junto a la que es idónea para mi: un poco baja, delgada, de cara adorable... me da un poco de vergüenza pero diré que tiene un lindo trasero y unas piernas bien torneadas; admito que sus caderas me matan. 

Mi único problema es que al ser yo el cocinero y ella la sirvienta nos vemos muy poco, solo cuando llega a llevarse los platos para el jefe, o cuando los deja para que los lave. Aun así no me quejo, me gusta ver sus ojos morado y me encanta ver el caminado que hace cuando se retira, es muy agradable mirar, aunque debo admitir que tocar sería algo mucho mejor, me encantaría hacerlo en el futuro.

Pero vamos, aceleremos las cosas un poco a cuando el viejo para el que trabajo se iría de vacaciones junto a unos familiares y me dejara cuidando su casa para evitar pagar algún guardia privado, ojala se quedara la sirvienta para hacerme compañía, pero es casi seguro que se irá con él, después de todo Lopunny casi nunca se aparta de su entrenador. Así que aprovecho que todavía puedo ver su afelpada cola bailar frente a mi... me apenaba admitirlo, pero ella era una conejita bastante sensual, llamativa a la vista pero bastante reservada conmigo, a duras penas me hablaba pero disfrutaba su voz y la forma en la que sus dulces labios pronunciaban esas palabras de cortesía. 

Los días pasan bastante lento, entre trabajo y encargo solo puedo ver que las horas se agotan en un parpadeo, pero aun así puedo notar en el calendario que la fecha para su viaje todavía esta lejos. De nuevo recalcaría que no me molesta del todo, ya que esa linda coneja pasa mas y mas tiempo en la cocina estos días, entra para beber agua, a veces toma prestados mis utensilios de limpieza, por lo que tiendo a molestarla, dejándolos en las gavetas mas cercanas al suelo, para que ella se agache a tomarlos, haciendo que su falda se levante y se arrastre sobre sus gruesos muslos, mostrándome casi por completo esas piernas cubiertas por las ajustadas medias blancas. Ese uniforme menta y blanco le sienta muy bien, su hermoso pelaje marrón resalta aun mas con ese atuendo. 

De cierta forma me sorprendía que ella no se diera cuenta que deliberadamente cambiaba el orden de los objetos, para verla en distintos ángulos. Me partía un poco el corazón ver que mi "Trampa" la molestaba, pero me calentaba la sangre el verla de esa forma, arrodillada buscando el trapeador bajo la mesa, en cuclillas mientras leía las etiquetas de mis productos de limpieza, o parada de puntillas en un banco o silla revisando las estanterías altas, en esas ocasiones incluso pude verle su ropa interior, ajustada a su jugoso para de glúteos, blanco impecable nuevamente, un bonito contraste con sus piernas marrones. 

Los días casi se terminan, pero ahora cambie un poco, creo que me canse de aparentar ser un acosador, ahora cada vez que algo parece un problema, como buscar el atomizador o donde estaban las servilletas, me comportaba como un caballero, buscando por ella lo que pidiera. Recibía poco mas que un "gracias" por esto, pero prefería eso a que se diera cuenta que la espió mientras trabaja, pero siento que hemos ganado algo mas de confianza, quizás algún día pueda decirle que me siento muy atraído por ella... que me gusta mucho y...