Maternidad Pokémon

Clases poco particulares

Descripción de la historia: Esta parte se aleja un poco del tema central de la obra, situándose en un universo alterno donde Lusamine es maestra de Sun, un estudiante en el último año de bachillerato. Alguien se enteró de un secreto vergonzoso del otro que los llevará a un extravagante romance prohibido.

Esta historia está parcialmente inspirada en otro fic que ya no esta en wattpad.

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Región de Alola, iniciaba el último año en el bachillerato para nuestro protagonista. Sun es un muchacho tranquilo que realmente no destaca en mucho, es un buen estudiante pero le falta mucho para ser un alumno ejemplar como su amiga Lillie.

Ella tiene las mejores notas, una belleza envidiable y una personalidad extrovertida que atrae a todo mundo. Aunque no todo es fácil para ella, pues las críticas a su persona son una constante en su vida y su amigo Sun lo sabía.

—Vamos, no te preocupes por esas palabrería barata —Hablaba él, intentando subir el animo de su amiga.

—Es fácil para ti decirlo, mi hermano se graduó hace dos años y ambos sabemos que él se encargaba de callar a esos habladores.

—Bueno, igualmente me tienes a mi ahora, sabes que puedes contar conmigo para lo que sea.

—Ya no más Sun, recuerda que este año estaremos en salones separados.

—Eso lo sé —Suspira —Pero eso no romperá con nuestra amistad, ¿Verdad?

—Claro que no —Habló ella enérgica, para luego darle un amistoso empujón a su compañero —Pero que no te pueda controlar me preocupa, ¿Qué dirá mi madre si ve que me junto con alguien que no entrega tareas?

—Oye tranquila, no he reprobado ninguna clase o curso —Dijo tranquilo pero sintiéndose levemente ofendido —además tu mamá será mi maestra, no la tuya, yo soy el que debería preocuparse por agradarle a esa señora.

—No te confíes, ella es estricta y muy perfeccionista, tendrás que entregar buenos trabajos, no esos proyectos de ultima hora que haces siempre.

—No tanto como su hija —Habló de forma despectiva —Tranquila Lillie, todo saldrá bien, nos tardaremos y... ¿Qué importará después? Nuestros compañeros de hoy seguramente nos olviden el próximo año.

—Bueno, aún así no podré relajarme hasta que salgamos de aquí con buenas notas.

Para ella este año debía ser lo más perfecto posible, para él... era más simple todo, sólo otro ciclo de llegar, sentarse, tomar apuntes y entregar tareas, nada nuevo y algo para nada complicado, sólo debía mantenerse al margen de todo y no hacer quedar mal a su amiga, pues para ella las apariencias y la reputación parecían serlo todo.

Así comenzaba su primer día, hablando un poco antes de que sonará la campana y tuvieran que correr en direcciones distintas, para así llegar a sus salones antes que él maestro o la profesora y evitar problemas. Para ella era fácil, sólo caminaba de regresó a su salón, pero para Sun... era subir corriendo del segundo al tercer piso y llegar hasta el final del pasillo donde se encontraba su clase.

Aquel sonido de pasos apresurados en las gradas llamó la atención de una profesora que ya estaba en ese pasillo, alta, con un cuidada piel clara y una larga cabellera rubia, se trataba de Lusamine, quien se detuvo en la última grada para ver a ese apresurado joven.

—¡Ah! —Exclamó impresionado de que ella ya estaba camino al salón

—Joven Sun, llegar tarde en el primer día no esta bien visto, ¿Lo sabe no es así?