Maternidad Pokémon

La perrita del bosque (Lucario)

Parece que fue hace una eternidad, pero fue sólo hace un mes cuando lo vi por última vez... espero y quiera volver otra vez... pero vamos por partes.

Hace unos cuatro años, recuerdo haberme acercado a esta parte del bosque, estaba un poco perdida pero había una amable persona que me ayudó aquel día cuando no tenía comida. Un chico hijo de un leñador que todos los días pasaba por este lugar llevándose un poco de la madera para vender en el alejado pueblo.

Por ese tiempo era sólo una riolu y... estaba un tanto temerosa de pedir ayuda.

—Disculpa... ¿Puedo comer un poco de lo que dejaste aquí en el árbol cortado? —Dijo esa Riolu mientras señalaba una bolsa de papel al lado de un pedazo de tronco.

—Ahí no hay nada —Respondió el chico —Pero toma esto —Sacó de su bolsillo una bolsa de plástico llena de trozos de fruta y se retiró ante el llamado de su padre. La pokemon de aspecto canino aprovechó y comió todo lo que le habían dado... y se sentó en ese lugar a esperar el regreso de ese amable niño

Cada día era una charla diferente, nos entrábamos en esos troncos viejos y cortados a charlar de todo un poco durante largas horas. A veces ese chico llevaba "Uniforme" de su escuela y llegaba algo tarde, pero casi siempre jugábamos a corretear por ahí hasta que el cielo se pusiera naranja y él se tuviera que ir. Entonces paso el primer año y nos hacíamos amigos mientras creíamos. Pasó el segundo y él parecía crecer más que yo, finalmente al tercer año... yo lo veía hacia arriba, era casi un hombre como su padre y yo... seguía pequeña. Me daba vergüenza seguir viéndome así... yo parecía seguir ssiendo una niña y él ya había madurado, platicaremos más en lugar de jugar... por eso empecé a entrenar, retando a cualquier pokemon o entrenador que me encontraba, si revolucionará podría ser de su altura... y quizás volverían los juegos, o quizás tendríamos más respeto mutuo, no lo se... sólo se que el llega a veces a curar mis heridas y una vez lo escuché comentar que planeaba comprar una pokeball para llevarme con él a todas partes... sería bueno eso... sería muy bueno.

A la mitad del tercer año logre evolucionar y... olvide por que lo hice la verdad, creo que no tuvo sentido esforzarme en ello pues los juegos no volvieron, era hora de crecer al parecer y... bueno, él siguió siendo más alto que yo.

—Entonces... ¿Ahora eres un Lucario?

—"Una" Lucario, y... si, si lo soy, sólo recalcó que soy chica.

—Si, lo se, es difícil ni notar que eres una hembra tan... —Ese silencio causó ligero rubor en los dos, fue raro pues era vergonzoso saber lo que se diría a continuación —Linda... eres una bella Lucario.

—Gracias... —Dijo ella mientras el rubor se volvía cada vez más notorio. —Tu... eres un humano muy G-gua!!!! —El tronco de ella se hizo polvo y astillas debido a la antigüedad del mismo, lo cual causó risas en su amigo que intentó levantarla

En ese momento algo en mi reaccionó... esta amiga mía de verdad era hermosa, aún con sus ojos en espiral dando vueltas por la conmoción, sus caderas eran anchas y llamativas, sus muslos carnosos y tenía unos pechos... del mismo tamaño que esa pua en el.medio, quizás más pequeños pero de un tamaño razonable. 

La sicario se levantó rápido, sacudió su polvo y camino al tronco de su amigo, sentándose a su lado y haciendo ligero contacto visual de forma apenada por ambos en ese lugar. Aunque fueran distintas mentes, el pensamiento era el mismo: estar enamorado pero apenado de admitir tal cosa.

Pasaron las semana y con ello las visitas frecuentes se volvieron un poco más largas debido a que el chico volvía más tarde a su casa. Incluso más íntimas de vez en cuando, con toques en el muslo del otro o uno que otro beso en la mejilla, caricia en la barbilla para ella o una ligera mordida en el cuello de él a forma de saludo. Pero un día, paso algo raro, Lucario estaba sentada con su amigo, viendo las estrellas cuando sintió una mano en su hombro derecho y la presión ligera del brazo de su acompañante en su espalda, llamando a su cabeza para posar sobre el hombro del muchacho.

—Me gusta que pasemos tanto tiempo juntos... es espléndido tener tu compañía Eru.

—Luci... quiero que te llames así lucario.

—Luci... es un bonito nombre para mi —Suelta una risa —Cuatro años siendo amigos y... hasta ahora me pones nombre... pero es un hermoso nombre...

—Alguien como tú... tan bella, merecía tener un bello nombre, cortó pero hermoso. —Ambos dirigieron la vista a los ojos del otro y sin darse cuenta... los cerraron para darse un beso.

No sabía como las relaciones humanas funcionaban, pero el aura de Eru tenía claras intenciones de aparearse conmigo... y yo pronto entraría en celo, era un buen momento para que él y yo lo hiciéramos, ya que su padre consiguió un trabajo más estable hace un año y dejó de venir por la madera,  nadie a parte de otros pokemon viene por aquí. Nadie nos vería en nuestro momento.

-Me gusta cuando pasas tiempo conmigo... 

-A mi me encanta pasar ese tiempo contigo Lucario digo... Lucy, pienso que eres algo increíble

-Si bueno... se que esa forma, eso tan "increíble" que ves en mi es...

-¿Que tratas de decir? 

-Veras... noto tus miradas, como se dirigen de arriba para luego bajar pero... no bajar del todo -Comienza a sonrojarse -Siento como tu mirada recorre mi cuerpo, pero lo recorre de una forma rara, como si se concentrara solo en un punto... en dos puntos de mi ser.

-Y... ¿Eso te molesta? -Ambos intercambian unas sorprendidas miradas. -Digo, si no te gusta yo-yo dejo de hacerlo y-y todos en paz ¿no crees?

-Lo que digo es que no me molesta en lo mas mínimo, solo me causa curiosidad que yo... veo a tus ojos y tu ves... a la púa de mi pecho o a mis caderas. Por lo general cuando estoy de espaldas o cuando vamos a jugar al rió que tu... bueno, cuando pasas la toalla sobre mi, lo haces aplicando cierta presión en esos puntos y bueno... iré al grano. ¿Quieres apareare c-conmigo? 

Él estaba perdido en ese recuerdo como para escuchar lo que decían, solo la mención del rió le hacia recordar ese momento, con ellos dos ya mas crecidos, corriendo por ahí, él sacándose el pantalón y la playera para entrar con ella, con el pelo mojada y con el agua deslizándose por sus finas curvas mientras movía sus caderas tratando de caminar al otro lado sin perder el fondo bajo sus pies. Pero debía volver en si, y esa pregunta lo devolvió al mundo cuando fue repetida.

-Bueno yo pues...

-Antes de que digas algo mas... yo si quiero -Dijo ella comiendo una mano en su hombro y acercando su hocico a la boca de su amigo. 

Continuara...

Bueno gente, espero esto sea lo que esperen y si no... esperen mas, que tengo muchas tareas y de paso estoy trabajando en un libro no para acá y... debe ser perfecto si quiero llegar a ser publicado :c

La siguiente parte tal vez este lista para la otra semana y posiblemente sea del doble que esta... o es posible que esto salga de 5 partes mas o menos.

Cualquier duda, comentario, queja o idea déjenlo en comentarios. 

Se despide de ustedes... pues yo XD.