Introduccion: "Los años pasan... todo sigue mal"

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Aún recuerdo todo del día en que nací, hacía calor y luego frío, había oscuridad y de repente había una luz agrietando la oscuridad tan envolvente.

Al salir de ahí, hacia demasiado frío y no tenía ni una sola fuente de calor más que solo un hueco debajo del tronco de un árbol, al menos podría resguardarme de lo que estaba por venir, lluvia.

No pasó mucho tiempo para que todo el lugar comenzará a crecer bastante alto, hasta parecer un bosque. De ahí hacia mis propias maneras para sobrevivir, ir a cazar, armar mi refugio y por supuesto, aprender a defenderme; no era el más fuerte pero era astuto y más rápido. Una tarde cuando el sol se ocultaba, una voz amigable y dulce se acercó a mí árbol, no entendía que decía pero luego de un rato que seguía hablándome de la misma manera pude comenzar a entenderla, me decía:

-"Ven, no te haré daño. Te daré pescado del que acabamos de atrapar, está fresco"

A lo cual yo salía pero de manera temerosa, y mientras la miraba hacia arriba era diferente. Caminaba en dos patas, era alta y con cabello sobre la cabeza, ofreciéndome comida la seguí hasta donde ella vivía que parecía ser una cueva hecha a medida y con luces en el interior que salían desde adentro, una casa.

Los años pasaron, aquella niña iba creciendo hasta que entendió que yo no podía quedarme con esta forma para siempre. Es decir, ¿como ocultarías a un reptil gigante con escamas, dientes afilados, alas y garras que fácilmente cortan? Era gracioso ver cómo ella trataba de meterme a su armario, al cual no podía. Un día ella regresó de entre la tormenta, yo estaba preocupado ya que nunca llegaba y cuando lo hizo no dudé en ir y acurrucarse en ella para mantenerla cálida, ella me decía muchas cosas a las cuales yo le entendía, en muchos años trataba de hablarle pero ella ni nadie me podía entender cuando trataba de hablar, para ellos parecían gruñidos y rugidos; ella me hablaba de una manera de volverme como ella, yo no sabía que pensar... era extraño, extraño de verdad. Así que me mostró una piedra, de color verde y parecía ser de las típicas piedras preciosas, se acercó a una mesa junto a lo que ella llamaba como "TFROC" o Transformación.

Esa noche ella no se fue a su cama, y eso preocupaba ya que solía estar de mal humor a la mañana siguiente, cuando me digné en ir y tratar que se fuera a dormir, está salió con la piedra un tanto diferente... brillaba de colores alternos al verde, en ocaciones molestaba la luz que emanaba. Ella estaba emocionada, y me dijo que me tranquilizara si algo raro pasaba, así que me colocó la piedra colgando de una cuerda a mi cuello; al momento siguiente podía notar como todo mi entorno era más grande o yo más pequeño, miré hacia abajo a mis manos... diferentes, sin escamas ni garras; ella me había vuelto humano... era sinceramente bizarro y a la vez con una sensación de haber sido así toda una vida; aunque la cara de ella se había decepcionado un poco.

-Tus ojos siguen siendo iguales. Debí suponerlo, las transformaciones nunca son perfectas; quizá tenga que arreglar eso.

Me había dicho, yo estaba conforme y a la vez algo nervioso. Siempre había caminado en cuatro patas y ahora me tocaba andar en dos, fue difícil al principio pero fui acostumbrándome. Fue divertida esa etapa...

Ahora me encuentro aquí, miles de años después. Viajando en un barco hacia un destino que la tatara tatara tatara tatara tatara (y muchas más) nieta de Ann, mi dueña original, no me dio bastante descripción... solo me dijo que allá era un lugar Pacífico en algunos lados y por los otros una muerte segura me esperaba. Remnant se llama la región, conformada por 4 reinos en 4 continentes... de ahí vinieron los que llegaron a las nuevas tierras del "otro lado del charco", llegaron, colonizaron pero todo lo que se refiere a avance tecnológico y de vida, está ahí.

Es raro, ver tantos años pasar y perder a cada ser querido de mi antigua dueña morir por distintas razones... de vejez, horca, crucifixión, quemarla viva... era duro. En todos esos años aprendí que no debo dejarme ver débil, si lo hago... soy un blanco más fácil; así que empecé a entrenar, un día encontré un libro que describía 7 clases de dragones, todo un libro inspirado solo para estudiarlos:

•Estaban los "Flamma Vivere" o las "Llamaradas Vivientes", eran los que manejaban el elemento de fuego y todo lo que en este planeta tenía que ver con ello.

•Luego eran los "Fluctus Errantia" u "Olas Errantes", eran los que dominaban el agua y todo lo respecto a ella.

•Los "aeri vigilator" o "Cielo Vigilante", manejaban el aire, viento y muchas veces eran las causas de los males climas en un sitio.

•Pero los "Terra Vivaldi" o "Tierra Viva", eran toda la tierra bajo nuestros pies... si había un terremoto; ellos eran, erupción volcánica, también.

•Las "Perfectum Tempestas" o "Tormenta Perfecta" son raros.... pero son a la vez comunes, debido a que manejan todo lo eléctrico en cada rincón del planeta; pueden extraer electricidad y usarla a su favor.

•Los "Naturae" o "Naturaleza" son los únicos que tienen poderes curativos, y son los principales responsables de otorgar auras a los llamados "cazadores y cazadoras", pero son aún más raros por eso... pueden ver el tiempo pasado y futuro de un ecosistema, pero tiene límites. Pueden generar vida vegetal y animal en una abrir y cerrar de ojos.

•Y... los "Aeterna Inanis" o "Vacío infinito" son... los más raros de todos, solo han existido 5 de los que se han registrado en el libro. Son raros por el único hecho de ser los más misteriosos, raros y a la vez poderosos. Puesto que tienen cierto poder sobre los demás elementos. Según el libro, estos tipos de dragones conceden deseos a cambio de un alto precio.

A la vez el libro dice que si logras juntar a los 7 líderes de cada elemento, llamados "Guardianes Elementales" abrirás una grieta... y todo en el planeta, morirá si esas son tus intenciones. El problema es que solo los dragones pueden invocarlos y requiere de muchos más de ese elemento para llamarlo.

En todos esos años que yo tuve de vida, comencé a darme cuenta de que tenía varios de estos... elementos, el libro no decía nada sobre dragones con más de un elemento; comencé con el de Electricidad... y logré dominarlo debido a que estaba furioso y ansioso un día... pero tuve la decisión de respirar y calmarme para luego liberar todo en un estallido de rayos eléctricos; luego... me sentí libre de esa tensión. Parecía que cada elemento estaba conectado con la manera en cómo me sentía, no había descubierto 4 de los 7... ya que solo tenía Electricidad, Agua, Tierra y Aire.

Miles de años después y parecía que no importaba. No sabía si era el único o si habían más como yo en alguna otra parte del planeta, pero algo era seguro... tenía que adaptarme, mi nuevo hogar... Vale, en la ciudad y según leí por ahí estaba la Academia Beacon... una de las principales para entrenar jóvenes para ser cazadores y cazadoras. Algo injusto a mí opinión ya que siguen siendo niños, ¿que saben ellos de llevar un arma de destrucción masiva a todos lados?

Día del viaje 23, aproximación hacia Vale.
"El Destino no es algo que lo planees, te hace cambios a lo que tenías planeado..."

Fin de la nota 00723
-Eir Yurgen

Venganza desde las CenizasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora