Venganza desde las Cenizas

Caos

Los soldados comenzaron a dispararme, yo tuve que esconderme detrás de una pared... cuando dejaron de disparar por A o B motivo, yo me asomé con mi arma y disparé varias veces, un disparo a la cabeza o pecho bastaba para acabar con esos varios soldados que derribé, fueron muchos los que caían por montones... pero luego reanudaron su Fuego contra mi, yo corrí hasta ponerme a cubierto en otra pared.

Cuando las balas de ellos se les volvieron a acabar; yo salí de mi cubierta y con mi arma que ahora irradiaba energía de calor, y un color naranja amarillo... la figura del Dragón marcada en el cañón estaba iluminada de un color amarillo intenso. Disparé una sola vez... al impacto con uno de los soldados, hubo una explosión que acabó con ese pelotón. Pero no iba a durar mucho el descanso, otros más vinieron por mi espalda... tomé un par de piedras y las amasé en mis manos, los puños de Grisk se formaron una vez más... los azoté contra el suelo para hacer un escudo de roca para protegerme mientras recargaba; solo vi hacia arriba y las nubes y los relámpagos seguían ahí... alcé mi mano hacia el cielo y la agite un poco para luego dejarla caer en dirección al otro pelotón, funcionó... pero la alarma seguía sonando, la gente corría lejos de mi... pero de pronto todo se detuvo, el sonido, el movimiento, y solo hubo una figura frente a mi de color morada pero irradiando color blanco casi puro:

-La humanidad los quería a ustedes para fabricar armas. -me dijo.- Les cambiamos de parecer y veo que salió mal.

-No trates de cambiar lo que no pueden ser, de una u otra forma yo causo esta guerra... lo he visto con mis propios ojos y con los poderes de Natura. -dije levantándome con quejas.

-Y siempre terminaras demostrando lo que vales y lo digno que eres para portar el poder del Vacío, un poder que no respeta el espacio-tiempo, la vida o la muerte, la luz o la oscuridad... es un simple Caos entre ambas caras de la moneda. -me dijo la figura, a lo que yo alcé la mirada.

-Estoy solo yo, ya no puedo hacer nada... he demostrado muchas cosas pero no quería que todos murieran por mi culpa. -dije apretando mis dientes por la culpa que sentía.- Ya he sufrido mucho, y es inevitable para mí no sufrir más... siempre me están lastimando, de una u otra manera... pero hay algo que aprendí de una chica que es en parte mi hija, "si te golpean, regrésalo más fuerte." -dije yo.

-la figura solo asintió con la cabeza.- Por fin lo entendiste. El significado de la vida... lo que vale la pena por quienes tú quieres, y lo que tienes que saber manejar cuando no dependen de ti. Siempre lo supiste pero... no eras tan digno, podría decirse que eres más digno de lo que fue tu padre y tus ancestros. -me señaló la parte baja de mi pierna pero no lo supe en el momento hasta que todo volvió a correr como debía, el tiempo y movimiento.

Volteé hacia abajo, parecía haberme señalado mi cuchillo... lo saqué y este era diferente, una diferente imagen de el que yo tenía e irradiaba un brillo de color morado por toda la hoja de metal; solo lo miré por unos cuantos segundos mientras los relámpagos iban más seguido y la lluvia comenzaba a caer... Winter venía corriendo hacia mi y detrás de ella varios soldados. Cerré mis ojos y solo se me vinieron a la cabeza, la imagen de todos a quienes yo quería de verdad, mis hermanos y amigos; luego abrí mis ojos y alcé mi mano hacia el cielo haciendo un grito fuerte para luego dejar caer mi mano... la daga se había clavado en el suelo; al mismo momento vi como una energía de liberó en manera de onda expansiva hacia todos lados, un momento después... el brillo de la daga se fue; y Winter se arrojó sobre mi para inmovilizarme, lo logró y me estaba tratando de escapar pero ella no me dejaba:

-Díganles que tenemos al objetivo. -dijo Winter por su radio. Los soldados a su espalda festejaban.- Debiste quedarte en la arena y hacerle frente a tu destino, pero... una bala bastará para pagar todas las vidas que tomaste.