O11CE [Imaginas, One Shots]

38. Felipe.

—Te van a expulsar.

Miré a Cristal—He hecho esto otras veces.

—Pero, son las Águilas, se enojarán.

—¿Tengo cara de que me importe? Nadie pisa el IAD sin haber recibido una broma de parte mía, además, la vez pasada que vinieron la gripe no me dejó. Haré la broma.

Eso no incluye profesores, ahora. No quiero que casi me suspendan otra vez. Además, de castigo siempre me ponen a limpiar lo que hago.

—Pff, como quieras.

Se fueron y me dejaron seguir con mi broma. Esta vez iba contra las Águilas, que se iban a enfrentar contra los Machetes.

Para mi broma se necesitaba mucho tiempo, tenía que amarrar muchas cuerdas y también debía tener en cuenta de que ahora no era solo uno, era un equipo entero.

Primero tenía que amarrar cuerdas para la cubeta que tenía adentro pintura de color azul y también para sostener una segunda cubeta, la cual contenía plumas de diferentes colores. Y luego tenía que amarrar más cuerdas para que al momento en que pisen la trampa, la cubeta, y la tapa de la cubeta no les caiga en la cabeza. Tampoco quería a unos cuantos descalabrados aquí, bueno, sí quería a las Águilas descalabradas pero, como dije, no quiero que ahora si me suspendan.

O ya de plano que me expulsen.

Lo de las plumas fue extra, por la broma que nos hicieron hace algún tiempo.

Estaba todo bien calculado.

Pero hay algo con lo que no contaba.

Martín.

Me había bajado de la escalera para ver que todo estuviera bien, estaba tan concentrada en estar viendo hacía arriba cuando la cubeta se abre, no puedo ni siquiera intentar cubrirme. La pintura azul cae. Y luego las plumas.

Martín ríe.

—¿¿DE QUE RAYOS TE RÍES?? ¿ACASO TIENES UNA IDEA DE LO QUE ACABAS DE HACER?

—Sí, acabo de arruinarte la broma.—Dice con su odiosa voz. 

Y luego alguien se ríe, esa risa ya la había escuchado antes.

—Tú cállate, rubio oxigenado mal teñido. —Dije mientras me limpiaba los ojos.

—Te he dicho un millón de veces que no soy teñido. —Dice Camilo rodando los ojos.

—Ti hi dichi in millin di vicis qui ni sii tiñidi.

—¿Sabes? No sé a quien te pareces más, si a Blue o a un pitufo.

Las malditas aguiluchas ríen. No hace falta mencionar que venía todo el equipo.

—Pues, para pitufo, la estatura tú la tienes.

Río como foca retrasada junto con algunas personas que van pasando y parte de las Águilas, Camilo les da una mirada de advertencia.

Justo cuando va a hablar llega Félix, quien, me mira raro y luego él y su equipo se van. Y así me anduve las siguientes horas porque mi casa esta un poco alejada del IAD y solamente me limpié la cara y las manos.

[...]

El partido había terminado, las Águilas se fueron junto con la mayoría de los estudiantes de el IAD, hoy me quedaría tarde por limpiar el desastre que hice.

Después de estar en Detención por una hora busco los trapeadores y y también a Pulpo, siempre me ayuda cuando hago algunas de mis bromas.

—¿Donde rayos estás? ¡Ayudaaaaa!