SOLO ES UNA PESADILLA〰Creepypastas y tú〰

Capítulo 6

Me desperté gracias a la alarma que no me deja dormir tranquila, seguía teniendo mucho sueño ya que no pude dormir muy bien en la noche. Como siempre, me puse el mismo uniforme, me lavé los dientes y me cepillé el pelo, después me quedé un rato viendo YouTube hasta que sea la hora de irme a clases. Hoy no iba a desayunar porque no me apetecía, bajé las escaleras y salí, fui caminando tranquila pero al tener muy mala suerte, tuve que encontrarme con el grupo de envidiosas.

-Angie: ¡Pero bueno! ¿Cómo así andas por aquí?—puso cara de asombro—.

-Elisabeth: Vaya, y yo que pensé que mi deseo se había cumplido...—dijo haciendo puchero—.

-Tiffany: Si, yo también pensé que ya se había muerto...—se cruzó de brazos y miro a Elisabeth para luego mirarme a mí—.

Yo les mire con cara de disgusto y giré los ojos para luego seguir caminando y pasar de ellas pero Angie me cogió del brazo.

-Angie: Ni te creas que hoy te salvarás de tu paliza—me miró fríamente—La última vez que te vimos, no pudimos darte la paliza porque estabas con tus amiguitos, así que hoy te ha tocado...
Tiffany movió su cabeza en forma de señal y sus amigas me empujaron al final del callejón, me tiraron al suelo y después se fueron de allí dejándome a mí sola con Tiffany, ella empezó a acercarse hacia mí.

-¡Ahora que quieres! Yo no te he echo nada.

-Tiffany: ¡Eso crees tú!—dijo para después darme una patada en el estomago—¡Me quitaste lo que era mío y tú lo sabías! —me dio otra patada en el estomago—.

-¡¿De qué hablas?! ¡Yo no te quité nada!

-Tiffany: ¡¿Cómo que no?! Jake iba a ser mi novio pero tú me lo quitaste, yo te lo dije antes pero al parecer te dio igual y empezasteis a salir vosotros juntos.

-¿Es enserio? ¿Me intentas hacer la vida imposible solo por lo que pasó hace 10 años? ¡Pero si solo teníamos 7 años cuando pasó eso! No me digas que solo por esa estupidez dejaste de ser mi amiga.

-Tiffany: Si, fue por eso. Porque me mentiste sobre la promesa que me hiciste.

-¿Qué? ¿De qué promesa hablas? Yo no recuerdo nada de eso.

-Tiffany: Pues si, me prometiste que dejarías que Jake sea mi novio. ¡Y no la cumpliste!—empezó a darme más patadas y puñetazos—.

Tiffany no paraba de pegarme y yo cada vez me sentía más débil, mi vista se empezaba a nublar y mis fuerzas se habían ido. Después sentí que Tiffany había parado de pegarme, yo levanté mi cabeza y la vi, tenía un cuchillo en la mano y sabía lo que iba a continuación, mi muerte.

-Tu conciencia no te dejará en paz y todo el mundo sabrá que fuiste tú...—dije con todas las fuerzas que me quedaban—.

-Tiffany: Me da igual, prefiero acabar contigo y dejar de verte en mi camino, además, nadie sabrá que fui yo, intentaré que tu muerte parezca un suicidio—paró de hablar por unos segundos y caminó hacia mí lentamente—tranquila, no te haré tanto daño, será muy rápido...

Cerré mis ojos esperando lo peor, supongo que aquí acabará todo, acabaré siendo la débil que supuestamente se suicidó... Después de unos segundos sentí algo frío y metálico penetrando mi piel, era ese cuchillo en mi pecho, ardía un montón pero a la vez sentía que algo recorría a travez de mi sangre. No sé por qué, pero me sentía bien, me sentía mejor que nunca, como si algo en mí había despertado. Abrí mis ojos, y lo primero que vi fue la cara de Tiffany, su mirada expresaba temor, cómo si hubiera visto un fantasma, estaba pálida y tenía el cuchillo en su mano el cuál estaba manchado de sangre mientras goteaba. Me levanté como si nada, no sentía dolor y empecé a acercarme hacia ella lentamente, cada paso que yo daba ella se alejaba más hasta que su espalda tocó la fría pared.

-Tiffany: ¡E-eres un monstruo!—dijo soltando el cuchillo—.

Yo no dije nada, sólo sonreí mientras la miraba a sus ojos, a esos que sólo demostraban miedo. Cuando estaba a milímetros de ella, cogí su cuello con mis manos y cada segundo que pasaba iba apretándolo más. Su piel empezó a ponerse de un color rojo hasta llegar a morado.

-Muere...

Fue lo único que dije y todo se volvió oscuro, yo ya no veía nada hasta que pasaron unos segundos. Vi todo hecho un desastre, había lluvia, el cielo se volvió gris y Tiffany estaba en el suelo sin vida, al verla así me sentí genial. Me di la vuelta y pude verme en el reflejo de un cristal, yo no era la misma, tenía gotas de sangre en mi cara, mis ojos ahora eran una mezcla de rojo y amarillo (foto en multimedia), mi pelo estaba despeinado y mi piel estaba más pálida de lo normal. Pero ese aspecto solo duró unos segundos porque al rato volví a ser la de siempre aunque mi actitud ahora es diferente. Yo me quedé atónita al ver eso pero luego volví a mirar el cuerpo sin vida de Tiffany, tenía que esconderlo para que no lo encontraran, busqué algo que me sirviera en este callejón y encontré una bolsa negra donde podría meter el cuerpo de Tiffany, de hecho, eso fue lo que hice. Después cogí esa bolsa y la llevé al bosque para enterrarlo ahí, mientras hacía mi trabajo en aquel lugar, alguien me llamó la atención.

-X1: ¿Qué haces aquí?—dijo hablando detrás mío—.

-¿Pues tú que crees Hoodie?—supe que era él por instinto, aunque la verdad fue extraño que yo sepa quién me estaba hablando—enterrar el cuerpo de Tiffany.

-Hoodie: —se acercó al hoyo que yo había hecho y después dirigió su mirada al cuerpo sin vida— ¿lo hiciste tú?—dijo con un tono de asombro—.

-Sí, yo la maté—dije mientras tiraba la bolsa al hoyo para luego enterrarlo–.

-Hoodie: Bueno, no me esperaba eso de ti...—dijo mientras se alejaba y se iba a saber dónde—.

Yo giré los ojos y seguí con mi trabajo.

(...)

Volví a mi casa después de enterrar a Tiffany, estaba en mi habitación dibujando tranquilamente para olvidar por un rato lo que hice hoy pero al cabo de unos largos minutos, escuché un ruido muy extraño en mi habitación. Me giré pero no vi a nadie, así que volví a mi cuaderno para seguir dibujando, pero volví a escuchar algo, esta vez fue una risa escalofriante y tenebrosa, ni siquiera era la risa de una persona. Me quedé petrificada al escuchar eso...

-¿Qui-quién está ahí?—dije aún mirando al cuaderno, no quería voltearme pero como nadie contestó decidí girarme a ver de quién pertenecía esa risa—.

Detrás mío estaba un señor parado, sus ojos eran rojos y su mirada daba escalofríos, tenía unos cuernos en la cabeza y alrededor de él había un humo negro, ese ser extraño me miraba fijamente mientras sonreía macabramente.

-X1: Te encontré...

(...)