Vete, no eres digno.

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-Qué sucede Alexandre?
Alexandre: Están en una cabaña, un poco lejos de aquí pero llegaremos.

De inmediato Alexandre tomó su caballo y junto con la mujer íban en busca de Corpus.

[En el bosque]
Alexandre: A todo esto.. no me has dicho tu nombre. ¿Cómo te llamas?
-Puede llamarme como lo desee, no tengo un nombre definido.
Alexandre: Bien, entonces.. para mi serás Roweana.
-Le agradezco
Alexandre: Dejemos los sentimientos a un lado y sigamos el camino, estámos a muy poco de llegar e irrumpir su poca felicidad.

Estában cerca de la cabaña en dónde Corpus y Sarah estában habitando.
No se imaginan la tormenta de terror que se aproxima cuando miren a Alexandre detrás de su puerta.
A unos mentros Alexandre le mostró a Roweana la cabaña, varios árboles la cubrían por tan altos que estában.

Alexandre: Ahí es!

El corsel regresó solo al castillo, Alexandre hizo que la noche cayera lo más rápido posible, quería intimidar a la pareja con sus trucos sucios.
Creía que podía entrar con fácilidad.

[Déntro de la casa]
Corpus: [susurró con miedo] Está aquí!
Sarah:[susurrándo también] Le contaste?
Corpus: !No!, sólo huí no hablé con madie... ¿Cómo diablos supo que estábamos aquí?

[Afuera de la casa]
Alexandre: [Cantando] Oh, Corpus! Dejame entrar! Corpus, sé que estás ahí.

Alexandre tocó la perilla de la puerta pero notó que le quemaba la piel, estába protegida contra el mal.

Alexandre: Eres listo Corpus, te protegiste para que no pudiera entrar, no es así? [Risa diabolica]

Ambos no respondían a su diálogo, lo ignoraban por completo no querían hablar con él ya que estában asustados de como les hablaba.
Trataban de no hacer ruido para que no los escuchara, las cortinas estában tendidas para que no se viera nada, las luces apagadas de igual manera.
Alexandre rodeaba la casa tratándo de encontrar un punto en donde no estuviera protegido.
Lo cual era inútil, toda la casa estába protegida.

Corpus y Sarah notaron que una luz blanca se azomaba por todas las ventanas, que ambos podían ver figuras aterradoras, figuras de demonios tratando de entrar, tocaban las ventanas, el techo crujía, hacían sonidos horripilantes que lo único que querían era quebrantar su fe blanca y pura.
Gritos desde lo lejos se escuchaban pero sabían que eran alusinaciones culposas.

Alexandre: Si el bien puede entrar ahí por qué el mal no?

Los ojos de Alexandre se tornaban negros, Corpus y Sarah cerraban sus ojos y rezaban para que nada malo pasara dentro de la casa.
Un humanoide había entrado por el sótano, se escuchaba como subía las escaleras.. Era Alexandre.
Ambos estában rodeados de un gran circulo grueso de sal que impediría el paso a Alexandre. Escuchaban los pasos acercarse cada vez más y más que de pronto todo estuvo en silencio.
Corpus comenzó a mirar lentamente hacia atrás que una luz iluminaba la silueta del que antes era su amigo, veía su cabello largo y blanco, cuernos muy grandes y afilados que le daba terror  y justo ahí se escuchaba la respiración molesta de Alexandre pero ambos seguían callados.
Alexandre se había transformado en un ser demoniaco como tal lo pensaba Corpus. Ellos no podían verlo muy bien sólo escuchar sus pasos y su respiración como un animal.
Quería traspasar el circulo pero no podía, el poder que tiene era más grande que el suyo necesitaba ser aún más poderoso para poder traspasarlo.
Su piel se quemaba cada vez que intentaba pasarlo pero Corpus de había tranquilizado al ver los intentos fallidos de Alexandre.

Corpus: Vade, tu es dignus! (Vete no eres digno)

Alexandre ya ha desaparecido.

The Lost Lord.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora