La suerte de no tener suerte ||KookV|| (EN EDICIÓN)

Capítulo 40

Entré al club repleto de personas. Jimin había echo bien al escojer el lugar, era uno de los más modernos locales, no era pequeño y tenía una excelente calidad en todo. Había dos pisos, las luces hacían parecer el lugar azul marino acompañado por las típicas luces verdes y rojas parpadeantes. Las mesas largas y redondas rodeaban la pista de cristal mientras sofás blancos y cojines de colores se pegaban a las paredes

— ¡Jungkook! Ven aquí, ¿Qué tal el lugar? —Jimin me rodeó sonriente los hombros con un brazo donde llevaba un vaso de cristal con líquido transparente— Bueno ¿Eh?, Te lo dije, todos los fines de semana está repleto, pero, está noche es para nosotros. Estamos sentados por allá— apunto a una esquina frente a la barra, ya estaban los rostros que conocía rodeando una mesa baja de cristal, ellos estaban a su alrededor en cojines rojos, amarillos y verdes, otros estaban sentados en sillones blancos alrededor de los cojines— yo iré afuera a ver algo en la lista, ahora vuelvo.

Una vez que Jimin se fué de mí lado caminé hasta llegar al círculo donde todos hablaban.

— ¿Juegas Póquer Jungkook? Nos sobra un lugar —preguntó Chanyeol sentado en un cojín frente la mesa con cartas en sus manos. Me senté frente a él en otro cojín.

— Juego. —miré como el otro barajeaba las cartas hasta partirlas. De un momento a otro sentí como el cojín en el que estaba se hundía tras de mí y unos delgados brazos abrazaban mis hombros, terminando en sus manos cruzadas sobre mí pecho.

— Hola, Jungkook —la voz de Lisa se adentró en mi oído, tome una de sus manos y la apreté como saludo, ella se quedó ahí sentada tras de mí sin quitar sus brazos.

— Llegaste justo a tiempo, ¿Con cuánto empiezas? —Chanyeol me entregó mis cartas.

Jimin era de venir y desaparecer debido a que era el anfitrión, cada quince minutos volvía a sentarse a mi lado, para volver a irse en cinco. En una de esas, cuando las partidas y los tragos fueron varios, Jimin regreso con Yoongi de la mano y lo sentó en donde antes era su lugar, justo a un lado mío, no me importó y seguí concentrado en mi juego, una hermosa y perfecta escalera real adornaba mis cartas después de tres partidas, al fin llegaba a mis manos, me la pelan todos en el juego.

— Yoongi trajo a uno de sus amigos, tal vez nadie lo conozca, es Taehyung, saluda Tae —la voz de Jimin perforó en mis oídos, al instante volteé rozando mi mandíbula con el brazo de Lisa que seguía en mis hombros a ver la persona parada al lado del rubio. Ahí estaba Taehyung, sus mejillas estaban rojas y buscaba evitar las miradas de los demás, que por suerte lo pasaron como si nada debido al juego, algunos susurraron un "hola" y otros solo asintieron levemente— siéntate ahí.

Jimin posó sus manos en los hombros de Taehyung y lo obligó a sentarse en un cojín justo a mi lado derecho. Mire a Jimin de forma acusadora, quien me sonrió inocente y guiñó un ojo, maldito idiota, fue hasta Yoongi y se sentó en sus piernas, enrollando uno de sus brazos por sus hombros, mirando mal a la chica que comenzaba a acercarse por detrás al pálido. Mire en dirección a Taehyung, él evitaba mi mirada viendo sus manos. Rodé los ojos, ¿Qué mierda estaba haciendo aquí? Conocía a las personas en este lugar, se lo comerían vivo. Carajo. Desvíe la mirada a mis cartas.

— Yo voy —sonrió desde el otro lado de la mesa JB, sonreí también. Unos también fueron y otros pasaron negando con la cabeza.

— Voy —hablé.

Al momento de descubrir los juego en la mesa una sonrisa se formó en mis labios. Había ganado a dos tontas escaleras y un poker.

— ¡Maldito seas Jeon Jungkook! —exclamo JB, quién hubiese ganado de no ser por mí. Le tiré un beso mientras juntaba los billetes a un lado.