La suerte de no tener suerte ||KookV|| (EN EDICIÓN)

Capítulo 57

Salí del baño minutos después, aún sentía cada vena de mi cuerpo palpitar, la temperatura en mi cuerpo más arriba de lo normal y la sequedad de mi boca, pero al menos ahora no estaba semierecto. Caminé entre las personas hasta una de las mesas dónde tome una botella de agua y bebí de ella hasta casi terminarla. Mi corazón acelerado y dolorido me recordaba lo que había pasado hacía minutos, sus labios en los míos, sus manos en mis cabellos, su lengua en la mía. Me sentía desfallecer ahí mismo, lo había probado otra vez, y había vuelto exactamente a la misma obsesión, pero, ¿Cómo no hacerlo si es Kim Taehyung?

Tenía que volver a verlo, tenía que hacerlo antes del sábado, tenía que hablarle... Tomé mi teléfono y marqué un número, al finalizar la llamada fuí hasta una mesa donde había plumas y pequeñas tarjetas. Escribí seis números, cinco letras. Esperé por mi empleado, le dí la tarjeta doblada en dos mientras él me entregaba una pequeña credencial.

— ... nadie puede verte, ¿De acuerdo? Son asuntos privados entre el sr. Kim y yo. No quiero rumores. —ordené al chico, quién asentía obediente— De acuerdo. Llévalo.

Narrador omnisciente:

<<El empleado siguiendo las órdenes de su jefe Jeon Jungkook, manteniéndose a raya de su curiosidad creciente por abrir aquella tarjeta en una tentación realmente fácil, buscó al señor Kim entre las personas, tardó alrededor de 20 minutos en encontrarlo en un círculo de varios hombres, él hablaba con fluidez siendo el centro de atención, los demás miraban impresionados al chico castaño de perfectas facciones. No era algo bueno para el chico, su jefe había dejado en claro "Lo más rápido posible...", No podía defraudarlo, pero también dijo "...nadie puede verte..." Decidió que esperaría por qué acabase de hablar para ir con él. Y así lo hizo, otros 20 minutos después se giró a su mesa, dándole la oportunidad perfecta al chico de ir hasta él.

— Sr. Kim —habló claro, el bien parecido hombre volteó a él con indiferencia, aunque se sentía intimidado siguió con su orden sin titubear— El sr. Jeon me ha pedido que le entregase ésto, —extendio el pequeño papel amarillo junto a una pequeña tarjeta— me dijo que era importante. Es todo, buenas noches.

Se giró dejando al de mandíbula cuadrada con el ceño fruncido y mirada puesta sobre el pequeño cuadro de papel amarillo. Sintió su estómago contraerse y rodó los ojos exasperado por aquello que no podía controlar. Abrió la pequeña hoja que daba una tarjeta y una corta oración.

~12:00, Suite 16~

Su corazón saltó alto en su pecho, ensordeciendolo, sus manos temblaron alrededor de la tarjeta y el amarillo papel que arrugó en su mano derecha.>>

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12:23, y aún no había rastro del chico de cabellos castaños, Jungkook paseaba de un lado a otro en la grande suite del edificio donde pisos abajo se estaba llevando a cabo el evento. Su corazón dolía y aún se aferraba a la idea de que el otro sí llegaría, aún si en su mente sabía perfectamente que él no iría. Su vientre se estrujó, la desesperación comenzaba a apoderarse de él. Y entonces, después de ver su reloj por décima vez, decidió abandonar el lugar, no tenía caso seguir de esa manera, esperando por él. Con los ojos acuados caminó hasta la entrada y abrió la puerta. En el pasillo estaba el castaño, caminando frente la puerta de un lado a otro, se detuvo al ver a Jungkook frente a él. Ambos se miraron a los ojos, el azabache soltó el aire que no sabía que estaba reteniendo, tomó la mano de Taehyung y tiró de ella hasta meterlo a la habitación y cerrar la puerta tras él.