You can be the boss, Daddy. [Vkook]

《 8 》

Jungkook se encontraba sentado a mitad de la cama con su conejo en las piernas y comiendo un pastelito de vainilla que sabía delicioso. La puerta se abrió y por esta entro el peli-plata quien se recostó frente suyo de manera que quedaban de frente, Jungkook se inclinó y beso sus labios con dulzura.

—Dime algo bebé —El omega comió el último bocado de su pastelito y le miro agrandando un poco más sus ojos, dandole atender que le prestaba atención. —¿El tal Yugyeom ese te pareció lindo?

—Un poco pero no es tan lindo como tú, daddy —Taehyung sonrió, pero el era muy celoso por esta razón no podía dejar pasar algo así

—¿Y por qué besaste su mejilla? —Jungkook en ese momento abrió un poco sus labios, las palabras no le salieron pues aquel acto había sido meramente un impulso

—Le estaba agradeciendo por ayudarme —Hizo un puchero cuando Taehyung le quito el conejo de las piernas y lo lanzó de manera que este quedó sobre el sofá, el peli-rosa se hizo hacia atrás quedando pegado al respaldo de la cama

—Esos gestos solamente puedes tenerlos con tu daddy, bebé —El mayor dejó a la vista una pequeña cuerda de color rosa —¿Sabes lo que eso significa?

—¿Daddy debe castigarme? —Taehyung tomo las manos de su bebé y beso ambas con dulzura

—Así es pequeño, a daddy no le gusta que tus lindos labios toquen la piel de alguien más y menos me gusta que ese tipo te haya observado de esa forma —Lo miraba a los ojos, la mirada de Taehyung era tan profunda que Jungkook lograba perderse en ese mar chocolatoso. —Quítate la ropa, mejor que sea lento y cuando estés desnudo te recuestas boca abajo

El menor asintió y se puso de pie mientras el alfa jugaba con la cuerda logrando despertar la curiosidad de Jungkook. Este último mencionado quito en primer lugar su short, dejando a la vista las bragas color rosa pastel que traía debajo. Luego puso sus manos en cruzo tomando el borde de su suéter subiéndolo hasta que quedó fuera de su cuerpo, lo dejó de lado.

Taehyung relamía sus labios al ver el cuerpo de su bebé quedar expuesto poco a poco, los moretones ya casi desaparecían del todo por lo que ahora si podía apreciar la piel nívea del menor, se veía como un hermoso ángel que sin duda el estaba corrompiendo de a poco.

Él omega quito sus medias, deslizándolas con lentitud por sus piernas, el mayor no aguanto mucho y ya que se encontraba sentado al borde de la cama mirándolo fijamente, comenzó a acariciar su miembro por encima de su pantalón, Jungkook lo ponía tan duro con esos simples movimientos tan sensuales.

—Creo que te estorba algo aún... —Jungkook se sonrojó violentamente pero no puso objeción y se quito las bragas, se acercó hasta la cama y se colocó boca abajo tal como su daddy de lo había pedido. —Contaras del uno al cinco, quiero que lo hagas fuerte de manera que yo pueda escucharte a la perfección o el castigo será más grande

—Si, daddy... —Luego de eso el menor sintió como Taehyung tomaba sus muñecas y jalaba sus brazos hacia detrás dejándolas reposadas sobre su espalda, luego las ató con la cuerda rosa que ya le había mostrado.

Lo tomo de las caderas e hizo que levantara un poco su trasero, Taehyung se mordió el labio con fuerza, le estaba diciendo muy difícil controlarse y no follarlo en ese mismo instante.

—Cuenta, ahora —Su voz sonó firme, sus largos dedos pasaban superficialmente por los muslos y glúteos de Jungkook.

—Uno... —Tuvo que morderse el labio para no quejarse cuando la palma de Taehyung se estampó con fuerza sobre su trasero —Dos... —Otra nalgada y está vez más fuerte —T-Tres... —Soltó un pequeño quejido tras la tercera nalgada, seguramente su trasero ya estaba más que rojo —Cua...Cuatro —A media palabra Taehyung le había dado otra nalgada mucho más fuerte que le habia arrancado un gritito —Cinco —Esa ultima nalgada fue la más fuerte de todas.

Se removía incómodo pues sus brazos se habían entumecido y las muñecas le dolían un poco ya que sin darse cuenta de había intentado soltar.

—Daddy... ¿Ya me vas a soltar? —Tras esa pregunta Taehyung le quitó la cuerda por lo que en seguida se sentó y se sobo las muñecas

—¿Aprendiste la lección bebé? —Jungkook asintió y recibió un pequeño beso en los labios

Taehyung se había levantado dispuesto a irse a su habitación pero Jungkook lo tomo del antebrazo impiemdole que se fuera, estaba parado al borde de la cama y Jungkook estaba hincado en el colchón quedando a la altura del alfa.

—Quédate a dormir conmigo, por favor —Los labios del menor se encontraban dejando besos húmedos en el cuello del más grande robándole algunos suspiros

—¿Como puedo resistirme si me lo pides de esa manera? —El menor sonrió victorioso.

Esa noche Jungkook durmió desnudo en los brazos de Taehyung que a su vez estaba en ropa interior. Y claro, el conejo de peluche también se encontraba presente en la cama aunque no tenía tanta atención de su dueño como la tenía el alfa.

Y si, Taehyung tuvo que luchar contra sus instintos por no tomar al menor esa noche... aún no terminaba de ganarse su confianza pero lo mejor estaba por venir.