La Chica Del 269 | Caché (Terminada)

Capítulo 66. Contrato.

POCHÉ.

Estaba arreglando los últimos retoques de mi vestido, en unas horas más, será la inauguración de la línea de ropa de mi amor, estaba bastante emocionada, tanto que la noche anterior no pudo pegar ojo en toda la noche, me tocó consentirla y mimarla hasta lograr que calmara esos nervios que trae encima. Estaba muy orgullosa de ella, pues desde que llegué a Los Ángeles estaba en proceso de lanzar su línea de ropa y que al fin estemos a pocas horas de cumplirlo, se me llena el corazón.

Apliqué un poco de rubor e iluminador en mi pómulo para dar por finalizado mi maquillaje, solo constaba en un vestido negro con diseños en frente y unos tacones a juego, tenía mi cabello ondulado y suelto, estaba bastante adecuado para la ocasión al parecer de Pau.

-¿Amor? ¿Ya estás?- preguntó Calle entrando a la habitación, no pude evitar sonreír al verla tan hermosa, ella es hermosa, estaba vestida hermosa. 

-Sí- le dije para mirarme por última vez en el espejo, centré mi atención en ella, quien me miraba de arriba a abajo, examinándome. 

-Estás que ardes...- dijo mordiendo su labio inferior, una risa nerviosa salió dentro de mí, ella era la única lograba ponerme así.

-Me gustas más tú- le dije y me acerqué a su rostro, besé su mejilla y ella se alejó a regañadientes.

-Sabes que no me gusta que me beses en el maquillaje, para eso está la boca- dijo con puchero, reí y besé su labios de forma rápida. Tomó de mi mano y nos dispusimos a salir de los edificios, nos despedimos de Ed y nos subimos al auto alquilado por el señor Smith.

No solté la mano de Calle ni siquiera estando adentro del auto, sé que de alguna forma estaba nerviosa y tomar mi mano es la única que la calma.

-¿Paula ya está allí?- le pregunté y ella asintió.

-Está con Matu, al parecer solo faltamos nosotras- dijo sonriente,

-¿Ya sabes lo que dirás?- le pregunté nuevamente, ella sacó un papelito dentro de su brassier causándome un ataque de risa, lo desdobló y me lo tendió, no tenía idea cuando había escrito esto. Leí cada párrafo de aquel discurso y pareciera como si lo hubiese escrito un profesional.

-Lo escribió Pau- dijo al ver mi cara, reí.

-Pues, Pau es una genia-le dije para doblar el papel y meterlo yo misma en su brassier, Calle solo me miró con la ceja alzada, en este momento agradecía que los choferes estuvieran algo lejos de nosotras.

Pasaron unos cuantos besos y caricias más, ya estábamos en el evento, era pleno día, todo a nuestro alrededor estaban lleno de periodistas y fotógrafos, estábamos afuera de una de las sucursales mas grandes de H&M en Los Ángeles. El auto no se detuvo, nos llevó hasta un estacionamiento subterráneo del lugar, especial para estos casos, de un momento a otro, la luz que llegaba en la ventana se fue y a cambio, llegó oscuridad, pude divisar a través de la ventana, unos cuantos autos iguales al nuestro.

Una vez estacionada, abrí la puerta para bajarme del auto, me di la vuelta y le estiré la mano a mi novia para ayudarla a bajar y así fue, no pasaron ni diez segundos cuando ya tenía a la castaña sobre nosotras.

-¡Se ven divinas!- dijo emocionada para envolverme en sus brazos y posteriormente hacer lo mismo con Calle- Hice un excelente trabajo eligiendo sus atuendos- dijo sonriente. Extrañaba a la castaña, debido al trabajo de Calle, no lograba verla mucho pues, ha recibido ofertas de otros países que la tienen bastante ocupada.

-Te extrañé- le dije para volver a abrazarla, me contestó con un "yo también" y se mantuvo cerca de mí cuando nos separamos.

-¿Te aprendiste lo que te di?- le preguntó a Calle quien tenía la mirada perdida en el suelo, asintió lentamente, estaba nerviosa y eso le estaba jugando en contra- Solo tienes que hablar y sacar la sabana que cubre el telón de tu línea de ropa, Daniela.