Los Guardianes de Cianta

CUARTA PARTE: EL CABALLERO DE DARK CITY Capítulo 45: Noche de Rutina

Una lluvia nocturna, tenue pero constante, empapa los vidrios de los edificios de un distrito particularmente pobre de Dark City. Las únicas luces que permiten ver la caída de la lluvia le pertenecen a la mala iluminación de los faroles en las calles, aparte del letrero tintineante de neón de un hotel. En la recepción de dicho edificio, un televisor viejo y cuadrado, pegado en lo alto de una pared, se encuentra dando un reportaje repetido sobre Knight, mostrando una gráfica de cómo el crimen se redujo en un importante porcentaje desde su llegada. Sin embargo, las estadísticas de crimen de la ciudad siguen siendo las más altas del país; aun así, se puede notar que Knight ha hecho su parte para tratar de corregir este hecho.

Lo único que iluminaba la entrada del hotel en esa callada noche era el televisor, la luz verduzca de la parte de la sala donde se encontraba el aparato y el teléfono de la mujer que se encontraba en el mostrador de madera, quien escuchaba la nota, pero estaba más atenta a lo que pasaba en su celular. Ni siquiera el sonido de la pequeña campana que avisa sobre la llegada de alguien al hotel fue suficiente para distraer su atención.

-Ese sujeto parece ser importante. –Dijo el hombre que había entrado tras ver por un par de segundos el televisor a la izquierda de la recepcionista, quien siguió sin despegar la vista de su teléfono.

-¿Knight? Sí, es un héroe. O eso dicen. –Dijo con una voz despreocupada.

-¿Usted no lo cree?

-Reconozco su trabajo. Es cierto que desde que está aquí esta ciudad da un poco menos de asco; pero sólo es un hombre. Dark City no es una ciudad pequeña y cada calle es más repugnante que la anterior. Ese sujeto puede saltar de un tejado a otro, pero hay partes de la ciudad tan podridas que estoy segura que ni siquiera él se atrevería a pisar.

-¿Cómo ésta?

-Jeje sí. Un superhéroe como él tiene mejores cosas que hacer que pisar este basurero.

-¿Está segura?

La pregunta extrañó a la mujer, quien se detuvo por un instante de su monótona acción de deslizar su dedo por el teléfono para mirar al sujeto que le estaba hablando. Cuando lo hizo, corrigió su postura, producto de la sorpresa.

Era nadie menos que Knight, cuyo traje apenas se distinguía de entre la oscuridad del resto de la sala, pero sus visores blancos lo hicieron resaltar, causando que la mujer se quedara muda.

-Estoy buscando a alguien alojado aquí.

Si bien Knight no es un policía formal de Dark City, cuenta como un agente del gobierno, por lo que la mujer tuvo que acceder a darle toda la información que requirió; aunque aún si no fuera un "militar", hubiera sido difícil negarle algo a alguien con una apariencia un poco siniestra a la vez que imponente como lo era él.

Knight se encuentra en otra de esas misiones de "búsqueda y captura". El procedimiento para completarlas es el mismo de siempre: Detectar el perpetrador del crimen, averiguar algunos datos clave sobre esa persona, descubrir su ubicación y llevarlo tras las rejas. Es en esta parte donde Knight entra en acción, pues es Hamilton quien, por lo general, se encarga de la otra parte del trabajo, monitoreando a Ray en todo momento desde su sala de operaciones con la compañía de Jonathan, y ocasionalmente de Sam.

La ubicación de este fugitivo es el piso tres, departamento quince. La lluvia calmada pero firme, casi melancólica, es lo suficientemente notoria como para que el ruido de las gotas retumben a través de los cristales de las ventanas del pasillo; lo cual, junto con la mala iluminación de éste y los pasos amortiguados por la sucia alfombra, generan un ambiente entre tenso y pobre. Tras caminar un poco, Knight se encuentra frente a una puerta de madera casi carcomida, con el número "15" pegado en la parte superior. Tras notar que está cerrada, decide saltarse las formalidades y tirar la puerta con una patada firme, causando un estruendo enorme en todo el pasillo, el cual parece estar vacío.