Los Guardianes de Cianta

Capítulo 34: Alan Hamilton

"Hush Now-Jimmy Hendrix" fue lo que apareció en la pantalla de la rockola.

Hamilton se enderezó en el lugar en el que estaba, con las manos juntas apoyadas en la mesa, viendo a Los Guardianes con una expresión de desgano. –No sé qué decirles además de lo que ya contó Jonathan. Yo siempre me he guiado por un sentido de justicia. No tolero la impunidad y las opresiones de cualquier tipo. Fue por eso que me hice policía. Cuando Víctor nos "ofreció" ser parte de su equipo de seguridad, yo no estaba muy contento con la idea, pero, ciertamente, ya no tenía qué perder... o al menos eso creí, pues resulta que sí perdí algo mientras trabajé para Víctor: mi paz mental y una conciencia limpia; sabía que estaba del lado incorrecto. Silenciar gente, amenazar personas, extorsionar a otras... básicamente era un mafioso legal, y lo odiaba. No sé cómo pero Hopkins se enteró de eso, por lo que me llamó un día y me habló para que participara en un complot que estaba preparando en contra de los Blake... accedí casi sin pensarlo. –Sonrió.

Hamilton se cayó, como si hubiera terminado, esto no les cuadró mucho a los otros Guardianes.

-¿Y ya? –Preguntó Reed. -¿Eso es todo? ¿Sin nada... personal?

-Te lo dije, la justicia para mi es algo importante.

-¿Y por qué lo es?

-Solo porque sí. –Dijo Hamilton encogiéndose de hombros. –Valores familiares, si lo quieres ver por ese lado. –Sonrió.

Jasón y Reed intercambiaron miradas, es obvio que Hamilton no quiere decir algo, pero por el momento lo dejan pasar.

-Su... pongo que te va a ti, fortachón. –Dijo Reed, aún extrañado, volteando a ver a Chester...