-Gracias, iré a dormir ya es tarde.- Dije mientras me levantaba del asiento.
-Si, descansa hija, nosotros también nos iremos a dormir.- Dijo mi padre imitando mi acción.
-Si descansen.- Subí las escaleras y entre a mi habitación, entre rápido al baño para darme una ducha, saliendo tome mi ropa interior color negro y unos jeans del mismo color, tome una blusa blanca y coloque mis botas, cepille mi cabello y mi chaqueta de cuero me la coloque.
mi celular empezó a sonar y lo tome era mi amiga Sadie.
-Ya estoy aquí, baja rápido.
-Ahora salgo.
-Bien.
Guarde el celular en mi chaqueta y baje por la ventana de mi habitación, subí al coche de Jaeden y ahí estaba mi amiga.
-Hola.
-Hola.- Contestaron estos.
El camino hacia la casa de Jaeden fue silencioso nadie decía nada, Jaeden solo conducía y Sadie se escribía con alguien. Después de unos quince minutos llegamos y bajamos del coche, entre a la cochera y subí a mi moto, me puse el casco y la saque. mi amiga se subió atrás de mí.
-Por favor ten cuidado.- Dijo mi primo con un tono de preocupación.
-Lo tendré Jaeden, te veo después.- El solo respondió un si y arranque la moto hacia las carreras.
Hoy tendría que correr, estaba ¿Emocionada?, ¿Preocupada?, no sabia lo que sentía en esos momentos, me emociona correr pero tenia miedo de que Finn intentara saber mi identidad. Tardamos muy poco en llegar, Sadie bajo de la moto y fue directo a preparar toda para anunciar la carrera, deje la moto y entre al bar directo a la sala donde estuve la ultima vez con Sadie, quite mi casco y me estire un poco.
-Así que tú eres la reina.- Esa voz, quede paralizada cuando la escuche, mi cuerpo tembló, y rápidamente tome el casco y me lo coloque.
-Lárgate.- Dije y lo mire.
-Tu voz, me suena algo familiar.- Dijo algo pensativo.
-En dos minutos empezara la carrera de la reina.- Se pudo escuchar lo que dijo mi amiga, camine para salir pero Finn me lo impedía.
-Quítate.
-Sabes me recuerdas a alguien que conocí hace poco y sabes que, es una muy buena amiga tuya.- Mi piel se erizo al escuchar esas palabras, sabia perfectamente que se refería a mí.- O eso fue lo que dijo, creó que no lo seria sino me hubiera amenazado. Eres tan parecida a ella, si no tuvieras ese casco puesto diría que son la misma persona.
-No se de que estás hablando.- Dije y lo empuje para poder salir de ahí.
-Recuerda que ahora se cosas que te pueden perjudicar reina o mejor dicho, ____.- Pare en seco al escuchar mi nombre, lo sabe ahora él sabe realmente quien soy, me podría arruinar, estaba acabada, él me podría destruir en un instante. No respondí ante eso y salí corriendo del bar, subí a mi moto y arranque, hoy no pensaba correr después de eso.
Mi mente estaba en otro mundo, no sabia a donde me dirigía solo conducía sin parar, esquivando los coches y pasando algunas señales de alto. Cuando entre en razón paré y mire el lugar donde me encontraba, no había nada a excepción de una pequeña cafetería llamada Popp's, todo lo demás estaba desierto, baje de la moto y quite mi casco.
Aquellas palabras me volvieron a pasar por la cabeza, no podía ni imaginar lo que podría pasar si Finn hablara y le confesara a todos que la hija del millonario es la famosa ¨Reina de las carreras ilegales¨, el enojo me invadió por completo y arroje el casco al suelo, provocando que este se rayara.
Me tape la cara con mis manos y me empece a maldecir por estúpida, quería estar tres metros bajo tierra en estos momentos, me recargue en la moto y mi celular vibro, era un numero desconocido, así que atendí, antes de que pudiera decir algo hablaron por este y me tense al escuchar otra vez esa voz.
-¿Dónde estás ____ ____?.- Era el.
-¿Quién habla?.- Mentí al decir eso, sabia perfectamente que era el ruloso de Wolfard.
-Vamos sabes perfectamente quien soy, no sabes fingir.
-¿Qué quieres?.
-Pregunte ¿Dónde estás?.
-Que te importa.
-Quiero hablar contigo.- Su tono de voz era serio.- Así que dime en dónde estás.
-No lo se y aunque lo supiera no te lo diría.
-Espera, entonces ¿Sólo saliste de aquí, condujiste a un lugar y no tienes ni la mas remota idea de cual es?.
-Algo así.
-Bien dime que es lo que ves.
-Veo seis postes, dos bancas y mínimo ocho arboles.
-No pues ahora si ya se donde estás.
-Ah y una cafetería que se llama... pup... no, pop.
-Popp's.- Dijo aquel.- Ya se dónde estás quédate ahí.
-No de hecho ya me voy de aquí.
-Te vas a perder quédate ahí.
-TÚ NO ME DIRÁS QUE HACER.- Dije alzando un poco la voz.
-Le diré a todos quien eres en realidad.
-Aquí te espero, no te tardes.- Dije por ultimo y colgué. Estaba demente por esperar a Finn, pero estaría mas demente si me arriesgaba a irme y que él hablara, pero me preocupaba de que Finn quisiera hablar conmigo, ¿Será mi fin?.