Cuando llegué a casa todo empapado mi madre me riñó, pero de forma cariñosa. No la escuchaba, solo asentía.
Me fui arriba para darme un baño caliente y sacarme el frío de los huesos. Tenía la sensación de sentirme vacío, todo seguía importarme, bueno se resumía en el voley, pero de una forma distinta.
Encima de mi cama puse las dos camisetas del Aoba Josai. Cerré los ojos y me imaginé yo entrando en el pabellón siendo uno más de ese equipo. Luego me vi con el chandal, los pantalones... todo me sentaba bien en mi cabeza todo era perfecto.
Esos colores resaltaban mis ojos los cuales eran azules oscuros y él no se había dado cuenta, bueno muy tarde lo notó.
Llamaron a la puerta. Dejé de pensar en mi dentro del Aoba Josai y atendí a quien se encontraba detrás de la puerta. No era mi madre, de hecho me sorprendió verlo. A mi hermano, Haru. Estaba ya en la universidad y no vivía en casa, se había ido a Tokyo, no sabía que había vuelto.
— No sabía que volvías.- Me lo miré de arriba abajo, tenía el pelo mojado como la mayoría de tiempo que le recordaba, él hacía natación. Era muy bueno, llegó muy lejos, pero decidió poner sus estudios universitarios a su pasión, nos decía que seguía nadando, pero era mentira. No nos parecíamos, él era más sociable y sacaba buenas notas, pero la gran diferencia era que Haru no era nada competitivo y por eso dejó la natación. Yo no iba a dejar el volley por nada, solo hasta cumplir mis objetivos que eran muy ambiciosos.
— Quería que fuera sorpresa.- Me encogí de hombros. Su aparición por casa no era ninguna sorpresa, era solo una persona más.- Mañana vuelvo a Tokyo.- Seguí sin inmutarme, cogí el pijama para ponerme después de la ducha. Me lo quedé mirando mientras hablaba.- Primero, la mama ha dicho que no te duches, sino vamos a irnos a dormir muy tarde y 2, está el papa esperándonos en la mesa.
Éso si que era una sorpresa, ver a mi padre por casa era como pedirle a Hinata que lo hiciera bien durante los partidos. Le dije a mi hermano que me ponía el pijama y bajaba.
Cuando fui a poner la ropa de lavar, me crucé con mi hermano y parecía estar feliz.
En la mesa todo era raro, siempre cenábamos mi madre y yo. Hoy volvía a estar llena, como lo había sido durante mucho tiempo atrás y poco a poco se iba vaciando. El día que yo me fuera, ¿Mi madre iba a cenar sola? Esperaba que no.
— Mi visita se debe a que el director del Aoba Josai me ha pedido que haga una charla sobre la universidad a los de 3°.- Tengo que hacer unos apuntes para entenderlo todo. Primeramente, mi hermano fue al Aoba Josai porque ésa escuela era de lo mejor que teníamos cerca. Los estudiantes no solo eran los mejores en su deporte, sino que mayoritariamente también en las notas. Mi hermano era superbueno estudiando y por eso estaba donde estaba. Segundo, yo por el volley no había entrado al Aoba Josai, si fuera un chico normal y corriente no habría entrado por lo que respecta a las notas, pero los profesores pensaban que ser listo era genético. Tercero, a mi padre no le gustaba que hiciera volley, hablar de ello era como un tema tabú. Y por cuarta parte, mi hermano solía hablar y responder a preguntas que él quería que le hiciéramos y las que se imaginaba.- Como no me preguntáis, he ido a hacer una charla y he conocido a un tal Oikawa.- No me sorprendía, era otro chico que le gustaba estar en todas partes, pero Haru era más humilde.- Hemos estado hablando y me ha dicho que vas a hacer un torneo en si equipo.- Me dio un golpe en la espalda, como había hecho Oikawa por la tarde.- Cada vez estás más cerca.
Mis ojos rolaron, era una información sin más que se había sacado de contexto por culpa del colocador del Aoba.
— Hijo, ya sabes que el volley no me gusta.- Tampoco sabía como se jugaba, nunca lo había visto ni por la televisión, así que mi padre no era nadie para juzgar ese deporte.- No es como la natación que es un deporte limpio y elegante, como hizo tu hermano que mira que lejos ha llegado. Sin embargo, si el volley te puede hacer entrar en el Aoba Josai, me voy a sentir tan orgulloso...Su cara cambió, parecía feliz u orgulloso, pero solamente porque había una milésima de oportunidad de que fuera al Aoba Josai como estudiante porque no podía jugar sin ir a esa escuela. Si me aceptaban por el volley significaba que era bueno y había cambiado mi forma de jugar, eso me hacía aún mejor, pero por dentro no estaba seguro si realmente quería ir al Aoba Josai o no. Valía la pena dejarlos atrás? Dejarlo a él atrás? Sin mí no era nadie, pero Oikawa dijo que al princio se había vuelto dependiente... no me lo podía depender.
— ¿Os imagináis toda la familia Kageyama graduándose en el Aoba? ¿verdad que sería fantástico?- Miró a mi madre primero y luego a mi hermano. Me miró y dijo.- El día que lo consigas, me harás el padre más feliz del mundo, eso te lo aseguro.
¿Tenía que estar orgulloso de mi mismo o hacer orgulloso a mi padre?
Por último mi hermano añadió:
— Ya tiene las camisetas en su cuarto, ¿las quieres ver papa?- Él asintió, mi hermano puso una cara pícara. Miré mi plato... ya no tenía hambre, no me levanté ni me fui a mi cuarto porque iban a entrar y a chafardearla toda. Suspiré. Suspiré 3 veces.
— Voy a jugar al Aoba Josai si me vais a ver a los partidos, sino no.- Levanté la cabeza y los miré, no se lo esperaban. Mi hermano abrió la boca para rechistar, iba a decir que tenia clase y que no podía ir y mi padre lo mismo pero con el trabajo. Mi madre iba a sonreír y decir que se lo iba a ingeniar para salir antes del trabajo, pero nunca podía. Así había sido todas las veces que les había pedido que me vinieran a ver. Había roto la promesa con Oikawa...
Sorprendentemente, mi padre hizo una sonrisa muy grande, tanto que se le cerraron los ojos y añadió:
— Claro que vamos a ir, yo seré el primero a animarte cuando toques una pelota como hacéis en el volley.- Miró a mi madre y a mi hermano que sonrieron.- Ya buscaré la manera para recogeros a los dos. No te preocupes que vamos a estar allí.Después de que mi hermano le enseñara las camisetas, mi padre se interesó por el volley y mi hermano le enseñó todo tipo de vídeos donde salía, desde la escuela media hasta la escuela superior. Suspiré. Una vez que mi cuarto estaba vacío me fui allí. Desde el piso de arriba escuchaba a mi padre gritar y decir que bueno era mientras llamaba a todos sus compañeros de trabajo y amigos que hacía que no sabía nada de ellos desde mucho tiempo.
Tumbado en mi cama con toda la casa en silencio miré el móvil. El último mensaje que había mandado eran los de Hinata hacía más de 12 horas y no me había respondido. Primero pensé que todavía no tenía el teléfono pero marcaba como visto hacía un par de horas atrás. También estaban las llamadas perdidas. Suspiré.
23:26
KAGEYAMA: ¿Donde has estado? ¿Estás bien? ¿Ya tienes móvil?
Eso no se lo podía poner... para nada era yo, no podía demostrarle tanta debilidad.23:27
KAGEYAMA: ¿Como te atreves a dejarnos tirados?Nanase Haruka, también conocido como Haru. Es el protagonista del anime Free! Que es algo parecida a Haikyuu, pero va sobre natación.
He pensado que podía ser su hermano porque se parecen bastante y es mayor que Kageyama, pero en la historia aún más.
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And His Smile Is So Fucking Cute |Hinata y Kageyama|
FanficVoley, su pasión. Su pasión, su competitividad. Su competitividad, su unión. Su unión, su fuerza. Su fuerza, su triunfo.