Steve*
Estábamos de misión, buscando información valiosa en el sótano de una base abandona de Hydra. Natasha se encontraba en la base de control extrayendo información mientras yo vigilaba en los pasillos, el lugar estaba aparentemente abandonado. Lo que me pareció muy extraño.
-Listo Cap. Es hora de irnos. -Dijo Natasha satisfecha.
-Bien, andando.
Un sonido muy familiar comenzó a escucharse en los pasillos, al parecer era una alarma que por alguna razón se había activado. Quizá al retirar el pendrive un código se seguridad se había liberado como protección.
-¡Demonios, Steve! un misil se dirige a la base, no lograremos salir, se encuentra a 10 segundos de aquí.
El capitán observó a su alrededor, visualizando un conducto de agua protegido por una rejillas de acero. Tomó a Natasha de la mano arrastrándola hasta ahí, destrozando la protección para entrar en el pequeño hueco.
-Solo recuerdo que aferré a Nat a mi cuerpo, posicionándome sobre ella para cubrirnos con mi escudo, de ahí todo se tornó negro.
Una semana había pasado desde aquel pequeño descuido que casi les cuesta la vida.
-¿Dónde me encuentro? ¿Qué paso? ¿Dónde está Natasha? -Preguntó Rogers confuso y angustiado.
-Tranquilo capitán, no debe alterarse. Casi lo perdemos, estuvo una semana en coma. Sufrió una fractura en la pierna derecha, dos costillas rotas, un hombro dislocado, un fuerte golpe en la cabeza, traumatismo cervical entre raspaduras y golpes por todo su cuerpo. Afortunadamente, lo trajeron a tiempo y logramos intervenirlo. -El doctor le explicó a detalle lo que había sucedido.
-Pero, Natasha ¿Cómo está ella?
-Mmmm... La agente Romanoff sufrió algunos golpes y raspones solamente. Al parecer usted la protegió con su cuerpo, recibiendo todo el impacto. Tuvo más suerte que usted... Pero bueno, lo tendremos en observación hasta mañana y dependiendo de cómo reaccione al tratamiento, podremos darle de alta en la mañana. -Agregó el hombre, haciendo una pequeña pausa mientras hacía unas anotaciones en su bitácora.
-Podrá ir a casa y descansar, pero tendrá que estar en absoluto reposo y seguir al pie de la letra las instrucciones que le daremos para que su recuperación sea más rápida y no quede secuela alguna.
-¡Oh, Ok, Doc. Gracias! -El soldado estaba angustiado, no sabía nada de la pelirroja. Durante el día solo había recibido la visita de Sam, Fury y Sharon. Que lo acompañaron un rato. Fury le había dado vacaciones obligatorias, así que tendría bastante tiempo para recuperarse.
A la mañana siguiente, Rogers estaba listo para regresar a su departamento. Por fin, le habían dado de alta, Sam había quedado de ir a recogerlo, pero ya llevaba más de 15 minutos esperando y aquel hombre no aparecía.
-Hola soldado ¿Listo para ir a casa? -Esa voz... Steve levantó la vista y ahí estaba, recargada en el marco de la puerta de su habitación con su típica sonrisa burlona, despreocupada de todo.
-Estaba a punto de pedir un taxy ¿Dónde está Sam? -Fueron sus primeras palabras.
-Amm, Si... hola.. Natasha! ¿Cómo estás? -Oh bien, me encuentro muy bien, gracias por preguntar. -Le dijo ella en tono burlón.
-Y Sam... Por cierto, tuvo que salir de la ciudad por unos días... Así que... Aquí estoy. -Le dijo en tono serio esta vez, cambiando las facciones de su cara, ahora sin expresión alguna.
El cap no pudo evitar avergonzarse, había sido grosero con su compañera. Después de todo había ido hasta ahí para llevarlo a su departamento. Solo pudo bajar la mirada y pedir una disculpa.
