Steve entre abrió su boca mientras se resistía a saborear sus labios al tener a Nat tan cerca de él, ofreciéndole un pedazo de aquel chocolate que aseguró no compartiría con él. La rusa, por otro lado, estaba evitando no reír ante la cara de bobo que se dibujó sobre el americano así que sin esperar más, tomó sus mejillas entre sus manos y dejó caer todo su peso sobre su torso en espera de que él tomara lo que le pertenecía y todo lo que el quisiera también... Pero un extrañó crujido los hizó a ambos fruncir el entre cejo, reteniendo la respiración por completo para agudizar sus sentidos...
-¿Qué eso? -Susurró Rogers contra la boca de la pelirroja, subiendo sus manos a su cintura como si de alguna forma pudiese protegerla de todo mal con tan sólo saber que la sostenía junto a él.
-Cállate... -Nat apenas pudo pronunciar con el chocolate esperando aún entre sus labios.
Ambos aguardaron en silencio unos segundos hasta que un fuerte crujido de algo quebrándose debajo de ellos los hizo reaccionar al instante y a la vez rodar como dos salchichas frías sobre la cama hasta estrellarse contra la dura madera del piso de aquella habitación, para después reventar ambos en una carcajada adolorida y divertida.
-¡Auch! Me acabas de romper la espalda, Steve... -Natasha no podía parar de reír, tendida sobre el suelo con el grandísimo y sexy fósil sobre ella, aplastándola.
-Ya encontré el problema... -Respondio Steve a carcajadas, sintiendo que el estómago no dejaba de cosquillearle y de doler.
-Malditas polillas... -Nat se quejó entre risas mientras mirada debajo de la cama una de las patas de la base de madera hecha trizas.
-¿Te golpeaste muy duro? Intenté sostenerte, pero me fui sobre ti, lo siento. -El Cap elevó su mano para acariciar su cabeza y tallar sus sienes con su pulgar.
-Creo que me enterraste el codo o algo en mis pechos... -Nat sentía que el aire ya le faltaba de tanto reír.
La rusa no tardó en subir una de sus manos para tomar su seno derecho y ejercer presión para tallarlo mientras lloriqueaba y reía al mismo tiempo.
-Lo siento mucho, Natty... -Steve se preocupó en seguida, levantándose de encima de ella rápidamente para levantarla entre sus brazos y regresar al sofá de antes para sentarla ahí mientras quitaba todo lo que antes habían estado usando para cortar su cabello.
-He recibido peores golpes... -Nat sonrió para enseguida dejar ir su espalda contra el respaldo del sofá.
-No... En verdad lo siento mucho, pude romperte un hueso o algo... -El Cap se lamentó una vez que estuvo de regreso para ponerse de rodillas frente a Nat para quedar a su altura y poder revisar que no tuviera algun golpe en la cabeza.
-Tranquilo abuelo, no soy de cristal... -Nat trató de parar ya sus risas al notar la evidente y boba preocupación del americano.
-Si, ya sé, ya sé, eres la letal Viuda Negra... -Se burló divertido, ganándose un golpe con su palma en la frente.
-¡Auch! Solo jugaba... -Se quejó mientras ella negaba con la cabeza aún sonriendo.
-Creo que dormiremos en el suelo, esta noche... -Nat se sintió decepcionada de haber sido interrumpidos, un minuto más y hubiese probado sus labios finalmente.
-Podemos bajar el colchón al piso... -El rubio soltó un suspiro de alivio al no encontrar nada grave en su pelirroja.
-Puede haber ratas, Steve... Te morderán el trasero mientras duermes. -Nat soltó una risita divertida que lo hizo mirarla mal y después reír junto con ella.
-La próxima vez buscaremos una casa que no lleve años abandonada... -Nat miró esta vez en dirección a la pata rota de la cama, soltando otra cargada divertida que confundió al rubio y lo hizo reír también para enseguida sentarse a su lado.