CAPÍTULO 39 POR SEGUNDA VEZ RESCATADA (Aureliano Y Mariana)

8K 984 23
                                    

Hola. Para quienes quieren más, les dejo  estos dos capítulos. Espero que sean de su agrado y los disfruten.

Aureliano iba sumido en sus pensamientos, esa tarde había sido sumamente difícil, sus sesiones de fisioterapia habían resultado algo complicadas y dolorosas, sin contar con que sus sesiones se las había dado otra persona diferente a su fisioterapeuta de costumbre, quizás esa era la razón por la que había sido tan difícil, por otra parte estaba el hecho de que Mariana no se había pasado por ahí ni siquiera por unos minutos como tenía por costumbre hacerlo cuando se encontraba demasiado atareada como para acompañarlo por más tiempo, a pesar de que había asegurado de que lo haría, aunque pensándolo bien ahora lo agradecía porque no le agradaba que lo viera en sus momentos de vulnerabilidad.

Una de las enfermeras asignadas a atenderlo especialmente a él lo conducía en su silla de ruedas de regreso a su habitación.

Después de su último ataque de histeria se había acordado por el bien de todos asignar un equipo de enfermeros y enfermeras que lo atendieran sin que hubiera necesidad que alguien diferente lo hiciera y sus médicos eran Mariana y su supervisora, de ahí en más nadie entraba a esa habitación, a menos que fuera acompañado por alguno de ellos y con permiso de la supervisora.

Se dirigían por un largo pasillo flanqueado por puertas cerradas, por las cuales pasaban sin prestar mayor atención, al acercarse a una área en donde almacenaban equipo médico, Aureliano alcanzó a escuchar voces, primero pensó que se trataba de personal médico, pero al acercarse se dió cuenta de que se trataba de una discusión, sabía que no era de su incumbencia, pero su instinto combativo se puso en acción, no pensaba intervenir, solo hacer notar su presencia para que los ánimos se calmaran, pero al aparecer ante su vista las personas involucradas no se pudo contener.

*****
Mariana caminaba con prisa por los pasillos del hospital, el área de fisioterapia aún se encontraba alejada de donde ella se encontraba, sabía que no llegaría para ver el avance de Aureliano, pero al menos lo alcanzaría para traerlo de regreso a su habitación.

Al pasar por el área de suministros, se encontró con Marcelo, uno de los médicos del Hospital, era un hombre varios años mayor que ella y desde el primer momento que llegó a trabajar a ese lugar, empezó a tratar de cortejarla, aunque ella siempre lo rechazó, en un principio se sintió halagada, él era agradable y bien parecido, gran parte del personal femenino del hospital suspiraba por él, pero conforme pasaba el tiempo y ella se mantenía firme en rechazarlo, dejó de ser agradable, él empezó a obsesionarse con ella y ahora se sentía acosada. Lo bueno era que desde que la habían transferido al área, especial del hospital, sus encuentros eran mínimos, había semanas en que ni siquiera de lejos lo veía y eso era un enorme alivio para ella.

Sin embargo, para, su mala suerte ahí estaba de nuevo, ella trató de pasarlo por alto y siguió su camino, pero él se movió con rapidez.

_ ¡Mariana! ¡Que gusto verte! - la detuvo por el brazo.

_Doctor Hamilton. - le dirigió una mirada fría.

_Por favor, no seas tan formal. - sonrió. _tenía muchas ganas de verte.

_Tengo prisa. - intento soltarse de su agarre para seguir su camino.

_Concédeme solo unos minutos. - insistió, arrastrándola unos cuantos pasos al interior.

_De verdad no puedo. - empezó a ponerse nerviosa, él era alto y fuerte, si se ponía difícil ella no tendría oportunidad contra él.

_No te hagas la difícil conmigo. - soltó su brazo pero la acorralo poniendo sus manos sobre la pared a los lados de ella.

UNA OPORTUNIDAD. No.3️⃣ // SERIE HOMBRES DE LA SIERRA. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora