Algunas semanas pasaron, las chicas ya conversaban con Rogers para sacarle algún beneficio, pero Bucky no se había movido para nada. Seguía en su posición de admiración sin ningún movimiento, porque ya su "fuerza de voluntad" se fue al carajo. No estaba seguro de poder acercarse. Lo bueno del asunto es que Steve no es ningún idiota, sabe bien las intenciones de las chicas y no es fácil que lo manipulen.
Bucky decidió ir por unos libros para estudiar en su próximo examen, pero se distrajo con unos nuevos que habían de Stephen King y Dan Brown, le gustaba leer terror pero no verlo, por alguna extraña razón. Steve estaba ahí, siempre después de su almuerzo se quedaba leyendo un rato. Bucky sabía que andaba por allí, ya lo tenía calculado pero no pensó en que estaría detrás suyo.
El rubio estaba revisando algunos exámenes, pero quería distraerse un rato antes de seguir. Al tomar uno de los libros, pudo ver el otro pasillo y ahí estaba Bucky, revisando el nuevo material. Steve lo reconoció, era el chico de cabello largo de su clase de la mañana. Era el tipo reservado que no hacía demasiadas preguntas y se limitaba la mayoría del tiempo a su cerrado círculo de mejores amigos. Las únicas interacciones que ha tenido con él son cuando le entrega trabajos pendientes. Era un chico atractivo basándose en su gusto, pero no iba a hacer un movimiento sabiendo que era su profesor. Traería muchos problemas con la universidad y si era honesto, no quería perder ese empleo, la paga es muy buena. Se limitó a observarlo mientras analizaba su libro. ¿Podría al menos entablar una amistad con él? ¿Por qué no?
Trató de encaminarse al pasillo donde estaba James. Bucky lo miró de reojo y al ver que estaba "distraído" revisando unos libros, lo vio con un poco más de descaro. Steve ya había notado que él se le quedaba viendo y sonrió internamente, al menos había llamado su atención. Ese momento fue interrumpido unos breves segundos.
—¡Steve, hola! —Sharon siempre buscando acercarse. Bucky volvió a su libro, rodando los ojos.
—Eh, hola.
—¿Cómo has estado? Aún me debes un café. —Ríe.
—¿En qué momento...? —pensó. Sin embargo, suspiró.— No tenía idea.
—Sí, lo hablamos el primer día. —Hace un leve puchero.— Pero no importa, ¿qué haces aquí?
—Reviso exámenes.
—¿Y entonces qué haces con un libro de misterio?
—Me distraigo.
—Ah, entiendo. Oye, ¿qué día te parece que salgamos, eh?
—No lo sé. Tengo que ver.
—¿Salir? ¿Ya te olvidaste de mí? —Salieron otras dos estudiantes por atrás.
—Bueno, al menos él me regaló un lapicero. —Bucky miró la situación y rodó sus ojos de nuevo.
—Se te juntaron las vacas, Rogers. —Piensa para cambiarse de pasillo y evitar ese momento incómodo. Al ver que el castaño se había cambiado de pasillo, suspiró frustrado.
—Ahora no estoy interesado en salir con nadie, menos con gente de trabajo.
—Steve, qué amargado... —Se acercó una de las chicas a él.— ¿No sería divertido estar envuelto en una situación algo comprometedora con-...
—No.
—No me dejaste terminar. —El mayor suspiró.
—Si me disculpan, estoy ocupado por ahora. Tengo muchos exámenes por revisar.
—¿No quieres compañía?
—No, gracias. —Se cambió de pasillo una vez más y miró a James aún hojeando el mismo libro. Al notar una sombra, Bucky levantó la vista y ambas miradas se cruzaron. Esto fue un poco incómodo para el castaño, así que volvió su atención al libro. Steve no dejó de verlo y pasó a su lado, fingiendo tomar una libreta.— Lamento el escándalo.

YOU ARE READING
𝐌𝐫. 𝐑𝐨𝐠𝐞𝐫𝐬
Hayran Kurgu𝐄𝐱𝐚𝐜𝐭𝐨, 𝐩𝐫𝐨𝐛𝐚𝐛𝐥𝐞𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐬𝐞𝐚 𝐮𝐧𝐚 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚 𝐝𝐞 𝐜𝐮𝐚𝐧𝐝𝐨 𝐉𝐚𝐦𝐞𝐬 𝐁𝐚𝐫𝐧𝐞𝐬 𝐚𝐬𝐢𝐬𝐭𝐞 𝐚 𝐥𝐚 𝐮𝐧𝐢𝐯𝐞𝐫𝐬𝐢𝐝𝐚𝐝 𝐲 𝐬𝐞 𝐞𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐫𝐚 𝐚 𝐮𝐧 𝐩𝐫𝐨𝐟𝐞𝐬𝐨𝐫 𝐪𝐮𝐞 𝐫𝐨𝐛𝐚 𝐦𝐢𝐫𝐚𝐝𝐚𝐬 𝐬𝐨𝐥𝐨...