𝐌𝐫. 𝐑𝐨𝐠𝐞𝐫𝐬

Capítulo 3

—¿Me puede ayudar?

—Por supuesto, dime.

—Bien, si hago esto así, ¿me afectará los demás resultados?

—¿Cuáles? Oh... ¿Quién les enseñó así?

—El anterior.

—Pues técnicamente está bien, pero ese procedimiento es muy largo. Mejor házlo así, mira. Solo debes sacar los primeros dos resultados y luego... —Steve siguió explicándole. Eran las clases extra, usualmente solo habían dos a tres estudiantes, pero Bucky se había quedado para evacuar dudas.

—Eso está mucho mejor.

—¿Ves? Está más fácil así.

—Me ahorró la mitad del examen. Gracias. —Sonríe.

—No es nada, James.

Steve se quedó sentado a su lado en vez de su escritorio, solo abrió su libro y siguió leyendo. Era en caso de que el chico tuviera alguna otra duda, y también para mirarlo discretamente sobre el libro de vez en cuando. Creyó que se veía lindo estando concentrado. Bucky le empezaba a gustar más, pero sabía que era más como una relación platónica. Jamás podría acercarse a James como algo más, necesitaba su trabajo y además podría meterlo a él en problemas.

—Creo que ya terminé.

—Déjame ver... —Toma la hoja de resultados y la comparó con la suya.

—¿Soy libre de irme, profesor? —Steve sonrió y asintió.

—Así es. Sé libre, lo hiciste muy bien. —Bucky también sonrió y tomó sus cosas para guardarlas.

—Lo malo es que ahora tengo que ir a hacer trabajo comunitario.

—¿Ah, sí? ¿Cuánto harás?

—Dos horas nada más. Luego llegaré a dormir a mi casa.

—Suena razonable.

—Sí. —Ríe.— Entonces, lo veré mañana.

—Hasta entonces, James. Disfruta tu siesta.

—Gracias, adiós.

Mientras Bucky se iba, Steve lo persiguió con la mirada. Era atractivo por supuesto, y siempre pasaba chequeándolo en sus clases.
El castaño fue a tomar agua y luego fue donde su coordinadora para ver qué le tocaba hacer hoy, la cual solo le dijo que debía seguir en la recepción de la universidad, acomodando papeles.

Las horas extra del rubio terminaron y decidió ir a entrenar un poco. El gimnasio estaba abierto para todos y le gustaba ir cuando estaba más vacío. Tomó su toalla, se cambió la ropa y fue a hacer algunos ejercicios varios antes de irse a su casa.
Bucky ya casi terminaba de acomodar, solo debía los papeles al piso de arriba. Luego, cuando ya iba camino a la salida, buscó sus audífonos en su bolso y no los encontró.

—No puede ser, ¿los perdí? —Dijo volviendo su bolso casi al revés.— ¿Dónde...? Oh... —Finalmente recordó en qué lugar estaban.— Mierda.

Tuvo que devolverse pronto y caminó, ya que quedaba lejos de la salida. Se fue al siguiente bloque de la universidad, el cual era deportes. Bajó las escaleras y fue al sector donde estaban los vestidores.

—Maldita sea, —Abre pronto su casillero.— ahora debo volver por tu culpa. —Saca los audífonos y los guarda en su bolsillo.

Luego de cerrar el casillero y ponerle llave, iba a dirigirse a la salida pero oyó la puerta de las duchas abrirse. Se puso un poco nervioso, se supone que no debería haber nadie. Escuchó pasos y luego vio que encendieron el sector donde él estaba. Caminó al otro lado del pasillo, estaba seguro que incluso debería estar cerrado.

—Si son las gemelas del Resplandor, me va a dar algo, lo sé... —Susurra.

Se asomó al pasillo de nuevo y solo era Rogers, con su cuerpo mojado y una toalla en su cintura. Iba a sacar su ropa para regresar a su casa. Bucky abrió leve su boca, contemplando la musculatura de la espalda del rubio. Se quedó allí atrás mirándolo, pensó que era el hombre que mejor estaba hecho del planeta Tierra. Agradeció a la existencia que hubiera tenido que devolverse por sus audífonos.
En un momento, Steve tuvo que quitarse la toalla para secarse su cabello, lo cual dejó todo su cuerpo totalmente expuesto. El castaño solo sintió sus mejillas arder mientras miraba el sensual cuerpo de su profesor desnudo, y no solo eso, también sentía el resto de su cuerpo arder pero iba a tomar el autobús, debía calmarse.

—Rogers, maldita sea contigo...

En ese momento, se le ocurrió una idea. Sacó su smartphone, le bajó todo el volumen y verificó que el flash estuviera apagado. Apuntó su cámara a él y lo enfocó.

—Prometo que será solo para mí.

Finalmente, terminó capturándolo desde atrás y el mayor no se dio cuenta. Se quedó allí observándolo unos minutos más hasta que empezó a vestirse. Luego, él salió y Bucky se quedó algo alterado en los vestidores. Se mordió su labio inferior con una sonrisa y se sentó en el suelo mientras se le bajaba la temperatura. Mientras encendió de nuevo el dispositivo y mensajeó a su mejor amiga.

Bucky: Hey, Nat. 🌚

Natasha: ¿Qué sucede?

Bucky: Hoy es un día hermoso, ¿verdad? 😌

Natasha: ¿Qué? 😂

Bucky: El universo me adora. 💕

Natasha: ¿Podría saber qué sucede?

Bucky: Oh, nada. Solo de casualidad vine a los vestidores y Rogers estaba entrenando. 🤗

Natasha: ¿Y solo por eso estás así? 🙄

Bucky: No me dejas terminar, niña. Estaba entrenando y luego se duchó.

Natasha: ¿Lo viste ducharse? Pervertido. 👀

Bucky: No, me di cuenta de que estaba ahí cuando se estaba secando. ¿Adivina quién lo vio desnudo? 🌚

Natasha: James... 😳😳😳

Bucky: ¿Quieres verlo? 🌚

Natasha: No lo sé. No es correcto que yo vea las nudes de tu novio, Bucky. 🤔

Natasha: Pero ya que insistes... 🌚

El castaño rió y le envió la foto que le había tomado.

Natasha: ¿Quéeee? 😮 Ese no es él.

Bucky: Por supuesto que es él. Es todo un sugar daddy. 🌚

Natasha: Cualquier chica te estaría envidiando en este momento. Ah, y cálmate un momento. 😂

Bucky: ¿Por qué crees que aún estoy en los vestidores? No puedo salir en estas condiciones. 😂

Natasha: No puede ser... 🤦🏻😂

Bucky: ¡No se la vayas a pasar a nadie, ¿oíste?! 😰

Natasha: Las nudes de Rogers están a salvo conmigo, querido. 💪🏻

Bucky: Gracias, nena. 💕

El castaño suspiró, pensando en Steve y acomodándose un poco su pantalón para poder regresar a casa.

[Al día siguiente]

Mientras el rubio escribía algunos procedimientos en el pizarrón, Bucky solo se imaginaba la perfecta vista que Rogers le brindó ayer.

—Hey, Buck...

—Dime.

—Ahora por tu culpa solo puedo verlo desnudo.

—Este hombre es un simple placer visual. Desnudo o no.

Y sí, total razón.